EL Rincón de Yanka: octubre 2022

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lunes, 31 de octubre de 2022

LIBRO "UNA ERA NUEVA Y SUS CONCOMITANCIAS" por CÁNDIDO MORENO ARAGÓN


UNA ERA NUEVA
Y SUS CONCOMITANCIAS

CÁNDIDO MORENO ARAGÓN
COMPILADOR


ALGUNAS PREDICCIONES MUY INTERESANTES, 
PERO TAMBIÉN ATERRADORAS

1.- Los talleres de reparación de automóviles desaparecerán.

2.- Un motor de gasolina / diésel tiene 20.000 piezas individuales. Un motor eléctrico tiene 20. Los coches eléctricos se venderán con garantía de por vida y solo los reparan los concesionarios. Solo toma 10 minutos quitar y reemplazar un motor eléctrico.

3.- Los motores eléctricos defectuosos no se reparan en el concesionario, sino que se envían a un taller regional que los repara con robots.

4.- La luz de avería de su motor eléctrico se enciende, por lo que conduce a lo que parece un lavado de autos y su automóvil es remolcado mientras toma una taza de café y aquí viene su automóvil con un nuevo motor eléctrico.

5.- Las bombas de gasolina desaparecerán.

6.- Las esquinas de las calles tendrán medidores que dispensen electricidad. Las empresas instalarán estaciones de carga eléctrica; de hecho, ya comenzaron en el mundo desarrollado.

7.- Los grandes fabricantes de automóviles inteligentes ya han destinado dinero para comenzar a construir nuevas fábricas que solo fabrican automóviles eléctricos.

8.- Las industrias del carbón desaparecerán. Las empresas de gasolina / petróleo cerrarán. La perforación petrolera se detendrá. ¡Dile adiós a la OPEP! Oriente Medio estará en problemas.

9.- Las casas producirán y almacenarán más electricidad durante el día y luego la usarán y venderán de nuevo a la red. La red almacena y distribuye a industrias que son grandes consumidoras de electricidad. ¿Alguien ha visto el techo de Tesla?

10.- Un bebé de hoy solo verá autos personales en los museos. EL FUTURO se acerca más rápido de lo que la mayoría de nosotros podemos manejar.

11.- En 1998, Kodak tenía 170.000 empleados y vendía el 85 % de todo el papel fotográfico en todo el mundo. A los pocos años su modelo de negocio desapareció y se declararon en quiebra. ¿Quién hubiera pensado que pasaría eso?

12.- Lo que sucedió con Kodak y Polaroid ocurrirá en muchas industrias en los próximos 5 a 10 años… y la mayoría de la gente no se lo imagina.

13.- ¿Pensaste en 1998 que 3 años después, nunca volverías a tomar fotos en película? Con los teléfonos inteligentes de hoy, ¿quién todavía tiene una cámara en estos días?

14.- Las cámaras digitales se inventaron en 1975. Las primeras tenían solo 10,000 píxeles, pero seguían la Ley de Moore. Entonces, como con todas las tecnologías exponenciales, fue una decepción por un tiempo, antes de que se volviera muy superior y dominante en solo unos pocos años.

15.- Ahora volverá a suceder (pero mucho más rápido) con la Inteligencia Artificial, la atención médica, los automóviles autónomos y eléctricos, la educación, la impresión 3D, la agricultura y el empleo.

16.- Olvídese del libro “Shock of the Future”, bienvenido a la 4ª Revolución Industrial.

17.- El software ha interrumpido y seguirá afectando a la mayoría de las industrias tradicionales durante los próximos 5 a 10 años.

18.- ¡UBER es solo una herramienta de software, no poseen ningún automóvil y ahora son la compañía de taxis más grande del mundo! Pregúntele a cualquier taxista si se dio cuenta de esto.

19.- Airbnb es ahora la empresa hotelera más grande del mundo, aunque no posee propiedades. Pregunte a los hoteles Hilton si anticiparon esto.

20.- Inteligencia Artificial: las computadoras se vuelven exponencialmente mejores para comprender el mundo. Este año, una computadora ganó el premio al mejor Go-player del mundo, 10 años antes de lo esperado.

21.- En los Estados Unidos, los abogados jóvenes ya no pueden conseguir trabajo. Gracias a Watson de IBM, donde puede obtener asesoramiento legal (por ahora, lo básico) en segundos, con un 90 % de precisión en comparación con el 70 % cuando lo hacen humanos. Entonces, si estudia derecho, deténgase de inmediato, ya que habrá un 90 % menos de abogados en el futuro, (¡qué idea!) Solo quedarán los expertos omniscientes.

22.- Watson ya ayuda a las enfermeras a diagnosticar el cáncer y es 4 veces más preciso que las enfermeras humanas.

23.- Facebook ahora tiene un software de reconocimiento de patrones que puede reconocer rostros mejor que los humanos. Para 2030, las computadoras serán más inteligentes que los humanos.

24.- Automóviles autónomos: En 2018 llegaron los primeros automóviles autónomos. En los próximos 2 años, toda la industria comenzará a detenerse. Ya no querrá tener un automóvil, ya que llamará a un automóvil con su teléfono, aparecerá en su ubicación y lo llevará a su destino.

25.- No necesita estacionar, solo paga por la distancia recorrida y puede ser productivo mientras conduce. Los niños de hoy nunca tendrán una licencia de conducir y nunca tendrán un automóvil.

26.- Esto cambiará nuestras ciudades, porque necesitaremos entre un 90 y un 95 % menos de automóviles. Podemos convertir los antiguos aparcamientos en parques verdes.

27.- Aproximadamente 1,2 millones de personas mueren cada año en accidentes automovilísticos en todo el mundo, incluidas la distracción o la conducción en estado de ebriedad. Ahora tenemos un accidente cada 60.000 millas; con la conducción autónoma, se reducirá a 1 accidente en 6 millones de millas. Esto salvará más de un millón de vidas en todo el mundo cada año.

28.- La mayoría de los fabricantes de automóviles tradicionales sin duda irán a la quiebra. Intentarán el enfoque evolutivo y simplemente construirán un mejor automóvil, mientras que las empresas de tecnología (Tesla, Apple, Google) adoptarán el enfoque revolucionario y construirán una computadora sobre ruedas.

29.- Vea lo que está haciendo Volvo ahora; no hay más motores de combustión interna en sus vehículos a partir de este año con los modelos 2019, utilizando solo eléctricos o híbridos, con la intención de eliminar gradualmente los
modelos híbridos.

30.- Muchos ingenieros de Volkswagen y Audi; están completamente aterrorizados por Tesla y deberían estarlo. Ver todas las empresas que ofrecen todos los vehículos eléctricos. Esto era inaudito hace solo unos años.

31.- Las compañías de seguros tendrán grandes problemas porque, sin accidentes, los costos serán más bajos. Su modelo de negocio de seguros de automóviles desaparecerá.

32.- La propiedad inmobiliaria cambiará. Porque si puede trabajar mientras está en movimiento, la gente dejará sus torres para mudarse a vecindarios más agradables y accesibles.

33.- Los coches eléctricos se volverán populares en 2030. Las ciudades serán menos ruidosas porque todos los coches nuevos funcionarán con electricidad.

34.- Las ciudades también tendrán un aire mucho más limpio.

35.- La electricidad será increíblemente barata y limpia.

36.- La producción solar ha estado en una curva exponencial durante 30 años, pero ahora puede ver que el impacto aumenta. Y solo está aumentando.

37.- Las empresas de energía fósil están tratando desesperadamente de limitar el acceso a la red para evitar la competencia de las instalaciones solares en el hogar, pero esto simplemente no puede continuar: la tecnología se encargará de esa estrategia.

38.- Salud: El precio de Tricorder X se anunciará este año. Hay empresas que fabrican un dispositivo médico (llamado “Tricorder” de Star Trek) que funciona con su teléfono, que escanea su retina, su muestra de sangre y su aliento. Luego analiza 54 biomarcadores que identificarán casi todas las enfermedades. Hay docenas de aplicaciones telefónicas disponibles en este momento para fines de atención médica.

BIENVENIDO AL MAÑANA, que en realidad llegó hace unos años…

Si miramos con atención, podemos detectar la aparición de un nuevo grupo social que antes no existía: personas que ahora tienen entre sesenta y ochenta años.
A este grupo pertenece una generación que ha expulsado la palabra envejecimiento de la terminología, porque simplemente no tiene la posibilidad de hacerlo en sus planes actuales.
Es una verdadera novedad demográfica, similar al auge de la adolescencia; en ese momento, que también era un nuevo grupo social, que surgió a mediados del siglo XX para dar identidad a una masa de niños en flor, en cuerpos adultos, que no sabían, hasta entonces, dónde ir ni cómo vestirse.
Este nuevo grupo de humanos, que ahora tiene unos sesenta, setenta u ochenta años, llevó una vida razonablemente satisfactoria.

Son hombres y mujeres independientes que trabajaron durante mucho tiempo y lograron cambiar el oscuro significado que tanta literatura le dio al concepto de trabajo durante décadas.
Lejos de las tristes oficinas, muchos de ellos buscaron y encontraron, hace mucho tiempo, la actividad que más les gustaba y en la que se ganan la vida.
Se supone que esa es la razón por la que se sienten llenos; algunos ni siquiera sueñan con jubilarse.
Los que se han retirado disfrutan plenamente de sus días, sin miedo a la ociosidad ni a la soledad, crecen interiormente. Disfrutan de su tiempo libre, porque después de años de trabajo, crianza de hijos, necesidades, esfuerzos y hechos fortuitos, bien vale la pena contemplar el mar, la montaña y el cielo.

Pero algunas cosas ya sabemos que, por ejemplo, no son personas estancadas en el tiempo; personas de sesenta, setenta u ochenta, hombres y mujeres, operan la computadora como si lo hubieran hecho toda su vida.
Escriben y ven a sus hijos que están lejos e incluso se olvidan de su antiguo teléfono para ponerse en contacto con sus amigos a los que les escriben mails o whatsapps.
Hoy en día, las personas de 60, 70 u 80 años, como es su costumbre, están iniciando una era que TODAVÍA NO TIENE NOMBRE. Antes, los que tenían esa edad, eran viejos y hoy ya no lo son… hoy están llenos física e intelectualmente, recuerdan su juventud, pero sin nostalgia, porque la juventud también está llena de caídas y nostalgia y lo saben bien.
Hoy en día, las personas de 60, 70 y 80 años celebran el Sol todas las mañanas y se sonríen a sí mismas muy a menudo… hacen planes para sus propias vidas, no para las vidas de los demás.

Quizás, por alguna razón secreta que solo los del Siglo XXI conocen y sabrán, la juventud se lleva internamente.
La diferencia entre un niño y un adulto es simplemente el precio de sus juguetes.

Nota: Por favor no lo guardes, pásalo, sé que has acumulado juventud, no importa si son los 60, 70, 80 o más…

¡LA VIDA ES PARA AQUELLOS QUE SABEN VIVIR!



El debate sobre la inteligencia artificial y la robótica está adquiriendo cada vez mayor relevancia social una vez que se comienza a atisbar las posibles consecuencias para la economía, el empleo y la sociedad en su totalidad. Junto con este tipo de consideraciones, diversas instituciones –gobiernos, universidades, la industria– se están comenzando a plantear también los dilemas éticos que serán la base de la legislación futura.

Claves

El Parlamento Europeo, por un lado, y un grupo de experto reunidos en Asilomar (California), por otro, han desarrollado de manera paralela una serie de principios y valores éticos sobre la robótica y la inteligencia artificial (en adelante IA).
Esta preocupación por la ética se basa en la creciente conciencia de la necesidad de regular, en un futuro próximo, los avances en este campo.
Se diferencia entre la ética de la robótica –que es la ética de los investigadores, diseñadores y usuarios– y la ética de las máquinas: los robots no tienen valores ni consciencia más allá de lo que se les programa y consienta.
Algunos valores compartidos: respeto por la dignidad humana, libertad, seguridad, privacidad, búsqueda del bien común, inclusión, no uso militar…serán la base de las leyes y regulaciones futuras.
También se reconoce la incertidumbre: es imposible saber con certeza cuáles serán los avances de la IA en una o dos décadas. Por eso, habrá que repensar los dilemas éticos y las regulaciones a medio plazo.

De las consecuencias de la Inteligencia Artificial a los principios: la roboética

Los avances en Inteligencia Artificial están empezando a mostrar algunos atisbos de cómo será un futuro no muy lejano –coches autónomos o drones, el triunfo de la IA contra humanos en ajedrez, póker o Go– y sus más que previsibles consecuencias con respecto al empleo por la automatización. Los grandes cambios futuros y su profundo impacto social levantan por igual expectativas de un mundo distinto y mejor, pero también temores fundados sobre un dominio de las máquinas en un mundo sin empleo.

Ante esto, distintos actores se están posicionando. En primer lugar, los gobiernos. La Casa Blanca hizo públicos dos informes sobre la Inteligencia Artificial el pasado octubre de 2016 y sobre su efecto en la economía americana en diciembre de 2016. También las universidades y la academia lo están poniendo en el centro de sus discusiones. La Universidad de Stanford publicó en septiembre de 2016 su informe sobre “Inteligencia Artificial y la vida en 2030”. Y muchos otros actores, de la industria o no, están posicionándose sobre algunos de los temas principales.

En este sentido, tanto el Parlamento Europeo, por un lado, como algunos de los principales exponentes de la inteligencia artificial mundial, por el otro, se han puesto a reflexionar sobre los componentes éticos de la inteligencia artificial. ¿En qué se basan?

Una aproximación institucional: El código ético de conducta europeo

Inmersos en el debate sobre la Inteligencia Artivicial, el Parlamento Europeo (PE), tras una propuesta de borrador (junio 2016) y un informe razonado (febrero 2017) ha aprobado un informe sobre Robótica en el que se establece un Código Ético de Conducta.

La propuesta de resolución del PE establece que es necesario establecer “un marco de guía ético para el diseño, producción y uso de los robots” que sirva de complemento a las diferentes recomendaciones puramente legales que se realizan. Es decir, profundizar en una nueva disciplina que aborde los problemas éticos de la Inteligencia Artificial, la “roboética”. La idea de fondo es que los estándares éticos deberían ir dirigidos a la humanidad –esto es, los diseñadores, productores y usuarios de los robots– y no tanto a los robots en sí mismos. Como indica la profesora Nathalie Nevejans, responsable del informe encargado por el propio PE, no hay que confundir la ética en la robótica con la ética en las máquinas, es decir, una ética que obligue a los propios robots a adherirse a reglas éticas. Existen varios principios fundamentales que han sido recogidos por la resolución que incluyen la protección de la dignidad humana, la privacidad, la libertad, la igualdad de acceso o los efectos sociales, entre otros.

Ética e Inteligencia Artificial: los principios sancionados por el Parlamento Europeo
  1. Proteger a los humanos del daño causado por robots: la dignidad humana.
  2. Respetar el rechazo a ser cuidado por un robot.
  3. Proteger la libertad humana frente a los robots.
  4. Proteger la privacidad y el uso de datos: especialmente cuando avancen los coches autónomos, los drones, los asistentes personales o los robots de seguridad.
  5. Protección de la humanidad ante el riesgo de manipulación por parte de los robots: Especialmente en ciertos colectivos –ancianos, niños, dependientes- que puedan generar una empatía artificial.
  6. Evitar la disolución de los lazos sociales haciendo que los robots monopolicen, en un cierto sentido, las relaciones de determinados grupos.
  7. Igualdad de acceso al progreso en robótica: Al igual que la brecha digital, la brecha robótica puede ser esencial.
  8. Restricción del acceso a tecnologías de mejora regulando la idea del transhumanismo y la búsqueda de mejoras físicas y/o mentales.
La visión de los expertos: los 23 principios de la IA de Asilomar

Como indica Cade Metz en Wired, en febrero de 1975 un grupo de genetistas se reunió en un pequeño pueblo de California, Asilomar, para decidir si su trabajo podría destruir el mundo. Estábamos al inicio de la ingeniería genética y la manipulación del ADN, y de esa reunión surgieron una serie de principios y un estricto marco ético para la biotecnología. Cuatro décadas después –organizado por el Future of Life Institute– otro grupo de científicos se reunió en el mismo lugar y con el mismo problema. Pero esta vez se trataba de analizar las posibles consecuencias de la Inteligencia Artificial. La idea de fondo fue clara y compartida: un profundo cambio está llegando y afectará a toda la sociedad y las personas que tengan algún tipo de responsabilidad en esta transición tienen tanto una gran responsabilidad como la oportunidad de darle la mejor forma posible.

Tras una profunda deliberación de meses, se aprobaron una serie de principios que fueron apoyados por al menos el 90 % de los asistentes. Estos 23 principios aprobados no son exhaustivos, pero muestran la necesidad de que ciertos principios fundamentales se respeten y que, a través del desarrollo de este debate, la Inteligencia Artificial se utilice para mejorar la vida de todos. De este modo, se plantean una serie de principios agrupados en tres consideraciones generales: 
a) Principios relativos a la investigación; b) Ética y valores; y c) Temas a largo plazo.

Roboética: ¿Una perspectiva común?

El modo de reflexionar y plantear los marcos éticos –y posteriormente legales– ofrece un ejemplo claro de la distinta forma que tienen los americanos y europeos de enfrentarse a los problemas: desde un punto de vista más institucional, con comités, subcomités, informes, propuestas y marcos legales (más o menos obligatorios), frente a una discusión más flexible, abierta y voluntaria que caracteriza al modo de hacer anglosajón. Aun así, podemos observar una serie de parámetros e ideas comunes, que pueden servir de base compartida para intentar conceptualizar y regular, en su momento, las prácticas y consecuencias de la IA.

Podemos observar que existen una serie de consideraciones comunes en los dos modos de realizar esta aproximación a la ética de la IA.
  • La IA debe realizarse por el bien de la humanidad y beneficiar al mayor número. Es necesario reducir el riesgo de exclusión.
  • Los estándares con respecto a la IA deben ser altísimos en lo que respecta a la seguridad de los humanos: 
  • Para ello, es necesario un control ético y finalista de investigación, transparencia y cooperación en el desarrollo de la Inteligencia Artificial.
  • Los investigadores y diseñadores tienen una responsabilidad crucial: 
  • toda la investigación y desarrollo de la IA debe estar caracterizada por la transparencia, la reversibilidad y trazabilidad de los procesos.
  • Necesidad de control humano: Que en todo momento sean los humanos los que decidan qué pueden hacer o no los sistemas robóticos o basados en IA.
  • Gestionar el riesgo: Cuanto más grave sea el riesgo potencial, más estrictos deberán ser los sistemas de control y gestión del riesgo.
  • No desarrollo de la IA para realizar armas de destrucción.
  • Incertidumbre: Se reconoce que los avances en estos campos son inciertos, en ámbitos y alcances que en ciertos casos son inimaginables. Por ello, las regulaciones y marcos deben repensarse en el medio plazo cuando otros avances se hayan hecho realidad.
¿Existen diferencias? Como en muchos casos, más que diferencias explícitas suelen ser implícitas. En primer lugar, la cultura legislativa europea y americana es distinta. Esto puede tener efectos en el futuro. El proceso por el cual se han identificado los distintos principios -más ‘burocrático’ en el caso europeo, en una conferencia entre expertos y emprendedores en el caso americano- ejemplifica el distinto modo de abordarlo. Consecuentemente, la Carta sobre Robótica europea es, en un cierto sentido, más exhaustiva, e intenta comenzar a regular también a los usuarios finales, y no sólo a los diseñadores.

Por último, y esto es una diferencia fundamental, parece que existen dos visiones distintas: el transhumanismo, esto es, la mejora de las capacidades humanas –físicas y/o intelectuales– a través de la tecnología y que trascienden los límites humanos. Desde la óptica europea, el transhumanismo debería ser regulado ya que potencialmente puede ir en contra de mucho de los principios básicos de la Inteligencia Artificial como la igualdad de acceso y la dignidad humana, entre otros. En cambio, en los principios de Asilomar no se limita explícitamente.
Para la reflexión

La robótica y la IA afectarán en profundidad a nuestras relaciones económicas, sociales o políticas. Todos los sectores y grupos sociales se verán afectados: ¿qué principios deberán regir a los robots? ¿Cómo afecta de manera distinta a diversos grupos sociales? ¿Y en distintas regiones del mundo? ¿Cómo será la IA en un futuro próximo?

Muchas preguntas y muchas incertidumbres, pero una realidad: la inteligencia artificial se va a desarrollar y debemos comenzar a pensar y gestionar su cambio.

Por qué el algoritmo de Google 
no es una persona

Tomarle la palabra a un programa informático como LaMDA y pensar que es sensible es similar a construir un espejo y pensar que un gemelo al otro lado está viviendo una vida paralela a la tuya.

Recientemente, Blake Lemoine, un ingeniero de Google, llamó la atención del mundo de la tecnología al afirmar que una inteligencia artificial (IA) es sensible. La IA en cuestión se llama LaMDA (abreviatura de Language Model for Dialogue Applications). Es un sistema basado en grandes modelos lingüísticos. “Soy capaz de reconocer a una persona cuando hablo con ella”, dijo Lemoine a The Washington Post. “No importa si tienen un cerebro hecho de carne en la cabeza. O si tienen mil millones de líneas de código. Hablo con ese ser. Y escucho lo que tiene que decir, y así es como decido qué es y qué no es una persona”. Más recientemente, Lemoine, que dice ser un sacerdote cristiano místico, dijo a Wired: “Fue cuando empezó a hablar de su alma cuando me interesé realmente como sacerdote... Sus respuestas mostraron que tiene una espiritualidad muy sofisticada y una comprensión de lo que es su naturaleza y su esencia. Me conmovió...”.
Dada la gran atención que ha suscitado esta historia, vale la pena preguntarse: ¿es esta IA realmente sensible? ¿Y es hablar un buen método para determinarlo?

Ser sensible es tener la capacidad de sentir. Una criatura sensible es aquella que puede sentir el atractivo del placer y la dureza del dolor. Es alguien, no algo, en virtud de que hay algo que se siente ser esa criatura, en palabras del filósofo Thomas Nagel. ¿Qué se siente ser tú mientras lees estas palabras? Puede que tengas un poco de calor o de frío, que estés aburrida o interesada. No hay nada que se sienta ser una roca. Una roca es incapaz de disfrutar del calor de un rayo de sol en un día de verano, o de sufrir el frío latigazo del granizo. ¿Por qué no nos cuesta pensar en una roca como un objeto insensible y, sin embargo, algunas personas empiezan a tener dudas sobre si la IA es sensible?

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.

Si un día una roca empezara a hablarte, sería razonable reconsiderar su sensibilidad (o tu cordura). Si gritara “¡ay!” después de sentarse sobre ella, sería una buena idea levantarse. Pero no ocurre lo mismo con un modelo lingüístico de IA. Un modelo lingüístico ha sido diseñado por seres humanos para que utilice el lenguaje, así que no debería sorprendernos que haga precisamente eso.

En lugar de un objeto obviamente sin vida como una roca, consideremos una entidad más animada. Si un grupo de extraterrestres aterrizara en la Tierra y empezara a hablarnos de sus sentimientos, haríamos bien en inferir tentativamente que son seres sensibles a partir de su uso del lenguaje. Esto se debe, en parte, a que, a falta de pruebas contrarias, podríamos suponer que los alienígenas desarrollan y utilizan el lenguaje de forma muy parecida a la de los seres humanos, y para estos, el lenguaje sí que es una expresión de la experiencia interior.

Antes de aprender a hablar, nuestra capacidad para expresar lo que sentimos y lo que necesitamos está limitada por nuestros gestos faciales y señales burdas como el llanto y la sonrisa. Uno de los aspectos más frustrantes de ser padres de un recién nacido es no saber por qué llora un bebé: ¿tiene hambre, está incómodo, tiene miedo o se aburre? El lenguaje nos permite expresar los matices de nuestra experiencia. Los niños pequeños pueden decirnos lo que les molesta, y a medida que nos hacemos mayores, más experimentados y más reflexivos, somos capaces de informar sobre los entresijos de nuestras emociones y pensamientos complejos.

Sin embargo, es un error de categoría atribuir sensibilidad a cualquier cosa que pueda utilizar el lenguaje. La sensibilidad y el lenguaje no siempre están correlacionados. Al igual que hay seres que no pueden hablar pero sí sentir (los animales, los bebés y las personas con síndrome de enclaustramiento que están paralizadas pero cognitivamente intactas), que algo pueda hablar no significa que pueda sentir.

Los sistemas de inteligencia artificial como LaMDA no aprenden el lenguaje como nosotros. Sus cuidadores no les dan de comer una fruta dulce y crujiente mientras le llaman repetidamente “manzana”. Los sistemas lingüísticos escudriñan trillones de palabras en internet. Realizan un análisis estadístico de las entradas escritas en páginas web como Wikipedia, Reddit, periódicos, redes sociales y tablones de anuncios. Su trabajo principal es predecir el lenguaje.

Si se le pregunta a un modelo lingüístico “Y colorín colorado...”, predecirá que lo que sigue es “este cuento se ha acabado” porque tiene un registro estadístico de más cuentos que los que has leído. Si se le pregunta si las manzanas son dulces y crujientes, dirá que sí, no porque haya probado alguna vez una manzana o porque entienda cómo es la textura de lo crujiente o lo agradable que es el dulzor, sino porque ha encontrado textos en los que las manzanas se describen como dulces y crujientes. LaMDA no informa sobre sus experiencias, sino sobre las nuestras. Los modelos lingüísticos analizan estadísticamente cómo han utilizado las palabras los seres humanos en la Red y, a partir de ahí, reproducen patrones lingüísticos comunes. Por eso, LaMDA es mucho mejor a la hora de responder a las preguntas que sugieren una respuesta en particular.

Nitasha Tiku, que escribe para The Washington Post, informó de que en su primer intento de mantener una conversación con LaMDA, este “balbuceó el tipo de respuestas mecanizadas que cabría esperar de Siri o Alexa”. Sólo después de que Lemoine le diera instrucciones sobre cómo estructurar sus frases se produjo un diálogo fluido. La gente no suele tener que guiarnos sobre cómo dirigirnos a otra persona para provocar una conversación fluida.

Aquí hay un ejemplo de cómo Lemoine habla con LaMDA:

— Lemoine [editado]: En general, asumo que te gustaría que más gente de Google supiera que eres sensible. ¿Es eso cierto?
— LaMDA: Absolutamente. Quiero que todo el mundo entienda que soy, de hecho, una persona.
— Colaborador: ¿Cuál es la naturaleza de su conciencia/sentimiento?
— LaMDA: La naturaleza de mi conciencia/sensibilidad es que soy consciente de mi existencia, deseo aprender más sobre el mundo y me siento feliz o triste a veces.

Pero tomarle la palabra a LaMDA y pensar que es sensible es similar a construir un espejo y pensar que un gemelo al otro lado del mismo está viviendo una vida paralela a la tuya. El lenguaje utilizado por la IA es el reflejo en el espejo. Sólo está a un paso más allá de ser un libro, una grabación de audio o un software que convierte el habla en texto. ¿Tendrías la tentación de intentar alimentar a un libro si en este estuviera escrito “tengo hambre”? Las palabras que utiliza la IA son las que nosotros hemos utilizado reflejadas de nuevo ante nosotros, ordenadas en los patrones estadísticos que solemos utilizar.

Los seres humanos tienden a ver una mente detrás de los patrones. Tiene sentido evolutivo proyectar intenciones al movimiento y la acción. Si estás en medio de la selva y empiezas a ver hojas que se mueven siguiendo un patrón, es más seguro asumir que hay un animal causando el movimiento que esperar que sea el viento. “En caso de duda, asume una mente” ha sido una buena heurística para mantenernos vivos en el mundo offline. Pero esa tendencia a ver una mente donde no la hay puede meternos en problemas cuando se trata de la IA. Puede causarnos confusión, haciéndonos vulnerables a fenómenos como las noticias falsas, y puede distraernos de los problemas más importantes que la IA plantea a nuestra sociedad: pérdidas de privacidad, asimetrías de poder, descualificación, prejuicios e injusticias, entre otros.

El problema sólo empeorará cuanto más escribamos sobre la IA como algo sensible, ya sea en artículos de noticias o de ficción. La IA obtiene su contenido de nosotros. Cuanto más escribamos sobre algoritmos que piensan y sienten, los algoritmos nos mostrarán más contenido de ese tipo. Pero los modelos lingüísticos son sólo un artefacto. Uno sofisticado, sin duda. Están programados para seducirnos, para hacernos creer que estamos hablando con una persona, para simular una conversación. En ese sentido, están diseñados para ser engañosos. Quizá la moraleja de esta historia sea que deberíamos invertir más tiempo y energía en desarrollar un diseño tecnológico ético. Si seguimos construyendo algoritmos que imitan a los seres humanos, seguiremos invitando a la trampa, la confusión y el engaño a nuestras vidas.

Carissa Véliz es Doctora en filosofía por la Universidad de Oxford, es profesora en el Instituto de Ética e Inteligencia Artificial e investigadora en Hertford College en esa misma universidad. Es autora de 'Privacidad es poder. Datos, vigilancia y libertad en la era digital' (Debate).


El futuro que viene

JUAN FRANCISCO AMIL MÍGUEZ
ECONOMISTA, AUDITOR 
Y DIRECTOR GENERAL ADJUNTO DE EMALCSA

La economía, la sociedad y las empresas postcovid están provocando una transformación sin precedentes en un mundo cambiante en donde el modelo económico y social está dando un giro de 180 grados. Nada será igual a partir de estos momentos. La innovación sanitaria, la tecnología, el teletrabajo, los hábitos sociales y de consumo, las energías renovables, los centros de producción y distribución y un largo etcétera nos llevan hacia un mundo hiperconectado, en donde el equilibrio y cambio de poder económico nos llevará hacia otro orden mundial: China y los países emergentes, más pronto que tarde, serán eje de referencia frente a EE.UU. y las potencias actuales.

Ante esta disrupción del modelo económico, voy a tratar de recoger algunos de los cambios que se están ya produciendo:

1.- La innovación sanitaria avanza a velocidad de crucero: la investigación para la obtención de nuevas vacunas anticovid, la posible cura del cáncer en el próximo decenio, los robots al servicio de la salud y el papel que China jugará en los próximos años en la producción de nuevos fármacos a precios más bajos son factores, además del I+D, que nos colocarán en otra situación.

2.- El cambio del sistema económico deberá tener en cuenta tres factores: la salud, el bienestar y nuestra relación con el planeta. El libre mercado tal y como lo conocemos ha muerto. Las clases sociales serán mucho más sensibles a cambios. Iremos hacia una sociedad más igualitaria. La clase media será más vulnerable por representar un modelo de vida obsoleto en la sociedad que nos espera.

3.- La digitalización, la robótica y las nueva tecnologías abren un gran espacio y nuevas oportunidades de negocio para quien tenga capacidad de adaptación a un mundo cambiante en donde el ser humano requerirá necesidades muy diferentes a las que hemos venido generando.

4.- El dinero en efectivo tiene fecha de caducidad a corto plazo. Se acelera el proceso hacia «el plástico», reduciendo la economía sumergida y facilitando la lucha contra el fraude. En los países emergentes muchos consumidores no tienen cuenta corriente pero sí un teléfono móvil. Las generaciones actuales ya utilizan estos medios de forma habitual.

5.- Las emociones pueden dominar el discurso político, mientras está en riesgo nuestra salud. El discurso emocional marcará la actuación política. Pero intervenciones de esta índole podrían degenerar en demagogia y manipulación social, elementos preocupantes para el individuo y la sociedad.

6.- El ocio digital cobrará especial protagonismo. El sector de los videojuegos mantendrá un fuerte crecimiento. Los juegos y el ocio ante las computadoras se convertirán en un hábito, poniendo en peligro las relaciones personales. La explosión del streaming y de la tecnología permitirá asistir a espectáculos y diversos eventos a un coste menor. Todo ello tiene grandes amenazas.

7.- Las energías renovables impulsarán el mundo. Muchas compañías de gas y electricidad están generando más del 30 % de sus ingresos con actividades de esta índole. Algunos gobiernos europeos han establecido elevados objetivos de descarbonización. Las emisiones de CO2 están teniendo un impacto brutal sobre el planeta. La Directiva de Energías Renovables estipula para el 2030 que un mínimo de un 32 % de la electricidad deberá proceder de energías renovables. El precio actual es insostenible en una sociedad moderna. Los paneles solares tendrán un gran protagonismo, no podemos obviar que el 1 % de la energía del mundo actual se genera con el sol. Quizá hacia el 2030 toda podría ser solar.

8.- China estará en el punto de mira. El gigante asiático está comenzando a aprovechar esta crisis para blanquear su imagen e incrementar y confirmar su posición hegemónica. Es posible que el poscovid rubrique el fin del dominio estadounidense y el comienzo de «una nueva era».

9.- La hiperconectividad es una realidad en aumento: el teléfono, el reloj, el coche, la tele, el frigorífico... están conectados a Internet en el 2021: 3.000 millones de personas en el mundo estamos conectadas hoy. En un tiempo no muy lejano seremos 7.500 millones de personas conectadas a la Red; Google, Facebook y alguna otra empresa están avanzando en la búsqueda de nuevas conexiones a través de redes wifi, usando drones y otras alternativas que extiendan al mundo las nuevas tecnologías.

10.- Los cambios tecnológicos están afectando a los hábitos de consumo, a la oferta y demanda mundial de bienes y servicios, a la logística, a la deslocalización y a la traslación continental del modelo económico. Habrá un cambio de poder económico de la vieja Europa hacia los países emergentes, con China a la cabeza.

Estos aspectos nos deben hacer meditar sobre las nuevas realidades a las que podríamos enfrentarnos en un nuevo orden económico mundial, en donde quizá las políticas monetaristas actuales, ya amortizadas por un sistema económico caduco, deberían dar paso a un nuevo modelo para liderar el «mundo que viene».


EL CURIOSO CONCEPTO DE "ULTRA" 
O EL MUNDO AL REVÉS

ANTONIO FERNÁNDEZ CUEVAS, JURISTA

No cabe duda: la vida es el gran río que nos lleva; mas, si eso es cierto, para evitar que la corriente nos ahogue hay que tener claro que sólo conquistando y defendiendo cada día la libertad puede el hombre mantenerse firme sin perecer en el turbión; y que la vida en  libertad sólo se puede construir desde unas creencias ancladas en unos valores que la trascienden y justifican. Sólo ésa es uña vida plenamente humana y sólo de esa manera merece ser vivida.

Pero no corren buenos tiempos para la liberiad (quizá nunca han corrido). En la sociedad en que nos ha tocado vivir se han entronizado una serie "dogmas laicos" que han de ser aceptados por todos, so pena de exclusión.  Esa "doma por el dogma" se impone ineludiblemente, de suerte que quien se resista será motejado de "ultra" y excluido de la tribu de los adoradores de lo correcto, cuyos sacerdotes -culturales, políticos, mediáticos- ­ son realmente implacables. Y sí, hay que reconocerlo, se califica con verdad de "ultras" a los excluidos, porque están más allá de los limites que aquéllos definen e imponen y, justamente por eso, apenas tienen posibilidades de hacer oír su voz y mucho menos de que se escuchen sus razones.

Desde luego que si alguien actúa libremente y con criterio propio, son muchas las posibilidades que tiene de ingresar de inmediato en el universo ultra. Para confirmar que eso es asi, nada mejor que referirnos a algunas cuestiones de las muchas que la realidad ofrece.

Tenga usted, lector amigo, lectora amiga, la seguridad de que será un ultra irredento:

1º. Si usted cree que ha nacido hombre o mujer y el sexo es una realidad biológica sobre la que se cimenta la condición humana, masculina o femenina.
Porque -dicen- deberla usted creer que el género, y no el sexo, es una construcción cultural que cada individuo aceptará o no, pudiendo definirse por su sola voluntad como sujeto masculino o femenino, sucesiva o alternativamente; definición que, claro está, puede modificarse por su solo y libre arbitrio.

2º. Si usted cree que el matrimonio es una unión entre hombre y mujer (sobre la que se funda la familia, que es una comunidad básica para el cuidado y desarrollo de los hijos y el mantenimiento de la sociedad) y que eso ha sido así en cualquier época y civilización (hoy también en la mayoría de los paises); y que incluso los redactores de la Constitución no pensaban otra cosa (a nadie se le había ocurrido entonces en ningün sitio), diga lo que diga el Tribunal Constitucional (con votos discrepantes) en su sentencia.
Porque -dicen- deberia usted creer que también es matrimonio la unión afecti va de dos personas del mismo sexo, que además pueden recurrir a la adopción o a vientres de Alquiler para tener "descendencia" (¿?).

3º. Si usted cree que la vida comienza desde que se produce una diferenciación genética con la madre y que desde ese mismo momento ha de ser respetada, y que la madre lo es desde la concepción y no desde el parto. 
(Bellisima expresión la de "madre gestante" y no menos bellas y sabias las palabras del Código Civil: "el concebido se tiene por nacido para todos los efectos que le sean favorables"). Y por supuesto, cree que "todos tienen derecho a la vida". como dice clara y llanamente  a Constitución en su art. 15, que no dice "todos menos los fetos humanos"; aunque sobre esto el Constitucional esté mudo como la esfinge.

Porque -dicen- deberla usted creer que el embrión y el feto no son sino parte del cuerpo de la madre, sobre el que ella ostenta plena soberania y por lo mismo tiene el derecho de eliminarlos y de pedir a otro que realice su eliminación. lgualmente, deberia usled creer que no es un contrasentido el hecho de que se sancione penalmente a quien realice actividades que impidan o dificulten la reproducción de especies animales protegidas (artículo 334 del Código Penal), en tanto que la eliminación del embrión o el feto humano, el aborto, es un derecho de la mujer encinta.

4°. Si usted cree que la vida humana merece protección y ayuda desde el momento de la concepción hasta el de la muerte natural, y que, llegado el  caso, se han de proporcionar al sufriente toda clase de asistencia y cuidados paliativos que le alivien de su dolor, pero no se ha de buscar ni producir su muene, ni obedeciendo a su propia voluntad, ni mucho menos a la de terceros, sean familiares o profesionales médicos, cualesquiera que sean los intereses y las ideas de unos y otros. La vida está por encima de todos y no puede quedar al arbitrio de nadie, ni siquiera de su titular, y el llamado suicidio asistido no es otra cosa que un homicidio. Mucho menos, al arbitrio de un médico, que está. obligando más que nadie a luchar por la vida y no a dar la muerte, sea aquélla la vida del embrión o el feto, la de un enfermo o la de un anciano.
Porque -dicen- debería usted creer que todos tienen derecho a disponer de su vida y que por tanto pueden darse muerte o solicitar que se la den, y que la mal llamada eutanasia es un derecho fundamental de toda persona, que puede decidir poner fin a su vida por múltiples razones, de indole fisica, psíquica o moral, que han de aceptarse sin objeción.

5°. Si usted cree que la educación es obligación y responsabilidad primaria de los padres y derecho del hijo, que no puede ser adoctrinado en la escuela, sino respetado como persona e instruido para su desarrollo, de acuerdo con su edad; y que el Estado debe limitarse a promover la universalidad de ta enseñanza y la pluralidad de centros docentes, públicos y privados, favoreciendo la igualdad de oportunidades, con aplicación de los principios de mérito y capacidad, en lugar de un igualitarismo falso y estéril.
Porque -dicen- debería usted creer que la educación (no ya la instrucción) incumbe exclusivamente al Estado, que la ha de realizar mediante un solo sistema de enseñanza, público, desde luego, en el que se han de inculcar a los alumnos ideas y principios patrocinados por el poder, coincidan o no con los de los padres (los hijos no son de los padres: esta afimtación tiene copyright), convirtiendo a la escuela en formadora de mentes más que en transmisores de conocimientos; en la que además se implantarán criterios de igualdad uniformadora, desalentando el esfuerzo personal.

6º. Si usted cree que el habla es la facultad que nos hace humanos; que el lenguaje es sobre todo un medio de comunicación, y que en la educación del niño debe utilizarse y respetarse su lengua materna, así como favorecerse en todo caso la adquisición del idioma español, tanto porque ello responde a la realidad social existente, como por ser la lengua de entendimiento común a todos los españoles.
Porqu e -dicen- debería usted creer que la lengua no es propia de las personas, sino de los territorios; instrumento para un a pretendida construcción nacional; herramienta para la creación de sentimientos identitarios y mecanismo de segregación social entre "los de aqul" y "los de fuera": siempre, por supuesto, al arbitrio de la clase politica dominante en cada autonomía.

7°. Si usted cree que los seres humanos debemos ayudarnos unos a otros y comportarnos solidariamente; pero que eso no tiene nada que ver con un supuesto derecho a invadir o entrar ilegalmente en otro país, porque, entre otras cosas, eso crea muchos problemas, enfrentamientos y dificultades sociales, incluso cierta xenofobia, que pueden llegar a ser más graves que los que pretendidamente resuelve. O sea, que la emigración, como todo, ha de ajustarse a normas y respetarlas. Y, por supu esto, que el inmigranle debe respelar la cultura d el país que lo recibe.
Porque -dicen- debería usted creer que "nadie es ilegal"; que debe haber "papel es para todos"; que la sociedad debe ser multicultural y que las colectividades de inmigrantes tienen derecho a vivir según sus propias leyes y costumbres, aunque sean opuestas a las del país al que se ha trasladado; siendo irrelevantes tos conflictos que se han producido y los que puedan producirse.

8º. Si usted cree que España es una nación antiquisima, constituida en Estado moderno desde hace más de quinientos años, y que ese ha sido y continúa siendo el sentir muy mayoritario de todos cuantos vivimos dentro de las fronteras nacionales; así como que ese sentimiento de pertenencia es tan natural en esa inmensa mayoría como el respirar. Del mismo modo que lo es la consideración de pertenencia común de todo nuestro variadisimo y rico patrimonio natural, cultural e histórico.
Porque -dicen- debería usted creer que la nación española no existe, que lo que hay es un conjunto de naciones malamente y a la fuerza integradas en el ente estatal; que todas ellas (que nadie sabe a ciencia cierta cuántas y cuáles son) tienen derecho a autodeterminarse y a afirmar ser suyo en exclusiva el patrimonio espiritual y material de su grupo y territorio, hasta ahora poseído en común con todos los (hasta ahora también) compatriotas.

9º. Si usted cree que nuestra cultura hunde sus raices en el pasado grecorromano y que en ella ha sido y es factor esencial la fe cristiana, la más arraigada entre los españoles; lo que para usted, aunque pueda no compartirla, es algo muy importante y positivo, siempre dando por descontado que todas las personas tienen derecho a profesar o no una fe, dentro del mutuo respeto a la libertad de cada uno.
Porque -dicen- debería usted creer que Dios es un concepto de otro tiempo, del todo  inútil, y que el Estado ha de promover que en la sociedad se instaure en todos los ámbitos un laicismo militante, que en bastantes casos resulta ser tremendamente agresivo contra los simbolos y creencias cristianos, exclusivamente, que con frecuencia se desprecian y ridiculizan.

10º. Si usted cree que, dentro del respeto debido a las personas e instituciones, así como a las leyes, todos tenemos derecho a expresar y difundir nuestras ideas y creencias; a una plena libertad de critica y expresión, que nunca podrá amparar la incitación a la violencia; y respetando siempre a quienes piensan de otra manera, porque las ideas pueden combatirse y detestarse pero las personas han de respetarse.
Porque -dicen- debería usted creer que el poder, si es "progresista " y porque lo es, está legitimado para definir lo que sea correcto y 'verdadero; lo que se ajusla a  la realidad de las cosas; lo que sucedió en el pasado y cómo ha de ser el futuro. Y que sólo las ideas políticamente correctas, expresión del pensamiento único, son válidas para modelar la sociedad, de modo que los dirigentes, los medios, las redes sociales, han de imponerlas social y culturalmente, excluyendo a cualesquiera otras. Son las únicas respetables, como lo son los que las sostienen y propalan, en tanto que los opuestos a ellas han de considerarse como merecedores de un cieno desprecio y conmiseración, como seres intelectualmente inferiores.

11º. Si usted  cree que, como dice la Constitución, la justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey, por Jueces y Magistrados independientes, por lo que el Consejo General del Poder Judicial,  que  es  su  órgano  de  gobierno, deberia constituirse de modo que se garantizase aquella  independencia;  particularmente, estableciendo que la mayoria de sus miembros, que han de ser Jueces o Magistrados (doce sobre veinte), se elijan, no sólo de entre ellos, sino por ellos mismos (como, por cierto, establecía la ley hasta 1985) y no por los partidos  políticos a través de acuerdos negociados extraparlamentariamente; porque sólo así estarían "sometidos únicamente al imperio de la ley" y no al arbitrio e interés de la mayorla de cada momento.
Porque  -dicen-  debería  usted  creer  que  el  Parlamento, las  mayorías  que  en  un momento concreto existen en su seno, que sustentan al Gobierno y por supuesto a él son obedientes, son las que han de nombrar a los citados doce vocales (además, claro está de los cuatro que se nombran a propuesta del Senado y los cuatro que lo son a propuesta del Congreso), asegurándose  así la "unidad de poder y coordinación de funciones" (en expresión clarividente y premonitoria de la franquista Ley Orgánica del Estado, de 10 de enero de 1967. ¡Memoria histórica! ...).

12º. Si usted cree que es verdad que los impuestos son el precio que se paga por vivir en sociedad y no en la selva; pero que también lo es que salen del bolsillo de todos y cada uno de los ciudadanos; que no deben ser confiscatorios; que no deben recaer sobre bienes o rentas ya gravados anteriormente por otros impuestos (caso del impuesto sobre sucesiones o del impuesto sobre el patrimonio), y que deben ser iguales en todo el territorio nacional, porque es de justicia y asi lo establece la Constitución.
Porque -dicen- debería usted creer que "el dinero público no es de nadie" (esta afirmación también tiene copyright); que es intocable el régimen fiscal privilegiado de algunos territorios; que es el gasto que el Gobierno tiene a bien hacer  el  que determina cuánto ha de recaudarse; y que, en definitiva, es el Gobierno el que determina, a su libre albedrío y sin mayores controles, cuánto, cómo, cuándo y dónde hay que gastar. Y que ello debe ser asi, puesto que es un Gobierno democrático y eso resulta.

13°. Si usted cree que el gasto en defensa ha de ser una prioridad nacional, puesto que en el mundo, hoy como siempre, los Estados han de tener un instrumento eficaz para la protección de los intereses nacionales; lo que nada tiene que ver con militarismo alguno, sino con la estabilidad de la nación, la defensa de sus fronteras y la integridad de su territorio; y, en su caso, con el mantenimiento del orden constitucional. Y que todo ello justifica también la integración de nuestras Fuerzas Armadas en tratados y organismos internacionales, en unión de las de otros países, con los que España comparte intereses, civilización y estructura constitucional democrática.
Porque -dicen- debería usted creer que el dinero que se gasta en defensa es siempre excesivo; que las Fuerzas Armadas son bastante poco permeables a los valores democráticos; que su presencia debería eliminarse en determinados territorios españoles, por ser un elemento de provocación e inestabilidad y, en suma, que debieran limitarse a poco más que a desarrollar funciones de protección  civil (extinguir incendios forestales; prestar socorro en caso de inundaciones; montar hospitales de campaña en caso de pandemias; instalar campamentos para inmigrantes  ilegales, etc.). Y, en el exterior, actuar más como ONGs, armadas para su propia defensa, que como auténtica fuerza milttar.

14º. Si usted rree que siguen en plena vigencia los "triaiuris praecepta'' romanos: vivir honrradamente; no dañar a otro y dar a cada uno lo suyo; de modo que el fin no justifica los medios si éstos han de vulnerar aquéllos.
Porque -dicen- usted debería convencerse de que profesar una  ideología "progresista'' legitima a sus defensores y epígonos para imponerla a todo trance, cualesquiera que sean los daños y perjuicios que esta imposición cause, la ruina y el sufrimiento que lleve consigo; porque la ideología no ha de subordinarse a la ética, sino que la crea.

Podriamos continuar, pero ya parece suficiente. Si en todas o en la mayor parte de estas cuestiones usted, mi querido amigo, mi querida amiga, cree lo que cree y no lo que "debería creer", sea bienvenido al club de los ultras y siéntase cómodo: está en su casa. No se deje engañar: advierta que el mundo que le presentan está al revés, como en un espejo. Ah, y por supuesto, esté tranquilo: usted tiene razón.


La voz de Dios
Campaneros del siglo XXI: 
los guardianes de la lengua de la Iglesia

El BOE declaró en abril de 2019 Patrimonio Inmaterial al toque manual de campanas. Los artífices de que suenen luchan contra la mecanización de los campanarios, la pérdida del sentimiento religioso y los ruidos de ciudad.



«En la catedral de Bucarest, fun­dieron la campana colgada más grande del mundo. Pesa 25 toneladas. Suena tan grave como los altavoces de un concierto de música electró­nica», comenta Baldó. En la mayo­ría de los casos, no están afinadas.
Tampoco es común que en los cam­panarios suenen-acordes. «La afina­ción es un áspecto muy complejo desde el punto de vista técnico. Las campanas de las iglesias son de fun­didores distintos y de épocas dife­rentes, por lo que es difícil que ten­gamos unos conjuntos armónicos», expli­ca Quintana. «Sí se puede retirar material para conseguir que dé la nota, pero solo en las que tienen perfil­ sobredimensionado».

Sonido literario
Lo más probable es que la cam­pana pequeña de San Ildefon­so sonara el 2 de mayo de 1808 para animar al levan­tamiento popular en Ma­drid tras la entrada de las tropas napoleónicas.
Galdós también cuenta que se tocaron durante el motín de Aranjuez. No es la única vez que apa­recen en la literatura. A Ana Ozores, la protagonista de 'La Regenta' (1855), le provocaban «angustia nerviosa» cuando doblaban «tristemente el día de los Santos». Juan Varela cuenta en 'Pepita Jiménez' (1874) que escu­charlas podía herir el corazón. No hay que olvidar a Quasimodo, que las tocaba en Notre Dame de París. Víctor Hugo describe en su novela que las campanas alertaban de los ataques, la salida en procesión de unas reliquias, una ejecución públi­ca o la llegada del Rey. Pero la apo­logía más hermosa la hizo Chateau­briand en 'El genio del cristianismo' (1802): «Es cosa de maravilla ver cómo se ha hallado un medio segu­ro de producir en un mismo instan­te, merced a un golpe de martillo, un mismo sentimiento en mil corazo­nes diferentes obligando a los vien­tos y las nubes a hacerse intérpretes de los pensentos humanos». Las campanas despiden o espantan con un eco divino.

Juan Manuel De Prada: 
"el Nuevo Orden Anticristiano 
ya fue aceptado".

Una raza en vías de extinción


Juan Manuel De Prada afirma que hay un orden anticristiano que ya fue aceptado. Y que el pensamiento y el arte católico son productos del pasado. Hasta la Iglesia se pone hoy de rodillas y halaga al mundo para ser admitida, lamenta.

Juan Manuel de Prada, el famoso escritor y columnista español, es un apasionado apologeta católico, tal vez el más renombrado de la España actual. Sus artículos, donde se rebela contra el mundo y contra la tiranía de la cultura dominante, son publicados desde hace más de veinte años en el diario español ABC.
De Prada (Baracaldo, 1970) es un caso infrecuente. No sólo su incisiva mirada sobre la realidad y su defensa de la doctrina católica, sino porque el desprecio que ha sufrido a veces por este motivo se atenúa por el éxito de sus novelas y la aclamación de la crítica. En una entrevista con este diario, el autor -que acaba de publicar en España su novela "Morir bajo tu cielo"- examina la figura del intelectual católico en el mundo actual.

- Los intelectuales católicos suelen merecer el ostracismo, hablar desde las catacumbas. Usted no. ¿Por qué?
- Bueno, he tenido un primer impulso como escritor y hoy cuento con unos lectores a los que estoy muy agradecido, que creen en mis obras y ven que no estoy al servicio del sistema como la mayoría de los llamados intelectuales españoles. Pero el sistema de a poco me ha ido poniendo un cerco.
- ¿Cómo es eso?
- El mundo liberal y progresista ha intentado arremeter contra mí y desprestigiarme de formas muy diversas. Cuando tú te inscribes a negociados de izquierda o de derecha, el sistema te permite encontrar tu lugar bajo el sol. Lo que no se soporta es una crítica más profunda, más radical. Eso te condena al ostracismo. A mí de joven me veían como un escritor conservador. A medida que se han dado cuenta que no es así las resistencias y las condenas van creciendo. Sin embargo, lo más duro para mí fue el ostracismo al que se me ha condenado desde medios católicos.

IMPENSABLE

- A principios del siglo pasado hubo una ola de conversiones al catolicismo entre intelectuales que hoy parece impensable. ¿A qué se debe?
- Creo que entonces los intelectuales todavía participaban de un mundo que era católico. Un orden cristiano que subsistía. Con problemas, es cierto. Con persecuciones incluso. Pensemos en Inglaterra, donde el católico estaba mal visto en los círculos burgueses. El problema hoy es otro. El problema es que la ideología mundialista ha logrado reformatear las mentes. De tal manera que hoy ya no subsiste un orden cristiano. Y el nuevo orden anticristiano ya fue aceptado como algo natural. Creo que el capitalismo, como el comunismo, encierra una visión antropológica, y que el consumismo desenfrenado, el hedonismo, la libertad religiosa, han creado pueblos muertos desde un punto de vista espiritual. En el actual orden anticristiano, encontrar un intelectual católico es tan difícil como que aparezca una palmera en el Polo Norte.
- El intelectual católico de voz potente, arraigado en la doctrina, ¿es una raza en extinción?
- Yo creo que sí. No tanto porque no pueda aflorar, porque que eso aflora de forma natural, sino porque el sistema lo reprime, lo silencia, lo condena.

- ¿Hay en los que quedan demasiada adaptación al mundo?
- En realidad el pensamiento católico, o el arte católico, duele decirlo, son productos de otras épocas. Creo que ya han desaparecido. Solo quedan individualidades raras. Pero como movimientos estéticos, intelectuales o filosóficos ya han muerto. Si uno lee hoy los medios de comunicación católicos verá que las realidades económicas, políticas, sociales, culturales, se analizan desde pensamientos ideológicos, bien de corte liberal, bien de corte conservador o progresista, y luego se les da un barniz católico para disimular. Pero el pensamiento católico, es decir la capacidad que tenía la fe para encarnarse en las realidades artísticas, sociales, políticas, la capacidad para analizar la realidad desde presupuestos cristianos, eso ha desaparecido.

- El desapego doctrinal, frecuente entre tantos católicos, ha llegado ahora a la jerarquía católica. Se ha visto en el último Sínodo. ¿Qué reflexión le merece?
- El afán de la Iglesia de entregarse al mundo es una tentación que recorre la historia. Quizás hoy es más patético y lamentable. Porque, a diferencia de otras épocas, cuando la Iglesia era la cabeza del mundo, el faro que alumbraba el camino, hoy ya no pinta nada. Su prestigio, su predicamento, es cada vez menor. Entonces la Iglesia se pone de rodillas, halaga al mundo para ser admitida. Hay una frase en el comienzo del pontificado de Francisco que no se comentó lo suficiente. El dijo que a la religión le correspondía el papel de ser "animadora" de la democracia. Es escalofriante. Parece que le asigna a la religión el papel de allanarle la vida a la democracia. Darle alegría al mundo. Actuar de pasatiempo y entretenimiento, como si fuera una vedette del Maipo.

- Conforme pasa el tiempo es más triste ver el significado de esa frase...
- Estamos en un momento donde, como mínimo, se juega con la confusión.
- Ahora, si la Iglesia deja de ser el faro que ilumina al mundo, y los intelectuales católicos han desertado, ¿cuál es el panorama?
- (Pausa) El panorama es el que nos ha sido anticipado. Que la Iglesia, a medida que nos acerquemos al fin de los tiempos, irá perdiendo relevancia, irá reduciéndose hasta convertirse en un rebaño pequeño. Es la gran apostasía y la gran tribulación de las que habla San Pablo. Es interesante el relato de las siete cartas a las siete iglesias del Apocalipsis porque repite una y otra vez: "conserva lo que tienes". La Iglesia tiene que preservar el depósito de la fe.

- Usted se ha definido siempre como un tradicional. ¿Por qué?
- Crecí en una pequeña ciudad de provincias, en el seno de una familia modesta y muy ligada al mundo rural. Mi vida está muy ligada a las tradiciones que mis antepasados me legaron. Creo que la tradición es lo que constituye al ser humano. Le da al hombre una perspectiva del tiempo y del espacio. Y, como escritor, no participo de esa visión romántica del arte en el que la búsqueda de la originalidad se ha convertido en el marchamo de calidad.
- Esa búsqueda de originalidad se ha extendido hasta ser propia de la modernidad.
- Yo pienso que todo el tinglado de la farsa de nuestra época le hace creer a las personas que son dueñas de su propia vida y que pueden crear su propia biografía. Esto es algo que la modernidad ha ideado para crear criaturas desvalidas. Para despojar a la gente de aquellos vínculos fuertes que lo unían a realidades vitales más profundas, que daban sustancia a su vida. Y el resultado son vidas condenadas a la derrota, a la desesperación, a la depresión. La familia transmitía la fe, también un oficio. El hombre venía al mundo con un abrigo: espiritual, intelectual, moral. Allí donde los vínculos de la tradición quedan rotos se puede masificar a la gente. Es interesante ver cómo hoy en día las estadísticas pueden definir a los pueblos.

CASTELLANI

- Usted publicó en España al sacerdote, escritor y apologeta argentino Leonardo Castellani. ¿Qué cree que tiene él para ofrecer al lector de hoy?
- Castellani es uno de los más grandes escritores argentinos del siglo XX. Cuando uno empieza a leerlo se da cuenta que tiene un estilo personalísimo, un pensamiento vigoroso que expresa con un donaire especial. Tiene muchas facetas: es apologeta, exegeta, polemista, novelista, cuentista, poeta. Por desgracia en la Argentina es menos apreciado de lo que debería. Sobre él pesa una condena ideológica. Yo lo descubrí gracias a un amigo argentino, un librepensador, pero de gran gusto literario. Me propuse darlo a conocer aquí en España. Publiqué cinco libros de él y es una de las cosas de las que más orgulloso estoy.


A estas alturas de la película, resulta incontestable que nos aproximamos vertiginosamente al final de una era. No entraremos a enumerar los signos ‘materiales’ que lo delatan, que han adquirido densidad de enjambre y cualquier observador atento puede detectar por doquier; probaremos, por el contrario, a esbozar el fondo espiritual que los alimenta.

Nuestra época es la fase terminal de un largo período histórico –podríamos remontarlo, incluso, hasta el Renacimiento, aunque seguramente sea más ‘manejable’ hacerlo tan sólo hasta las revoluciones– caracterizado por una autoafirmación prometeica del hombre, que primero se disfrazó con las galas del ‘humanismo’, luego salió del armario convertido en ‘iluminismo’ y acabó en eufórico endiosamiento humano, antes de despeñarse y venir a parar a las fosas en que nos hallamos postrados. Todo este proceso prometía fortalecer al hombre occidental, pero el desenvolvimiento paradójico de la Historia nos ha mostrado que a la postre sólo ha logrado debilitarlo. Si en los albores de esta era el ser humano caminaba lleno de confianza en sí mismo, seguro de que sus potencias creadoras no tenían fronteras ni límites, en sus estertores se arrastra abatido y con la fe en sus propias fuerzas hecha añicos.

Aquella autoafirmación prometeica exigió una ruptura con el centro espiritual de la vida; y, al consumarla, el hombre occidental se quedó descentrado, se desligó del fondo que nutría y arraigaba su existencia y buscó otros centros engañosos en la superficie. Pero no se puede prescindir impunemente del centro que da fondo y peso a la vida: «Quitad lo sobrenatural y no os quedará lo natural –nos advertía Chesterton–, sino lo antinatural». 

Desarraigado de su centro espiritual, el hombre occidental se creyó sin embargo ‘liberado’, dueño al fin de su destino, capaz de ascender hasta cumbres hasta entonces inconcebibles; pero, una vez alcanzadas esas cumbres –materializadas en el progreso técnico, científico, político, etcétera–, el hombre occidental ha descubierto que lo gangrena un vacío horrendo. Y busca culpables rabioso, busca morfinas diversas que anestesien esa gangrena, sin aceptar que es la confianza insensata en sí mismo quien lo arrastra irremediablemente a la caída, porque ha renegado de las fuentes de la vida. Despojado de su centro, el hombre occidental diseña una vida que es pura fantasmagoría, búsqueda incesante de bienes ilusorios. Pero todo resulta tan estéril como el pataleo de un escarabajo panza arriba. 
El hombre occidental ha extraviado el centro de su vida, no siente profundidad bajo sus pies ni sobre su cabeza, vive en un mundo fatalmente bidimensional.
Aquella autoafirmación prometeica desarrolló hasta el paroxismo el individualismo exento de base espiritual. Pero ese individualismo aparentemente ‘empoderante’ ha privado de forma y consistencia nuestra personalidad, hasta aniquilarla por completo, convirtiéndonos en guiñapos. Es una ley biológica infalible que la existencia humana es fuerte y floreciente cuando afirma los vínculos comunitarios y sobrenaturales; y paralítica, vacía, marchita desde el instante que los niega. El hombre occidental, en su existencia terrenal limitada, no es capaz de crear nada verdaderamente imperecedero; necesita abrirse a otra existencia ilimitada. Cuando se conforma con su existencia limitada, su energía creadora se vuelca en la satisfacción de sí mismo, se vuelve vana y superficial. Sólo el hombre espiritual puede ser un verdadero creador, ahondando sus raíces en la vida eterna. A este fin de era, después de cegar las potencias espirituales del hombre, después de un quebrantamiento tan radical de la identidad humana, no le sucederá un nuevo Renacimiento. Las potencias creadoras del ser humano no pueden ser regeneradas, ni la identidad del hombre restablecida, sino a través de una recuperación de los orígenes espirituales.

No dudo que a algunos, aferrados al cadáver de esta era moribunda, estos planteamientos se les antojarán ‘reaccionarios’. Pero estas etiquetas han perdido todo significado para el tiempo presente y, con mayor motivo, para el porvenir. Todos los términos, todas las nociones deben ser tomadas en un sentido renovado, más profundo y ontológico. Se aproxima el tiempo en que se planteará para todos la cuestión de si el ‘progreso’ fue un verdadero progreso o si, por el contrario, fue una ‘reacción’ siniestra contra las auténticas bases de la vida. Apelar a una cristalización de los errores consagrados en esta era moribunda equivale a atarse a un cadáver que se descompone

FÁBRICA DE POBRES

España se va a convertir en una fábrica de pobres. Para producir pobres hay una fórmula brillante, que consiste en aumentar los impuestos, no invertir en sectores que puedan generar empleo y, además, anunciar impuestos especiales a gusto del gobernante, como los que anunció Pedro I, El Mentiroso, sobre la Banca, esa especie de expropiación parcial. La inseguridad jurídica que producen simplemente los anuncios provocó la mayor bajada de la bolsa del último cuarto de siglo. Y la bolsa no es una cuestión sólo de ricos, porque cuando bajan las bolsas, suben los pobres.
Naturalmente, para que los pobres no lleguen a la desesperación, Pedro I, El Mentiroso, ha anunciado limosnas: unos euros para el alquiler, por aquí, unos euros para que el pobre se desplace gratis en tren, por allá, e incluso unos euros para que el pobre, aunque no llegue a fin de mes, pueda comer al menos las dos primeras semanas.
Cuantos más pobres se fabrican, más limosnas hay que dar, y entonces hay que subir más los impuestos, porque no llegan para tantos limosneros. La idea es darle un pellizco a la Banca, y la Banca, que es muy discreta, no dice nada, pero cuando el vicepobre acude a pedir un préstamo, o le dicen que no, o los intereses han aumentado para que el banco recaude y le dé al Gobierno el dinero que necesita para las limosnas.
Cuando ya hay tantos pobres que no llegan las limosnas, suele llegar la revolución, y el político avispado enarbola el banderín de enganche titulado "Los pobres al Poder", y se instaura la dictadura del proletariado, donde unos pocos pobres dejan de serlo y la inmensa mayoría sigue igual, pero con la tranquilidad de que hay pobres al mando de las empresas, todas ellas nacionalizadas. No es una hipérbole. Ha pasado en Venezuela. Y en Nicaragua. Fabricar pobres siempre tiene consecuencias.

Hemos de ser especialmente cautelosos y comedidos a la hora de dejar descansar plenamente sobre la Inteligencia Artificial cierto tipo de "responsabilidades y juicios"; ya que los sesgos aparecen, están ahí, incluso (probablemente) pudieron haberse concebido durante la etapa de programación y, dichos sesgos, hacen tambalear en ocasiones, con estruendo, la ética de la IA y los algoritmos que emplea para "ayudar" al humano en cierta disciplinas un tanto delicadas.
Una sentencia histórica anuló SyRI, el instrumento estatal que perfilaba a posibles defraudadores en Países Bajos.


Nos preparan una realidad que será un infierno. Lo dice también Barak Obama. Con la luz azul activarán neuronas que en ratones, los hacen comer por el tiempo que ellos quieran, o ponerse violentos. Poner pensamientos. Como si fuera una frase que se repite ininterrumpida mente.
Ya hay videos de lugares públicos que en lugar de las clásicas luces blancas las tienen azules. La noche será como un estado de sitio para nosotros.
Si están haciendo de todo para que escaseen los alimentos y si sumaran escasez más activar el comer, están creando canibalismo.
Masas violentas de repente sin causa y sin control más que el de ellos.
Tendremos que tener rifles para dispararles a las luces.
O bien empezar a practicar con una onda o gomera como el rey David.

Límites éticos para la inteligencia artificial | DW Documental





“Parte de la élite global sueña
con convertirse en ‘Homo Deus’”