EL Rincón de Yanka: CONTAGIAR

inicio














Mostrando entradas con la etiqueta CONTAGIAR. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CONTAGIAR. Mostrar todas las entradas

miércoles, 16 de julio de 2025

LIBRO "PERSUASIÓN POLÍTICA": EL ARTE DE INFLUIR EN LA ERA DIGITAL 🎤 por MATHEUS MARTINS SOARES

PERSUASIÓN 
POLÍTICA
El arte de influir en la era digital


¿Conoce esa sensación cuando lee un mensaje que simplemente lo atrapa y le hace querer actuar de inmediato? 
¡Esto es lo que llamamos “el poder de persuasión”! Estás a punto de aprender todas las técnicas y trucos para despertar esa misma reacción en las personas con tus palabras. No creas que esto es algo de otro mundo, no. ¡Nada de eso! Te mostraré cómo usar las palabras correctas, crear oraciones impactantes y estructurar tus mensajes de una manera irresistible. 
Queremos que realmente conectes con tu público objetivo. Esto es lo que marcará la diferencia a la hora de convencerles de actuar.

En el centro de esta estrategia está el poder de las técnicas de persuasión en política.

Influir o ser influenciado 

La cuestión de querer influir o ser influenciado es una dicotomía que ha permeado las interacciones humanas desde tiempos inmemoriales. En un mundo cada vez más conectado, esta elección se ha vuelto más evidente y relevante que nunca. En una sociedad que valora la individualidad, la autenticidad y la capacidad de moldear el propio destino, la influencia juega un papel central en nuestras vidas, afectando nuestras decisiones, opiniones y comportamientos. 
Quiero mostrarte cómo explorar las complejidades de la influencia y el deseo de ser influenciado, considerando los diferentes aspectos de esta dinámica en el ámbito personal, social y digital. Examinemos las motivaciones detrás de ambas caras de la moneda, los beneficios y desventajas de cada elección, y cómo esto se relaciona con la construcción de identidad y el impacto en la sociedad. 

La búsqueda del poder y el cambio 

Influir, en esencia, implica la capacidad de afectar las opiniones, decisiones y acciones de otras personas. Puede verse como un acto de liderazgo, en el que alguien utiliza su conocimiento, carisma y habilidades de persuasión para guiar a otros hacia ciertas metas o ideales. Quienes quieren influir a menudo anhelan poder y tienen una visión específica del mundo que quieren crear. Las motivaciones para querer influir pueden variar ampliamente. Algunos individuos buscan la influencia como una forma de poder personal, buscando obtener una ventaja sobre los demás o lograr metas ambiciosas. Otros tienen motivaciones más altruistas y desean utilizar su influencia para realizar cambios positivos en la sociedad mediante la promoción de causas sociales o ambientales. 
Poder personal: Para muchos, la influencia es una herramienta para obtener poder personal y lograr sus objetivos. Esto puede incluir influir en personas en posiciones de autoridad, como líderes políticos o ejecutivos de empresas, para que tomen decisiones que beneficien sus intereses. El deseo de influir puede estar motivado por la ambición personal, la codicia o el deseo de control. 
Cambio social: por otro lado, muchos individuos quieren influir para lograr cambios positivos en la sociedad. Esto puede implicar defender causas como la igualdad de género, la justicia racial, la preservación del medio ambiente o la erradicación de la pobreza. Quienes buscan influencia por razones altruistas a menudo quieren ver un mundo mejor y están dispuestos a utilizar su influencia para marcar la diferencia.

Influir positivamente puede traer una serie de beneficios tanto al influencer como a quienes están siendo influenciados. 
Logro de objetivos: la capacidad de influir puede ayudar a las personas a alcanzar sus objetivos personales y profesionales. Puede ser una herramienta valiosa para avanzar en su carrera, garantizar el éxito empresarial u obtener el apoyo necesario para causas sociales importantes. 
Cambio positivo: la influencia también se puede utilizar para lograr cambios positivos en la sociedad. Quienes tienen la capacidad de influir pueden ayudar a crear un mundo más justo, igualitario y sostenible marcando la diferencia en cuestiones críticas.

Autoestima y Reconocimiento: Ser capaz de influir en los demás a menudo conduce a un aumento de la autoestima y el reconocimiento social. Las personas que tienen éxito en la influencia suelen ser admiradas y respetadas por su capacidad de liderazgo. 
Ser influenciado: la búsqueda de identificación y conexión Por otro lado, ser influenciado implica estar dispuesto a escuchar, aprender y dejarse moldear por otras personas, ideas o tendencias. Esto puede verse como una demostración de humildad y apertura al cambio. Quienes eligen ser influenciados a menudo buscan identificación, pertenencia y orientación. 

Motivaciones para ser influenciado 

Las razones para elegir dejarse influenciar pueden ser igualmente diversas. Algunas personas valoran la perspectiva y la sabiduría de los demás y buscan aprender y crecer a través de la influencia de mentores, líderes o figuras inspiradoras. Otros pueden verse influenciados por la presión social o el deseo de encajar en un determinado grupo o cultura. 
Aprendizaje y crecimiento: para muchos, ser influenciado es una forma eficaz de aprender y crecer. Al absorber conocimientos y perspectivas de otras personas, puede ampliar sus horizontes, adquirir nuevas habilidades y mejorar como individuo. 
Identificación y pertenencia: Ser influenciado también puede proporcionar un sentido de identificación y pertenencia. Muchos buscan influencia para sentirse conectados con un grupo, cultura o comunidad específica. Esto puede ser especialmente relevante en un mundo donde la identidad y la aceptación juegan un papel importante.

Elegir dejarse influenciar también puede traer una serie de beneficios a la vida de un individuo.
Aprendizaje Continuo: Al estar abierto a las influencias, podrás seguir aprendiendo a lo largo de tu vida, adquiriendo nuevos conocimientos y habilidades que pueden ser aplicados en diferentes áreas. 
Conexión social: Ser influenciado a menudo conduce a una mayor conexión social. Al alinearse con ideas o grupos influyentes, puede desarrollar relaciones significativas y encontrar un sentido de pertenencia. 
Flexibilidad y adaptabilidad: la capacidad de ser influenciado también demuestra flexibilidad y adaptabilidad, características valiosas en un mundo en constante cambio. Aquellos que están dispuestos a adaptarse a nuevas ideas y perspectivas están mejor preparados para enfrentar desafíos y sobresalir.
En la sociedad moderna, la elección entre influir o ser influenciado no siempre es clara o estática. En muchos casos, las personas cambian entre estas dos posiciones según el contexto y las circunstancias. Además, la línea entre influenciar y ser influenciado a menudo se vuelve borrosa a medida que se entrelazan las interacciones sociales, culturales y digitales. 

Influencia Digital y Redes Sociales 

Uno de los principales impulsores de esta complejidad es el aumento de las redes sociales y la influencia digital. Plataformas como Facebook, Instagram, Twitter y YouTube han brindado a cualquier persona con acceso a Internet la capacidad de influir y ser influenciado a escala global. Los influencers digitales, en particular, se han convertido en figuras destacadas que dan forma a las opiniones y comportamientos de millones de seguidores.

Influencia digital: quienes eligen ser influenciados a menudo lo hacen siguiendo a personas influyentes digitales cuyas vidas y opiniones pueden servir como fuente de inspiración o entretenimiento. Los influencers digitales tienen la capacidad de crear tendencias, promocionar productos e incluso incidir en el cambio social. 
Ser influenciado negativamente: Sin embargo, la influencia digital también puede tener efectos negativos, especialmente entre los más jóvenes. La presión para ajustarse a estándares de belleza poco realistas, la búsqueda de validación en las redes sociales y la exposición al discurso de odio son ejemplos de cuán dañina puede ser la influencia digital. 
Influir en las redes sociales: por otro lado, muchas personas utilizan las plataformas de redes sociales para expresar sus opiniones, promover causas y construir comunidades en línea. Quienes buscan influir pueden aprovechar estas plataformas para llegar a una audiencia más amplia y movilizar apoyo para sus causas.

Identidad y autenticidad

Otro aspecto importante a considerar a la hora de elegir entre influir y ser influenciado es la construcción de identidad y la búsqueda de autenticidad. En un mundo donde se valora la individualidad, la presión de ser auténtico y al mismo tiempo encajar en las normas sociales y culturales puede ser un desafío. Construcción de Identidad: Muchos individuos optan por dejarse influenciar en la búsqueda de modelos a seguir en la construcción de su identidad. Pueden inspirarse en figuras públicas, líderes espirituales u otros modelos a seguir. 
Desafío de autenticidad: por otro lado, la presión por ser influyente puede crear un desafío a la autenticidad. Algunos pueden verse tentados a moldear sus identidades de acuerdo con las expectativas de los demás en lugar de permanecer fieles a sí mismos.

Responsabilidad moral

La elección entre influir y ser influenciado también está intrínsecamente ligada a la responsabilidad moral. Quienes desean influir tienen la responsabilidad de utilizar su influencia de manera ética y responsable, considerando el impacto de sus acciones en los demás y en la sociedad en su conjunto. 
Responsabilidad de los influencers: los influencers tienen el poder de moldear las opiniones y comportamientos de sus seguidores, y esta influencia debe usarse de manera responsable. Promover información falsa, incitar al odio o explotar las vulnerabilidades de las personas son ejemplos de comportamientos que pueden resultar perjudiciales. 
Elección consciente: Aquellos que eligen ser influenciados también tienen la responsabilidad de tomar decisiones conscientes sobre a quién y qué siguen. Creer ciegamente en información o seguir a personas influyentes dañinas sin cuestionarlas puede tener consecuencias negativas.

La elección entre influir o ser influenciado es una decisión que todo el mundo enfrenta en su vida y, a menudo, esta elección no es definitiva. 
La sociedad moderna presenta una compleja red de influencias, desde interacciones personales hasta el mundo digital en constante evolución. Ambas opciones tienen sus motivaciones, beneficios y desafíos. 
Lo importante es reconocer la complejidad de esta dinámica y tomar decisiones que contribuyan al crecimiento personal, al bienestar social y a la construcción de un mundo más justo e igualitario.

PERSUASIÓN POLÍTICA - El arte de influir en la era digital (1) by clubrecreacionaluchpa


domingo, 23 de marzo de 2025

LIBRO "VIDA DE CRISTO" por FULTON J. SHEEN 🔥

VIDA DE CRISTO 
(1968)

Esta Vida de Cristo ha tenido largos años de gestación. Constituye la obra más completa del obispo Fulton Sheen y es fruto de cinco lustros de investigaciones y estudios. Pero la comprensión más profunda de la unidad inseparable que forman Cristo y su cruz, pensamiento central de la obra, vino a la mente del autor cuando se vio muy cerca de la cruz en horas de obscuridad, dolor y aflicción. 
El saber se adquiere en los libros; pero la penetración de un misterio proviene del sufrimiento. No se trata de una vida de Cristo estrictamente cronológica dentro de un marco geográfico. 

Esta obra tampoco tiene nada que ver con la alta crítica; este asunto ya ha sido ampliamente tratado por otros autores. Pero aunque el autor de una biografía de Cristo no mencione autores ni teorías de la alta crítica, el conocimiento de ellos no deja de ser una premisa indispensable para escribir sobre este tema. 
No pretende el autor relatar simplemente una vez más los incidentes de la vida de Cristo, que nos son ya tan familiares, sino ofrecer una exposición dramática y dinámica de la significación de Jesucristo como salvador del mundo y dar luz a las almas para que comprendan que todo sufrimiento es realmente la «sombra de la mano de nuestro Salvador extendida en ademán de acariciarnos». 

La obra de SHEEN es un mensaje de actualidad dirigido a cuantos vivimos en este mundo moderno que ha divorciado a Cristo de su cruz. Pero un Cristo sin un sacrificio que reconcilie al mundo con Dios es un predicador ambulante, barato, afeminado, incoloro, que si merece la popularidad por su gran sermón de la montaña merece también la impopularidad por cuanto afirmó acerca de su divinidad, por un lado, y cuanto manifestó acerca del divorcio, el juicio final y el infierno, por otro. 

Con frecuencia nos encontramos con este Cristo sentimental, remendado con mil lugares comunes, sustentado a menudo por etimologistas académicos, incapaces de ver la Palabra por encima de las letras. 
Sin su cruz, Cristo queda reducido a una fraternidad sin lágrimas. Nada más distante de este Cristo que el protagonista de la obra de FULTON SHEEN, ya que el autor sabe proyectar nuevos raudales de luz sobre los pasajes del evangelio y encuentra inéditos significados en sucesos tantas veces referidos. 
Es un libro escrito y empapado de pasión y de amor por JESUCRISTO. Y, eso contagia...

PREFACIO

Satán puede aparecerse bajo numerosos disfraces, en forma de Cristo, y en los últimos tiempos aparecerá como un bienhechor y un filántropo, pero Satán nunca se ha aparecido ni se aparecerá jamás con llagas en el cuerpo. Sólo el amor del cielo puede ostentar las señales del don más grande que el amor nos hizo en una noche que no volverá. En realidad, sólo hay dos filosofías de la vida: para una, primero es el banquete y luego el dolor de cabeza; para la otra, primero es el ayuno y luego el banquete. Los goces diferidos por el sacrificio resultan siempre los más dulces y duraderos. Los antiguos enseñaron que la prosperidad o el éxito que alguien disfruta sin ningún sufrimiento provoca el desagrado de los dioses. Heródoto nos habla de un rey egipcio que rompió las relaciones que le unían con su amigo Polícrates, tirano de Samos, porque nada llegaba a empañar la prosperidad de éste, ni siquiera un «punto de amargura que brotara en medio de aquella fuente de dulzura». 

El cristianismo, a diferencia de como suele empezar cualquier otra religión del mundo, comienza con catástrofe y fracaso. Las religiones «optimistas» de inspiración psicológica se hunden en la calamidad y se marchitan en la adversidad. En cambio, la vida del fundador del cristianismo empieza con la cruz, pero termina con una tumba vacía y la victoria. La vida de Jesucristo difiere de todas las otras vidas en muchos aspectos, tres de los cuales vale la pena destacar: 1. La cruz se halló al fin de su vida en el tiempo, pero en el comienzo de ella en cuanto a la intención y propósito de su venida a este mundo. De ahí que sus biógrafos, que fueron martirizados en testimonio de la verdad que dejaron escrita, dedicaran un tercio de los tres primeros evangelios y un cuarto del cuarto evangelio a describir los sucesos de su pasión y resurrección.

2. De la misma manera que el hombre no procede sólo de la naturaleza, puesto que en su alma nos muestra una misteriosa x que no se halla contenida en sus antecedentes químicos y biológicos, así tampoco Cristo procedía exclusivamente de la humanidad. 3. Su legado no fue un tratado de ética o una colección de preceptos morales, ni tampoco un despertar al pecado social porque los hombres no quisieran oír hablar de pecado personal, sino una confrontación de la culpa humana con el amor de Dios, amor que perdona, amor que a Dios le cuesta algo. Odiando el pecado y amando a los pecadores; condenando el comunismo y amando a los comunistas; despreciando la herejía y amando a los herejes; recibiendo de nuevo a los errados en el tesoro de su corazón, pero sin admitir jamás el error en el tesoro de su sabiduría; perdonando a los pecadores que la sociedad ya había condenado, pero mostrándose intolerante ante los que pecaron y cuyo pecado permaneció impune a los ojos de los hombres, reservó, sin embargo, sus más destructivas explosiones de ira para aquellos que siendo pecadores negaron el pecado, para aquellos que siendo culpables dijeron que sólo tenían un complejo. 

Finalmente, fue Él quien se desató en explosiones de ira al contemplar proféticamente la condenación y ruina de aquellos enfermos de cáncer moral que rehúsan aprovecharse de la medicina que Él adquirió a precio mucho más elevado que la sangre de corderos. El mundo moderno, que niega el delito personal y sólo admite crímenes sociales, que no encuentra sitio para el arrepentimiento personal y lo halla sólo para reformas públicas, ha divorciado a Cristo de su cruz; el esposo y la esposa han sido separados. Lo que Dios había juntado, los hombres lo han desunido. Como resultado, tenemos la cruz a la izquierda y Cristo a la derecha. Cada uno ha estado aguardando nuevos compañeros que los adopten en una especie de segunda y adulterina unión. Viene el comunismo y se apodera de la cruz, exenta de significado por sí sola; viene la civilización occidental postcristiana y escoge para sí al Cristo sin llagas. El comunismo ha elegido la cruz en el sentido de que ha devuelto a un mundo egotista una idea de disciplina, de abnegación, de sumisión, de dura labor, de estudio y de consagración a fines supraindividuales. Pero la cruz sin Cristo es sacrificio sin amor. De ahí que el comunismo haya producido una sociedad autoritaria, cruel, opresora de la libertad humana, llena de campos de concentración, pelotones de fusilamiento y lavados de cerebro.

La civilización occidental postcristiana ha elegido a Cristo sin la cruz. Pero un Cristo sin un sacrificio que reconcilie al mundo con Dios es un predicador ambulante barato, afeminado, incoloro, que merece llegar a ser popular por su gran sermón de la montaña, pero que merece también la impopularidad por lo que dijo, por un lado, acerca de su divinidad y lo que manifestó, por otro, acerca del divorcio, el juicio y el infierno. Este Cristo sentimental aparece remendado con mil lugares comunes sustentados a menudo por etimologistas académicos incapaces de ver la Palabra por encima de las letras, o confundidos más allá del reconocimiento personal por un principio dogmático según el cual todo lo que es divino ha de ser necesariamente un mito. Sin su cruz, Cristo queda reducido a un insoportable precursor de la democracia o a un humanitario que enseñó una fraternidad sin lágrimas. El problema que actualmente se plantea es el siguiente: ¿acaso la cruz que el comunismo sostiene en sus manos encontrará a Cristo antes de que el Cristo sentimental del mundo de occidente encuentre la cruz? 

Creemos que Rusia hallará a Cristo antes que el mundo occidental acierte a unir a Cristo con su cruz redentora. Para aquellos que busquen una vida de Cristo estrictamente cronológica dentro de un orden geográfico, recomendamos, como la mejor de todas, la escrita por GIUSEPPE RICCIOTTI, Vida de Jesucristo. Nuestra obra no tiene nada que ver con la crítica bíblica, en parte porque este asunto ha sido tratado ya ampliamente por Lebreton, Grandmaison, Lagrange y otros autores, y también porque ninguna teoría crítica dura mucho más allá de una generación. Bauer cede el sitio a Strauss; Strauss a Wellhausen; Wellhausen a Harnack y a Renán; y ambos lo ceden a Schweitzer y a Loisy. Cuando estas últimas teorías perdieron el apoyo popular, se presentaron Schmidt, Bultmann, Albertz, Betram y otros. Pero los lectores que han seguido las refutaciones científicas y críticas de Bultmann hechas por Leopoly Malevez, René Marlé y otros, saben que están perdiendo ya el apoyo popular entre los exegetas bíblicos. Pero aunque el autor de una biografía de Cristo no haga mención de alguno de los autores o teorías antes indicados, no quiere decir que el conocimiento de ellos no sea una premisa indispensable para escribir sobre este tema. Ninguna forma de crítica, ni siquiera la de Strauss, ha dejado de hacer más profundo el conocimiento de aquellos que primeramente han de conocer los evangelios desde el punto de vista técnico y de crítica antes que se hallen en disposición de tratar de manera adecuada la vida de Cristo.

Vida de Cristo Por Fulton J Sheen by Jimmy Kid

LA VIDA DE CRISTO POR FULTON J. SHEEN

domingo, 24 de noviembre de 2024

PELÍCULA "EL MAESTRO" 1957 🎬🎓🏫


EL MAESTRO (1957)
"La misión de un maestro es la más Sublime que puede existir: modelamos las almas de los niños, les hacemos hombres. Cuántas veces, un maestro con su ejemplo, evita que un niño se aleje del buen camino y, ¡qué maravilloso es verlos crecer!; pasar de una clase a otra; conocerlos desde pequeños y, cuando ya están en condiciones de enfrentarse con la vida, despedirse. De nosotros depende de que esa vida sea más feliz para ellos. Somos nosotros los que formamos a los futuros hombres...".
Don Juan, maestro nacional de una aldea gallega y pintor, es trasladado por el Ministerio a la capital, donde expone sus proyectos sobre la creación de una gran escuela de pintura. Ya en la ciudad, su único hijo, Juan, de ocho años de edad, sufre un accidente mortal. A partir de ese instante los anhelos y proyectos del maestro se derrumban. Pero un día aparece en su clase un niño nuevo que ocupa el pupitre de su hijo...

El maestro es una coproducción hispano-italiana de drama estrenada en 1957, dirigida, escrita e interpretada por Aldo Fabrizi, en la que fue su última película como director. Fue rodada íntegramente en España en doble versión. La española, sustancialmente idéntica, fue dirigida por Eduardo Manzanos Brochero.

El guion de la película está basado en la novela corta "Dabar" de Luis Lucas Ojeda.

La película fue candidata a conseguir el León de Oro del Festival de Cine de Venecia. Además, en España obtuvo el Premio Especial al Actor Extranjero en Película Española (Aldo Fabrizi) y Mejor Argumento Original (Luis Lucas y José Gallardo), otorgados por el Círculo de Escritores Cinematográficos.

El neorrealismo italiano tuvo en el actor, guionista y director Aldo Fabrizi (1905-1990) un buen referente en sus contenidos: su cine, próximo a una sociedad que rechazaba la grandilocuencia cinematográfica en favor de mostrar las relaciones sencillas y humanas de la sociedad del momento, escribió junto a Luis Lucas, José Gallardo y la colaboración de Mario Amendola, el guión de "El maestro" (1957) basado en la novela corta "Dabar" de Luis Lucas Ojeda.

La larga y fructífera carrera de Aldo Fabrizi en el cine, iniciada en 1942,dio pronto buenos resultados con su interpretación como sacerdote en "Roma, ciudad abierta" (1945) de la mano de Rossellini. Seguiría un frondoso camino creativo demostrado en las singulares interpretaciones que le marcarían el camino: "Vida de perros" (1950) de Monicelli, "Una hora en su vida"(1950) de Blasetti, por la que recibió premios y reconocimiento internacional o "El ángel vestía de rojo" (1960) de Nunnally Johnson que junto al elenco internacional Ava Gardner, Dick Bogarde o Joseph Cotten entre un extenso reparto, marcaría definitivamente el buen hacer de Aldo.

"El maestro" (1957) narra los acontecimientos de un maestro de pueblo y de su hijo, destinado a la Escuela Santa María, en la capital, donde además espera noticias para hacer realidad la construcción de una escuela de pintura, lo que resume el contenido esencial de esta agridulce comedia. Alfredo Mayo, Julia Caba Alba, Mary Fernández, Julio Sanjuán, José Calvo, Mercedes Barranco, o el mismo Aldo Fabrizi, más el colorido y variopinto grupo de alumnos nos lleva a vivir desde la proximidad emocional las deficiencias y los anhelos propios de cada cual: bautizos, convivencias, relaciones, conocimientos, aprendizajes, superaciones..., todo mezclado nos da un resultado donde la fugacidad de los acontecimiento irrumpe sin piedad, así como el resultado a los conflictos personales del maestro acompañado por el toque surrealista de un niño, (protagonizado por Marco Paoletti) un pincel y un silbido que entrelaza la trama y que sorprendentemente nos lleva al desenlace de esta coproducción ítalo-española propia del neorrealismo italiano.

Sergio Leone como ayudante de dirección, Luis María Delgado como director adjunto y la música de Carlo Innocenzi y Isidro B. Maiztegui entre un voluminoso equipo técnico, dieron forma a "El maestro", película reconocida y valorada al ser nominada al León de Oro del Festival de Venecia de 1957.

El maestro | Película Completa | Drama

Un docente innovador es requerido por el ministerio para que explique sus proyectos, pero mientras él está en la capital su hijo muere. El maestro se derrumba y sólo la misteriosa aparición de un niño nuevo en su clase le devuelve la ilusión por la enseñanza.

miércoles, 3 de julio de 2024

PELÍCULA "ESTRELLAS EN LA TIERRA (Taare Zameen Par)": CADA NIÑO ES ÚNICO Y ESPECIAL ☆☆☆☆✨🌍

 

ESTRELLAS  EN  LA  TIERRA
CADA  NIÑO   ES   ESPECIAL

Hermosa película, sin duda tendría que ser vista por todo el mundo, especialmente padres y profesores, el mundo necesita altas dosis de empatía para seguir evolucionando.
"Taare Zameen Par" es una película de la India que narra la historia de un niño llamado Ishaan Awasthi quien tiene necesidades especiales debido a dislexia (dificultad especifica en el aprendizaje de la lectura y escritura de un niño que no presenta ningún otro déficit intelectual o sensorial, y que está sometido a un régimen de escolarización normal), lo cual le impide progresar en el colegio; y de Ram Nikumbh, su maestro.

Ishaan Awashi es un niño de 8 años cuyo mundo está plagado de maravillas que nadie más parece apreciar: colores, peces, perros y cometas, que simplemente no son importantes en la vida de los adultos, que parecen más interesados en cosas como los deberes, las notas o la limpieza. E Ishaan parece no poder hacer nada bien en clase. Cuando los problemas que ocasiona superan a sus padres, es internado en un colegio para que le disciplinen. Las cosas no mejoran en el nuevo colegio, donde Ishaan tiene además que aceptar estar lejos de sus padres. Hasta que un día, el nuevo profesor de arte, Ram Shankar Nikumbh, entra en escena y se interesa por el pequeño Ishaan.

¡ATENCIÓN PADRES CON NIÑOS 
QUE TIENEN DIFICULTADES DE LECTOESCRITURA!

Me ha llenado el corazón esta película. Me ha hecho volver a la infancia y recordar muchos momentos en los cuales, como el niño protagonista, mi cabeza estaba principalmente ida hacia fantasías, dibujos, juegos e imaginaciones, lo cual era visto por los demás como un problema, como una indisciplina, como un niño no apto para estudiar que había que dejar por imposible.

Entonces, cuando un pequeño (que por ser así no es tonto ni falto de inteligencia, sino simplemente necesitado de un ritmo distinto) siente como la familia, los maestros y los demás niños te recriminan, te miran raro, sin entender que todos los árboles no tienen el mismo ritmo de crecimiento ni de poda, entonces ese niño incomprendido, sufre mucho, se siente afuerado, se ensimisma, se hacia solitario, insociable, incluso puede hundirse y perecer.

La suerte del niño protagonista de esta preciosa y educativa película es que se cruza en su camino un maestro que nada más verlo, comprende qué es lo que le pasa, entiende su proceso y lo que está ocurriendo dentro de su ser. Este maestro resulta un bendito de Dios, un ángel de la guarda, un salvador, un valedor del débil, segregado e incomprendido ante el mundo y la gente que lo habita.

El director Aamir Khan demuestra con esta película que sabe filmar una historia real como la vida misma, tocando con mucha ternura los sentimientos y las contrariedades por las que cualquier marginado ha de pasar, removernos el alma y la fuente de las lágrimas, y además compaginarlo todo con canciones pegadizas al estilo del cine indio actual de Bollywood, e incluso ser un serio aspirante a suceder al magnífico e imperecedero director indio de "El mundo de Apu", Satyajit Ray.

Bellísima película, una desapercibida aguja de oro en un pajar de miles de filmes intrascendentes llenando las carteleras, la cual será encontrada o vista por muy pocos seres humanos. Yo por lo pronto he cumplido escribiendo de forma gratis y desinteresada sobre esta joya cinematográfica "made in India".

Por último les hago una llamada a los padres que tienen niños con dificultades de lectoescritura: ¡Vean esta película! Les será de mucha utilidad, les abrirá ventanas que quizás no conocían, de las que no se habían percatado o que no sabían que se podían abrir. Será una bendición para ustedes y para sus hijos.



¿Cómo papás, mamás, entrenadores, 
maestros, adultos, vecinos, podemos ver más allá?
¿Podemos ver más allá de las apariencias?
¿Podemos ver más allá de los prejuicios?
¿Podemos ver más allá de las etiquetas?
¿Podemos ver más allá de lo pre establecido?
¿Nacimos para volar o para arrastrarnos?


Un día, Thomas Alva Edison llegó a casa y le dio a su mamá una nota.
Él le dijo a ella: "Mi maestro me dio esta nota y me dijo que sólo se la diera a mi madre".
Los ojos de su madre estaban llenos de lágrimas cuando ella leyó en voz alta la carta que le trajo su hijo.
"Su hijo es un genio, esta escuela es muy pequeña para él y no tenemos buenos maestros para enseñarlo, por favor enséñele usted".
Entonces la madre se dedicó a enseñarle a Edison.
Muchos años después la madre de Edison falleció, y él fue uno de los más grandes inventores del siglo.

Un día él estaba mirando algunas cosas viejas de la familia. Repentinamente él vio un papel doblado en el marco de un dibujo en el escritorio.
Él lo tomó y lo abrió. En el papel estaba escrito:
"Su hijo está mentalmente enfermo y no podemos permitirle que venga más a la escuela".
Edison lloró horas, entonces él escribió en su diario: "Thomas Alva Edison fue un niño mentalmente enfermo, pero por una madre heroica se convirtió en el genio del siglo".

Qué impresionante la reacción de la mamá, ¿verdad?
En lugar de leer lo que realmente decía la carta, y habiendo podido hacer sentir menos a su hijo, le dió un giro completamente y ¡le inyectó seguridad y certeza a su hijo!
Le hizo creer que era un genio y se lo creyó tanto, que creció y murió siéndolo.
Es asombroso el poder que tienen los padres sobre los hijos.
ES MUY IMPORTANTE RECORDAR SIEMPRE EL PODER QUE TIENEN LAS PALABRAS…
Y como la mamá de Edison, no hay que dejar que las palabras nos afecten, si ya las escuchamos entonces hay que superar las expectativas de los demás y lo más importante…
¡No rendirse nunca!
Autor: desconocido

Taare Zameen Par - Estrellas en la Tierra

VER+:






miércoles, 19 de junio de 2024

NECESITAMOS VOLVER AL ESPÍRITU DE LA IGLESIA PRIMITIVA 🐟🕀

Necesitamos volver al espíritu de la Iglesia primitiva

VOLVER  A  LA  IGLESIA  PRIMITIVA

Cuando surgen las dificultades, las dudas y las incertidumbres en la fe, debemos volver al origen. Esto es lo que tenemos que hacer cuando nos planteamos los objetivos (misión) de nuestra comunidad cristiana: echar la mirada atrás a las primeras comunidades de la Iglesia primitiva (visión).
El Nuevo Testamento, en el libro de los Hechos de los apóstoles, nos da una idea de cómo los primeros cristianos comenzaron a proclamar el Evangelio, lo que hacían y nos muestra numerosos rasgos esenciales de la
Iglesia de Cristo que debemos imitar:

Llenarse de Espíritu Santo

"Se les aparecieron como lenguas de fuego,
que se repartían y se posaban sobre cada uno de ellos.
Todos quedaron llenos del Espíritu Santo
y comenzaron a hablar en lenguas extrañas,
según el Espíritu Santo les movía a expresarse".
(Hechos 2, 3-4 ).


Los cristianos no sólo hablamos de Dios; le experimentamos. Esto es lo que hace que la iglesia sea diferente de cualquier otra organización en el planeta: que tenemos el Espíritu Santo.
Nuestro gobierno no tiene el Espíritu Santo. Las ONGs no tienen al Espíritu Santo. Ninguna otra organización tiene el poder de Dios en ella. Dios prometió su Espíritu para ayudar a su Iglesia. La Iglesia tiene y se llena del poder de Dios.

Cuando se refiere a "hablar en lenguas extrañas" quiere decir hablar en el idioma de quienes nos escuchan. La gente realmente escuchaba a los primeros cristianos hablar en sus propios idiomas, ya fuese en farsi, en swahili, en griego o lo que fuera.

El Plan de Dios es para todos. No es sólo para los judíos. Pero no sólo se refiere a idiomas de sus países de origen sino a hablar en el lenguaje que cada persona entiende.
¿Estamos usando otros "lenguajes" para llegar a la gente?

Utilizar los dones de todos

"Entonces Pedro, en pie con los once,
les dirigió en voz alta estas palabras:
"Judíos y habitantes todos de Jerusalén: percataos
bien de esto y prestad atención a mis palabras. ...
Y haré aparecer señales en el cielo y en la tierra:
sangre, fuego y columnas de humo. ...
Pero el que invoque el nombre del Señor se salvará".
(Hechos 2, 14, 19, 21).

En la iglesia inicial no había espectadores; el 100% de las personas participaban en proclamar el Evangelio de Jesús. Y, aunque igual que entonces, no todos estamos llamados a ser sacerdotes, todos estamos llamados a servir a Dios. Por tanto, debemos esforzarnos para que todos participen. La pasividad no es una opción. Si alguien quiere sentarse y ser servidos por los demás, que busquen otro sitio.

Ofrecer una verdad que transforma


La iglesia primitiva no ofrecía una nueva psicología, ni un moralismo cómodo, ni una espiritualidad agradable. Ofrecía la verdad del Evangelio que tiene el poder de cambiar vidas. Ningún otro mensaje transforma vidas. Cuando la verdad de Dios entra en nosotros, es cuando nos transformamos.

En Hechos 2, Pedro dio el primer sermón cristiano, citando el libro de Joel del Antiguo Testamento y afirmando que la iglesia primitiva se dedicó a la "enseñanza de los apóstoles".

Crear comunidad

"Eran constantes en escuchar la enseñanza de los apóstoles,
en la unión fraterna, en partir el pan y en las oraciones".
(Hechos 2, 42). 

 

En la iglesia del primer siglo, los cristianos se amaban y cuidaban unos a otros. La iglesia no es un negocio, ni una ONG ni un club social. La Iglesia es una familia. Para que nosotros experimentemos el poder del Espíritu Santo como en la Iglesia primitiva, tenemos que convertirnos en la familia que ellos eran.

Vivir la Eucaristía

"Todos los días acudían juntos al templo,
partían el pan en las casas,
comían juntos con alegría y sencillez de corazón"
(Hechos 2, 46).

Cuando la Iglesia primitiva se reunía celebraban la Eucaristía, conmemorando la última cena "con alegría y sencillez de corazón". Debemos entender y enseñar que la Eucaristía es una celebración. Es un festival, no un funeral. Es el banquete de Dios. Cuando la Eucaristía es alegre (y litúrgicamente rigurosa), la gente quiere estar allí porque buscan alegría.
¿Crees que si nuestras iglesias estuvieran llenas de corazones alegres, de palabras alegres y de vidas llenas de esperanza, atraeríamos a los alejados?

Compartir según la necesidad

"Todos los creyentes vivían unidos y lo tenían todo en común;
vendían las posesiones y haciendas, y las distribuían entre todos,
según la necesidad de cada uno" (Hechos 2, 44-45).


La Biblia nos enseña a hacer generosos sacrificios por el bien del Evangelio.
Los cristianos durante el Imperio Romano fueron la gente más generosa del imperio y eran famosos por su desprendimiento.
Literalmente lo compartían todo, "según la necesidad de cada uno". Incluso la vida. Muchos murieron por la fe en el Coliseo romano.

Crecer exponencialmente

"Alabando a Dios y gozando del favor de todo el pueblo.
El Señor añadía cada día al grupo a todos
los que entraban por el camino de la salvación"
(Hechos 2,47).

Cuando nuestras iglesias demuestran las primeras seis características de la iglesia primitiva, el crecimiento es automático. La gente veía a los primeros cristianos como extraños, pero les gustaba lo que éstos hacían.
Veían el amor que se tenían los unos por los otros, los milagros que ocurrían delante de ellos y la alegría que irradiaban. Querían lo que los cristianos tenían. Y
la Iglesia crecía exponencialmente

 VER+:

EL CLERO Y EL LAICADO NO EVANGELIZAN
PORQUE NO ESTÁN EVANGELIZADOS


VOLVER AL COMIENZO: LA NOVEDAD DE JESÚS.
TODOS SOMOS SACERDOTES
Y COEXISTENCIA DE DOS ECLESIOLOGÍAS

martes, 2 de abril de 2024

🔥 ESA LUZ PODEROSA QUE HABITA EN CADA UNO DE NOSOTROS 🔥


ESA   LUZ   PODEROSA   QUE   HABITA  
EN   CADA   UNO   DE   NOSOTROS

Con el torrente informativo que soportamos cualquiera diría que en nuestro mundo ya nada funciona, que poco a poco nos estamos convirtiendo en un residuo del pasado, en las cenizas de la antaño gloriosa hoguera del progreso, y que todo lo que fuimos, somos y seremos está gravemente amenazado y a expensas de los milagros que obre una élite presuntamente acreditada que trabaja denodadamente para conjurar el estallido final, o sea, el apocalipsis.
Excepto por las secciones de sociedad, donde rara vez la noticia tiene que ver con algún hecho ejemplar, meritorio y emocionante sino que lo habitual son las memeces, a ser posible llamativas por chuscas, escabrosas o directamente gilipollas, la inmensa mayoría de los contenidos informativos que nos envuelven están directamente relacionados con las admoniciones, decisiones, advertencias, pugnas y planes de esa superestructura política y experta que aspira a convencernos de que si no fuera por ella el mundo dejaría de girar.
SÓLO LOS LOCOS, LOS ESTÚPIDOS O LOS FARSANTES PUEDEN DEFENDER QUE EL PROGRESO SE ORIGINA AGUAS ARRIBA PARA LUEGO DERRAMARSE SOBRE NUESTRAS HUECAS CABEZAS
Pero es justo al revés, el mundo sigue girando a pesar de todo porque el progreso tiene su origen abajo, no arriba. Y este progreso, si acaso, será tanto mayor o menor en función del empeño que en ese arriba pongan por arruinarlo o por facilitarlo.

Para comprobar que esto es así y que en realidad siempre ha sido así, no es necesario recurrir a los grandes pensadores que pudieran argumentarlo, ni pertrecharse de poderosas teorías y descubrimientos sociológicos, aunque los hay y en suficiente cantidad y no estaría de más conocerlos un poco. Basta con cambiar la orientación de la mirada y, en vez de permanecer absortos ante las enloquecidas maniobras de esa superestructura pagada de sí misma, observar con idéntico pasmo el laborioso mundo del común, donde millones de individuos anónimos y mucho más humildes interactúan y realizan actividades aparentemente prosaicas y banales que, sin embargo, son las que garantizan nuestra existencia. Porque es ahí, a ras de suelo, donde suceden los milagros, a menudo pequeños, diminutos, pero en ocasiones extraordinarios. No en las alturas.

Precisamente, por mi interés por lo cotidiano, por esas actividades aparentemente banales con las que la gente se gana la vida y aspira a cumplir sus pequeños sueños, me topé en Youtube con un joven mecánico en cuya cuenta en esa plataforma cuelga vídeos de sus reparaciones. Desconozco la edad exacta de este joven, pero por su aspecto barbilampiño diría que está lejos de la treintena.

Una de sus series de vídeos tiene que ver con un proyecto especialmente desafiante que arranca con la adquisición mediante subasta de un superdeportivo que tras un violentísimo accidente ha quedado irrecuperable. El automóvil en cuestión es un McLaren de 2018, cuyo precio en buen estado de segunda mano flirtea con los 300.000 dólares. Una máquina extremadamente sofisticada y exclusiva que intimidaría a cualquiera, incluso a un experto mecánico. Y que, en el caso que nos ocupa, resulta aún más intimidante por el lamentable estado en que se encuentra.

Pero John (con ese nombre me referiré en adelante al jovencísimo mecánico) se ha propuesto hacer algo descabellado: adquirir ese amasijo informe de metal y fibra de carbono para devolverlo a su forma original y darle una nueva vida. Cualquiera pensará que comprar esa chatarra al menos no es muy costoso, pero nada más lejos de la realidad. El destruido McLaren aún conserva piezas aprovechables que son muy cotizadas. Así que al delirante desafío mecánico de John se añade un importante riesgo económico, concretamente el desembolso de unos 70.000 dólares. Al fin y al cabo, sólo el corazón de esa bestia, un motor V8 biturbo de 4.000 centímetros cúbicos y 720 caballos vale 100.000 dólares en origen.

A pesar de que John se ha ocupado previamente de obtener abundante documentación fotográfica del estado del vehículo, una vez lo compra, lo transporta a su taller y se pone manos a la obra irá descubriendo más y más daños ocultos. Uno de ellos especialmente crítico que afecta a la estructura principal del habitáculo y que, por así decir, es el tronco del que brota todo lo demás. Esta parte fundamental está construida íntegramente en fibra de carbono lo que hace que su reconstrucción resulte imposible cuando sufre daños estructurales graves, como desgraciadamente es el caso.

Para mayor complicación, resulta que McLaren no suministra esa parte por separado porque, como digo, es un elemento estructural de grades dimensiones que en esencia es el esqueleto del vehículo. La marca entiende que, si eso está irremediablemente destruido, no hay reparación posible puesto que intentarlo implicaría ni más ni menos que reconstruir el automóvil por completo, lo cual sin los planos, recursos o herramientas exclusivas de McLaren sería poco menos que imposible. Pero ese es precisamente el plan del joven mecánico: enfrentarse a lo imposible y salir victorioso. Y no va a rendirse, objeten lo que objeten los responsables de Mclaren.

John, a pesar de su corta edad, es un hombre de recursos y diría que de una fe impropia en nuestro tiempo. Usará Internet para buscar a lo largo y ancho del mundo otro siniestro de un McLaren idéntico al suyo pero que conserve esa estructura intacta. Lo que equivale a buscar una aguja en un pajar. Sin embargo, lo encontrará. Negociará hábilmente para hacerse a buen precio sólo con la parte que necesita y añadirá a su cuenta de gastos 10.000 dólares adicionales, más otro pico por los portes.

Una vez recibe el crucial componente, John empieza a hacer lo que en McLaren consideran imposible para un particular: reconstruir desde cero, pieza a pieza, tornillo a tornillo y conexión a conexión, sin plano ni croquis alguno, uno de los máximos exponentes de la ingeniería automovilística moderna. Para hacerse una idea de la complejidad del desafío, sólo los cables y conectores que deberá John trasplantar a la nueva célula y enrutar y enchufar en decenas, si no centenares, de lugares diferentes suman al peso más de 30 kg. Hay una secuencia en la que John, que es un joven fornido, carga con ese enjambre de cables sobre sus hombros y se tambalea por el peso.

Aunque es hábil, John no es un ingeniero experto ni un mecánico con una vasta trayectoria. Tampoco es el hijo de alguien con posibles, lo que quizá le permitiría asumir este riesgo y fracasar sin arruinarse. Tiene dotes para la mecánica y una fina inteligencia, además de temple y disciplina, pero carece de una vasta experiencia, no se ha licenciado en ingeniería y no tiene detrás una familia pudiente que lo financie.

Sin embargo, John culminará con un éxito indiscutible la reconstrucción de esa máquina endiabladamente compleja. Además, lo documentará con absoluta honestidad. Grabará en vídeo todo el proceso, sin escatimar errores, pasos atrás y rectificaciones, mostrándonos cómo mediante el sufrido proceso de prueba y error va resolviendo cada problema de forma pulcra, sin tomar atajos ni recurrir a la chapuza. Al fin y al cabo, la idea inicial de John es revender el McLaren, recuperar su inversión y obtener un margen de beneficio. ¿Y qué mejor garantía para el posible comprador que documentar con pelos y señales la exquisita reconstrucción?

No abundaré en las vicisitudes del joven John para no aburrir, aunque no tienen desperdicio. Lo que me interesa transmitir es aquello que en última instancia me parece muy emocionante y que, pienso, debería llenarnos de optimismo y confianza en nosotros mismos para disgusto de quienes están empeñados en convencernos de nuestras limitaciones y peligrosísimas carencias.

Con su determinación y coraje, John, que es sólo uno entre muchos, desmiente a estos agoreros y cantamañanas que se han atribuido el derecho a dirigirnos como si fuéramos estúpidas ovejas para salvarnos de nosotros mismos. Es en este sentido que resulta evocadora la audacia, la perseverancia, la inteligencia y, sobre todo, la ilusión de este joven capaz de hacer lo que parece imposible, porque con su logro nos recuerda que lo que mueve el mundo no son los Thierry Breton ni las Ursula Gertrud von der Leyen, ni los ejércitos de politólogos, sociólogos y expertos enquistados en la superestructura de los estados y las organizaciones, sino la inquietud y la sana ambición de millones de hombres y mujeres anónimos.

Nada hay más lleno de verdad que la expresión luminosa de este joven cuando, tras meses de trabajo, esfuerzos y tribulaciones, logra por fin poner en marcha el Mclaren reconstruido. La luz que enciende su rostro deslumbra y rejuvenece porque es la misma que ha iluminado a la humanidad desde tiempos inmemoriales. Es el ¡eureka! del matemático griego Arquímedes de Siracusa que se repite, que resuena poderoso con cada logro, con cada hallazgo, grande o pequeño, del ser humano. Es, en definitiva, la luz ancestral, poderosa y penetrante con la que una y otra vez atravesamos las tinieblas para iluminar el incierto futuro.

Cada día millones de personas, sean mecánicos, agricultores, ganaderos, pescadores, profesores, arquitectos, ingenieros o médicos, obran pequeñas proezas que, sumadas, dan forma a la idea de progreso. Estos pequeños éxitos en ocasiones devienen en grandes saltos adelante, en esos momentos estelares de la humanidad que relataba Stefan Zweig en el libro de título homónimo. Es entonces, cuando un desconocido obra algún prodigio y deviene en celebridad, que quizá nos confundimos, pues descontamos que alguien tan genial tiene que provenir por fuerza de un lugar distinto del nuestro, un lugar que imaginamos en las alturas.

Sin embargo, todos venimos de abajo, también los genios. Sólo los locos, los estúpidos o los farsantes pueden defender que el progreso se origina aguas arriba para luego derramarse sobre nuestras huecas cabezas. Abajo empieza todo porque sólo ahí es donde las misteriosas fuerzas que dan forma a nuestro destino interactúan de forma masiva. Creer lo contrario o, peor, pretender imponer el orden inverso, que un grupo selecto de mentes situadas en las alturas decidan nuestro destino, es el camino más seguro hacia el desastre. Por eso debemos rebelarnos, recuperar la confianza y asumir la parte de responsabilidad que nos corresponde: para impedirlo y dar la oportunidad a quienes vienen detrás de escribir su propio futuro.

Para terminar, sólo me queda añadir que John al final decidió no vender el McLaren. La razón la desconozco. Pero sospecho que en su aventura siempre hubo un motivo más profundo que el simple beneficio económico.

domingo, 11 de febrero de 2024

🔥 ¡AY DE MÍ SI NO EVANGELIZARA! 🔥


“¡Ay de mí si no evangelizara!”

Cuentan que una vez dos misioneros jesuitas llegaron a un poblado guaraní en Paraguay que estaba escondido entre el río Paraná y Katueté. Estos indígenas eran gente civilizada y amable; aunque nunca habían oído hablar del Dios cristiano, los recibieron con mucho respeto.

Los misioneros, llenos de alegría y vida, se ganaron rápidamente las simpatías de aquellos indios y de ese modo prepararon sus corazones para el anuncio del Evangelio. Convivieron unas cuantas semanas con ellos, acostumbrándose a sus comidas, escuchando sus cantos, aprendiendo su idioma y sobre todo tratando de conocer lo que pensaban y sabían sobre Dios.

Aquellos pobres indígenas tenían una imagen terrible de Dios. Creían que Dios era un ser implacable que estaba continuamente irritado y exigía sacrificios enormes para quedar satisfecho. Ese Dios no buscaba para nada la felicidad de sus fieles, y mucho menos entraba en sus cabezas que fuera capaz de amarles. Estaban permanentemente atemorizados. Se podría decir que vivían sometidos a una oprimente superstición de la que no podían liberarse.

Una vez que nuestros misioneros se percataron de todo esto, pensaron que había llegado el momento de iluminar aquellos corazones con la verdad del Evangelio.
Una tibia noche de luna creciente, estando un grupo de ellos reunido junto al fuego principal que presidía el poblado, el misionero más anciano pidió la palabra. A su alrededor se oía el canto de algunos animales nocturnos, unido a un juego fascinante de luces y sombras causados por el fuego. El crepitar del fuego unido al aroma de las plantas silvestres que rodeaban el poblado parecían invitar a la reflexión. El momento no podía ser mejor para entregar el mensaje de un Dios Padre que tanto amó al mundo que le envió a su propio Hijo, no para condenar al mundo, sino para que el mundo se salvara por Él.

Y así, ante los oídos atentos de aquellas pobres criaturas asustadas por lo divino, les fue relatando los sencillos sucesos de la encarnación, de la navidad, las parábolas, llegando finalmente al misterio pascual, con la pasión, muerte y resurrección del Señor.

Los ancianos de la tribu se ponían las manos junto a los oídos haciendo pantalla, para no perderse ni una sola palabra. Los hombres sentían que un aire nuevo, lleno de paz y alegría, comenzaba a soplar sobre sus vidas. Las mujeres, desde las puertas de sus chozas, trataban de hacer callar a sus bulliciosas criaturas para poder escuchar a aquellas sorprendentes novedades.

Copado por esta atención llena de expectativa, el anciano misionero usó sus mejores recursos para pintar la bondad de un Dios lleno de amor y de ternura, que, después de darnos a su propio Hijo cuando aún éramos pecadores, ya no nos podía negar nada, pues ahora éramos no sólo amigos, sino sus hijos queridos.

El mensaje dejó estupefactos y llenos de admiración a aquellos infieles. Les parecían imposibles tantas cosas bellas juntas. Sentían que la vida ahora se llenaba de sentido. Ya podrían sentirse seguros en medio de las tormentas, cuando bramara el huracán o temblara la tierra en el corazón de la noche. Si Dios estaba con ellos, ¿quién podría estar contra ellos? Porque todo, absolutamente todo lo que Dios permitiera —les había dicho el misionero— serviría para el bien de aquellos que eran amados por Dios.

Cuando los misioneros terminaron de proclamar su mensaje se hizo un profundo silencio que a su vez estaba cargado de preguntas pendientes. Fue el jefe del poblado, quien, haciéndose eco de lo que estaba en el corazón de todos, se atrevió a interrogar:

—Y ¿cuándo sucedió todo esto tan hermoso que nos habéis contado? ¿Tal vez en la luna pasada? O tal vez hace más tiempo, ¿varias lunas atrás?
Los misioneros, mirándose a la cara el uno al otro, se dieron cuenta de que sus oyentes desconocían totalmente la historia y no tenían noción de todo el tiempo que había transcurrido desde los sucesos vividos por Cristo hasta el momento presente. Les explicó que hacía mucho tiempo que todo esto había sucedido. Que era imposible contarlo sumando lunas llenas. Que había que contarlo por soles y primaveras.

Cuando finalmente les logró hacer entender que los acontecimientos hermosos que constituyen la buena nueva del Evangelio hacía ya mil seiscientos años que habían sucedido y que por tanto los árboles más antiguos del monte aún ni siquiera habían nacido, sintió que sus oyentes cambiaban su sonrisa de agradecimiento por una mueca de rabia.
Y fue nuevamente el jefe del poblado quién rompió el silencio diciendo:

—¡Desgraciados! Hace mil seiscientos soles que esto ha sucedido ¿y recién ahora nos lo vienen a contar? Esto es señal de que ustedes mismos no les dan importancia a estas cosas o que nunca nos han querido bien. De lo contrario hace rato que nos hubieran buscado por todos los medios para venir a decimos cosas que para nosotros son fundamentales.
***
Desde hace unos años se oyen voces en contra de la evangelización de los pueblos indígenas y paganos. Incluso algunos desalmados se atreven a decir que tendríamos que haberlos dejado con sus “dioses” y sus “creencias”. Afortunadamente tenemos a Alguien, que nos amaba a todos y que después de haber enseñado a algunos les dijo:
“Se me ha dado toda potestad en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándoles en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo y enseñándoles a guardar todo cuanto os he mandado.” (Mt 28: 18-20).