Salvando las distancias de tiempo y circunstancias, parecido es lo que han experimentado millones de españoles en demasiadas ocasiones durante las últimas décadas. Por ejemplo, cuando a Rajoy le tocó enfrentarse al golpe de Estado de 2017, en vez de sofocarlo contundentemente y aprovechar la ocasión para restaurar el imperio de la ley barriendo el régimen totalitario impuesto en Cataluña, se burló de toda España con aquel 155 de pacotilla que no sirvió para nada y que tardó muy poco en devolver el poder a los separatistas. El rey Felipe VI, por el contrario, cumplió con su deber y devolvió a los españoles la confianza en sus instituciones. Pero también aquello fue efímero, puesto que no ha tardado en demostrar, en el mejor de los casos, su impotencia para aguantar la arremetida golpista de izquierdistas y separatistas. Probablemente acabe pagándolo con su corona, pues pocos van a seguir apoyándole.
En 1996 Torcuato Luca de Tena le dedicó un laudatorio artículo, *"La invasión tercermundista", que sería inconcebible en el ABC woke de nuestros días. Lo único que a este humilde juntaletras se le ocurre decir sobre la novela de Raspail es que probablemente se trate del libro más importante que puedan leer los lectores del siglo XXI. Una vez rendida la sociedad y las instituciones francesas, y tras ellas las de los demás países europeos, ante la invasión de millones de afroasiáticos, el último puñado de resistentes, una veintena de civiles y soldados agrupados en una vieja aldea de Provenza, es masacrado por la fuerza aérea francesa puesta al servicio de los enemigos de Francia: «Al fin y al cabo, es mejor morir a manos de los nuestros».
Es comprensible que haya millones de personas en toda Europa que todavía no se han dado cuenta de que sus respectivos Estados son los peores enemigos de sus respectivas naciones. Pero poco a poco otros muchos van sacudiéndose la estupefacción y comprendiendo que, por primera vez en la historia, los gobiernos de los países occidentales no tienen interés en perpetuar la existencia de sus naciones. No sólo eso, sino que desean su desaparición.
El poder ejecutivo, el legislativo, el judicial, los medios de comunicación, los creadores de opinión de masas, todas las instituciones, entidades y personas con poder e influencia reman en la misma dirección hacia la autodestrucción de Europa. Porque Europa ha sido condenada a muerte para que otros vengan de fuera a repoblarla y refundarla según principios religiosos, jurídicos, morales y culturales muy distintos. En el mejor de los casos, de Europa sólo quedará la denominación geográfica.
En España somos expertos en despreciar a las víctimas y homenajear a los asesinos; en procesar a los defensores de la ley y adorar a los golpistas. Medio siglo de ETA nos ha convertido en campeones mundiales de esta vergonzosa disciplina. Y el trato privilegiado dado a los protagonistas del golpe de Estado catalanista ha puesto la guinda de la infamia.
Pero lo de ahora está a otro nivel. Por toda Europa los gobiernos, las policías y los jueces desprotegen y oprimen a los europeos y protegen y benefician a los llegados de fuera, criminales incluidos. No habrá que combatir contra ningún enemigo exterior. Serán nuestros gobiernos los que nos persigan. Nuestros medios de comunicación, los que nos difamen. Nuestros policías, los que nos detengan. Nuestros jueces, los que nos encarcelen. Nuestros ejércitos, los que nos disparen. Y quienes sigan sin comprenderlo, estén atentos a las noticias. Antes o después lo comprenderán.
* Quien escribe lo que sigue no es ningún ultra que ande dando cadenazos a los inmigrantes por la calle, ningún fanático que escupe su odio fascista contra un mundo que no entiende. Se trata de un texto de Torcuato Luca de Tena,periodista y escritor, miembro de número de la Real Academia Española, ya fallecido. Esto apareció en su día en el ABC, periódico que su familia fundó a principios del siglo XX. No creemos capaz a ese diario de reproducir hoy lo que dejó escrito el ilustre periodista español bajo el título de: “La invasión tercermundista”, que reproducimos para ustedes.
“Todo hombre y toda nación tienen el sagrado derecho de preservar sus diferencias y su identidad en nombre de su futuro y en nombre de su pasado.
Y esto lo proclamamos ante el riesgo que supone para Occidente la invasión pacífica de Europa por los indigentes del Tercer Mundo.
Podemos precisar: por respeto a su pasado y por prevención de su futuro. Por respeto a su pasado, porque toda nación es como una nave ya anclada en la Historia con unas características determinadas -idioma, costumbres, religión, familia, tradición, escala de valores- cuidadosamente preservadas a través de los siglos, y que conforman su personalidad única y diferencial.
Y por prevención de su futuro, porque no es admisible que una sola generación, en nombre de unos principios pasajeros, de ética dudosa (aunque se ampare en ella) transforme de un plumazo la idiosincrasia de pueblos viejos y gloriosos que son su ciencia, investigación, audacia, descubrimientos y modo de ser, han ido elevando la dignidad de la especie humana a límites impensados. Esto es Europa: no un espacio geográfico determinado, sino una cultura en que cada uno de sus miembros jugó en su día un papel determinante, como si se hubiesen distribuido la especialidad del trabajo para transformar a la especia humana en algo muy superior a su condición animal: cuna del genio y del ingenio; de los descubrimientos geográficos, químicos, biológicos, físicos, astronómicos, atmosféricos y técnicos; traductores y enunciadores de las leyes de la Naturaleza;
domadores y primeros usuarios de las ondas invisibles, el sonido y la electricidad que pueblan el espacio; taller inmarcesible de todas las artes; inventores del derecho internacional, civil, penal y político; pioneros del espacio extraterrestre; creadores del Estado moderno; fuente de riqueza y templo del bienestar.
Todo ello está en riesgo de esfumarse, como niebla movida por el vendaval, si no se toman serias medidas comunitarias contra la lenidad en la aplicación de las leyes de inmigración. Europa es un formidable foco de cultura y prosperidad que irradia su luz sobre el resto del planeta, pero es un territorio mínimo frente a una inmensidad poblada por diez mil millones de seres de los cuales las nueves décimas partes pertenecen a lo que se ha querido llamar Tercer Mundo. La raza europea y sus prolongaciones en América y Australia son como una leve mancha de piel blanca, como la Vía Láctea en el firmamento, frente a la dermis afro-asiática-polinesia-americana del resto de la Tierra.
Pero no se trata de hacer la apología de la raza blanca en detrimento o menosprecio de las de color. Se trata de defender un espacio cultural y político -Europa- de una invasión foránea de indigentes (si no lo fueran se quedarían en sus países) cuyos individuos son de evidente inferioridad cultural, educacional, higiénica y sanitaria, de otras costumbres, de otras religiones, con otra escala de valores, otros gustos y un muy diferente sentido reverencial del trabajo.
Asombra, pasma enumerar lo que ha hecho Europa en el mundo y para el mundo, y estremece pensar que todo ello puede perderse, difuminarse, obscurecerse -la piel también, ¿por qué avergonzarse de ello?- con la invasión pacífica de genes extraños que no portan con ellos ni el amor a la superación, ni la veneración al trabajo bien hecho, o simplemente al trabajo.
Hay que poner un freno a esto. No sólo con la expulsión automática de los ilegales “sin posibilidad de reinserción por haber violado una vez las leyes del país”, sino con el uso de una extrema prudencia en la concesión de los permisos legales de inmigración, con la mirada puesta exclusivamente en las estadísticas y necesidades legales de mano de obra, y en la defensa de los superiores intereses del país. Pues, lo repetimos una vez más, todo hombre y toda nación tienen el deber sagrado de preservar sus diferencias y su identidad en nombre de su futuro y en nombre de su pasado".
Torcuato Luca de Tena
(ABC, 28/12/1996).
A poco más de una quincena de años de aquella sensata advertencia, podemos constatar el fracaso estrepitoso de todas las políticas seguidas en materia de inmigración en España en ese tiempo. Pagaremos muy caro esos errores, que son los de toda una sociedad, el fracaso colectivo de una nación… y de un continente. El derrumbe también de un modelo de civilización insostenible y
suicida:
la religión de los "Derechos del Hombre", el “antiracismo” institucional y sus derivados: la diversidad, la apertura al otro, el arrepentimiento perpetuo, la culpabilización, el etnomasoquismo, la feminización de Occidente, la castración del hombre blanco…
Sí, los enemigos también están dentro. Son los que piensan que Occidente ha sido una basura que ha contaminado al resto del planeta con su economía, religión, política y cultura. Son esos que sostienen que Europa fue una máquina de explotación que debe desaparecer como civilización para dar cabida a los supuestamente explotados. Son todos aquellos que aquí quieren cancelar museos, escritores y artistas porque les resultan «machistas» o «esclavistas». Son los que laminan los programas educativos y universitarios para ahormarlos a su ideología woke, o que censuran las opiniones y el lenguaje que no coincide con el dogma del progreso. Todos estos han enfermado a Europa. Son una plaga como lo fueron los totalitarios del siglo XX, aquellos fascistas, nazis y comunistas que castraron la libertad como identidad de Europa para construir una civilización nueva ajustada a su ideología excluyente e «indiscutible».
Miedo. A perder la seguridad, el trabajo, la identidad. Miedo que crecía en vecinos que veían sus barrios cambiar y su país ser invadido por extraños que ni se parecían ni se integraban. Miedo que generó la polémica teoría de la Gran Sustitución o del reemplazo demográfico en Occidente, al principio marginal. Miedo que ha provocado una reacción identitaria que llega al poder y que pone en primer lugar la defensa de las fronteras y la protección de esa identidad considerada propia. Una teoría que cala, cada vez más, en ciudadanos, intelectuales y políticos alarmados por un multiculturalismo denunciado como irresponsable, en plena crisis de la globalización liberal-progresista. Miedo, imparable, transformador.
Sergio Fernández Riquelme es historiador, doctor en política social y profesor titular de universidad. Autor de numerosos libros y artículos de investigación y divulgación en el campo de la historia de las ideas y la política social, es especialista en los fenómenos comunitarios e identitarios pasados y presentes. En la actualidad es director de La Razón Histórica, revista hispanoamericana de historia de las ideas.
UN FANTASMA RECORRE OCCIDENTE
"Las personas se definen a sí mismas en términos de ascendencia, religión, idioma, historia, valores, costumbres e instituciones. Se identifican con grupos culturales: tribus, grupos étnicos, comunidades religiosas, naciones y, en el nivel más amplío, civilizaciones. La gente utiliza la política no sólo para promover sus intereses sino también para definir su identidad. Sabemos quiénes somos sólo cuando sabemos quiénes no somos y, a menudo, sólo cuando sabemos contra quién estamos". (Samuel P.Huntington)
Recorre el conjunto de Occidente, asustando a élites dominantes y a partidos tradicionales. Un espectro, en forma de cuestionada teoría conspirativa, provoca miedo, mucho miedo, poniendo supuestos problemas migratorios en primera plana, anunciando el reemplazo étnico o cultural en diferentes naciones europeas, y provocando reacciones "populistas" de derecha con creciente éxito electoral. Por ello, medios oficiales y subvencionados intentan minimizar o esconder esta idea, las formaciones políticas del sistema niegan categóricamente sus postulados, y académicos supuestos o reales al servicio del poder rechazan la validez de la teoría de la llamada Gran Sustitución o "gran reemplazo". Simple xenofobia, mero racismo, populismo de manual. Así se debía de ver.
Algo de intriga conllevó su lanzamiento público y ciertos recelos provocó cuando la primera idea, en términos de "invasión" comenzó a calar en sectores de la derecha francesa en el siglo XX. Pero comenzó a dar pánico, bien entrado el siglo XXI, cuando una teoría le puso nombre, en forma de "reemplazo". Porque, pese al inmediato rechazo general a la misma por los poderes políticos y académicos, las encuestas detectaban que cada vez más ciudadanos creían en ella, cuando los sondeos evidenciaban que poco a poco ganaban votos los partidos denunciados como de extrema derecha, y cuando titulares en prensa mostraban que dicho fantasma hacía incluso dudar, en ciertas medidas de gestión de las migraciones, a partidos de naturaleza izquierdista (de Dinamarca a Eslovaquia). Y en algunos momentos llegó a cundir el pánico, cuando organizaciones defensores de esta idea, o inspiradas por la misma, se encaramaban en todo lo alto de la intención de voto o ganaban, por fin, elecciones plenamente democráticas, incluso en los todopoderosos Estados Unidos de Norteamérica. Así comenzaba a verse.
Atentados en plena calle, islamismo persistente, barrios fuera de control, zonas degradadas por su presencia, inseguridad creciente, e inevitable reemplazo étnico o cultural en demasiadas regiones, como se veía en las maternidades, en los colegios o en sus propias selecciones de fútbol. El contexto ayudaba a la idea y a su teoría. Los foráneos crecían en número, especialmente africanos y asiáticos de religión musulmana. Mientras, los nativos o asimilados eran cada vez menos, porque apenas formaban familias y tenían hijos, entre la aculturación individualista y consumista y las condiciones de vida precarias y hedonistas; se sentían extraños en zonas de su propio país ante tanta moda foránea (como sus cadenas comerciales multinacionales) y ante tantas vestimentas y rostros diferentes;y perdían los símbolos de su patria, como las formas tradicionales de convivencia y las señas de identidad que heredaron, ante estas hordas invasoras que, a diferencia, de migrantes de otras épocas, o vivían al margen o imponían su mayoría creciente.
El fantasma ya no aparecía en pesadillas puntuales. Nacía una reacción que dejó de clamar en el desierto: comenzó a poner sobre la mesa esta idea, directa o indirectamente, en los emergentes debates sobre los efectos indeseados de la migración sin freno y sin integración posible; siguió con el crecimiento constante en las encuestas de formaciones políticas soberanistas y/o identitarias que ponían los intereses nativos primero, sin rechazar de plano la teoría; y culminaba con la aparición de gobiernos en el oriente europeo contrarios a las políticas multiculturales y con medidas restrictivas ante las migraciones, y con rupturas parciales o totales de los "cordones sanitarios" en la zona occidental establecidas por las partitocracias sistémicas. En Italia tomaban el poder y frenaban las llegadas de extranjeros por su flanco sur; en Austria y Alemania se convertían en fuerzas políticas de entidad que marcarían un debate ineludible, pese a "grandes coaliciones" para frenarles;y en los Estados Unidos, ni más ni menos, regresaba Donald Trump con un plan mucho más contundente contra la inmigración masiva e ilegal.
Los ricos o acomodados bien progresistas no los tenían que soportar. No estaban en sus barrios ni en sus urbanizaciones;nos les quitaban los trabajos o no bajaban los salarios por su competencia desleal; no sufrían la inseguridad por su presencia ilegal y no les convertían en minoría en sus propias calles; no conocían la presión que provocaban en los recursos sociales porque esos privilegiados no los necesitaban, ni sentían los crecientes precios de la vivienda por su llegada masiva, porque podían permitirse su costo sin problemas; y no amenazaban su identidad de siempre porque podían ser cosmopolitas sin obligaciones y con los bolsillos bien llenos. Y buena parte de esas clases medias y obreras, que se sentían abandonas y rodeadas, comenzaban a reclamar, en las redes, y a votar, en las urnas, por soluciones que los nuevos soberanismos escucharon bien: cerrar o limitar las fronteras, obligar a una asimilación real, primar al trabajador nacional, y poner la identidad nacional, de referencia o de pertenencia, como tema fundamental para frenar la cada vez más vista como real sustitución cultural o étnica planificada por el globalismo internacional.
Jean Raspail fue el primero en advertirlo. Porque sus nuevos vecinos eran muy diferentes. No venían de otras partes de Europa, como antes, y mantenían sus tradiciones y costumbres. No eran bienvenidos en muchos casos, y quitaban los trabajos o bajaban los sueldos.No aparecían de poco en poco, sino que su presencia incontrolable degradaba de golpe pueblos y barrios. No se adaptaban a la cultura dominante y generaban inseguridad y violencia en las calles. No respetaban los valores de su entorno comunitario, empezando a cambiar pueblos ente ros con sus niños, sus ropas y sus tiendas. Y, sobre todo, nos sustituirían.
Posteriormente, Renaud Camus le puso nombre a esta versión extrema del miedo a las repercusiones de los procesos migratorios de la edad global y posmoderna en Occidente: Legrand remplacement. Era el nombre para una teoría, en principio marginal, que hablaba de "invasión" y miedo, de "cambio" y pérdida, de "reemplazo" y lucha, en clave étnico-cultural (y no tanto tradicional) y que paulatinamente fue llenando redes sociales, medios de comunicación y estrados políticos de dimes y diretes, de alta tensión, sobre el impacto material y simbólica provocada de la transformación evidente provocada por dichos procesos en Europa.
Raspail y Camus, como era lógico, fueron inmediatamente condenados y silenciados en la sociedad de su tiempo. La idea de partida fue despreciada como silenciados en la sociedad de su tiempo. La idea de partida fue despreciada como mera paranoia conspirativa sin fundamento, y la teoría definitoria como simple visión xenófoba, eso sí, muy peligrosa. Aunque, pese a la demonización general, diferentes intelectuales y movimientos políticos fueron valorando algunas de las claves presentes en esta teoría de la Gran Sustitución, llegando a ser conside rada en algunos sectores del espectro político conservador (generalmente fuera del campo liberal) como verdadera profecía de un mundo en transformación.
Demonización que restringía esta teoría al ámbito ideológico de grupúsculos de extrema derecha de poco impacto (herederos de posiciones neofascistas o neonazis minoritarias), o al campo de conspiraciones alarmantes elaboradas por reacciones derechistas, dentro de una espiral radical de discurso de odio, noticias falsas y desinformación. Pero décadas después de su formulación, la misma se encuentra incardinada, de manera general o parcial, en los principales foros de debate sobre los emergentes discursos de control o rechazo de dichos procesos migratorios por sus consecuencias multiculturales; bien como supuesto referente en los modernos movimientos del nacionalismo soberanista/identitario, bien como ingrediente destacado en el fenómeno contemporáneo de la "batalla cultural".
Grandes muros y altas vallas, deportaciones inmediatas y "remigración" forzosa, revisión del derecho de asilo, y defensa a ultranza de lo propio, de esa identidad nacional bien de raigambre étnica bien cultural-valórica. Propuestas y lemas que ocupan espacio principal en programas y campañas de los nuevos movimientos nacionalistas en pleno siglo XXI, o que hacen cambiar, de forma inevitable, la óptica de algunos partidos del "consenso socialdemócrata" ante flujos migratorios de países lejanos sin control y sin asimilación.
No queda ni quedará otra. Se hace imprescindible hablar, y bien alto y claro, de esta idea sobre la Gran Sustitución demográfica en Occidente (de lo étnico a lo cultural), en sus dimensiones económico-sociales y político-ideológicas. Lo exigen muchas personas, lo necesitan las instituciones del Estado de de recho, y lo impulsa el renacer de las identidades nacionales fuertes. Esta idea po día ser una provocación, señalaba el escritor judío Philippe Karsenty (en su libro-entrevista con Renaud Camus: 2017, derniére chance avant le Grand Remplacement?), pero era, ante todo, una oportunidad para hablar de lo que había que hablar, de esos miedos cruciales muy presentes en sociedades en trascendental cambio ante la globalización, pese a que "algunos quieren censurar antes de pensar".
De Polonia a Hungría, en Alemania y Austria, de Meloni a Trump, en la Europa oriental y ya en la occidental, del nacionalismo soberano cada vez más orgulloso a "rojipardos" con cierto éxito, y bajo el tránsito de democracias liberales muy asustadas a democracias no tan liberales y cada vez más valoradas. Escenarios donde este fantasma, más allá de la idea satanizada y la teoría despreciada, se abre paso por el clamor de tantos ciudadanos desesperados en las redes, por el eco de una incorrección política que no siempre se puede censurar o cancelar en público, y por imágenes que incendian los discursos incluso en los parlamentos.
Ya no se pude ocultar el debate. Se suceden, a derecha e izquierda, discusiones sobre cómo gestionar o frenar los continuos procesos migratorios hacia el llamado "primer mundo", de intensidad creciente y desde lugares con los que se comparte muy poco, que ponen en cuestión los valores propios tradicionales (caso de Hungría) o modernos (caso de Holanda), y que tensan indicadores sobre cohesión interna, bienestar económico y futuro civilizatorio en un Occidente con demasiadas naciones envejecidas e improductivas. Porque ese fantasma ya aparece todos los días en la mente de las élites, cuando cierran cada noche los ojos para evitar afrontar el problema, recreando en su mente indeseables cam bios políticos en las urnas o posibles conflictos civiles.Aunque cuando los vuelven a abrir, esa idea que asusta se hace realidad, sin remedio, en términos de protesta ciudadana y de reacción identitaria que pone en solfa a los pactos progresistas de los que mandan.
Nombres musulmanes para los niños que nacen en ciudades europeas, equipos de futbol con mayoría de jóvenes de padres extranjeros, letreros en lengua árabe ante la realidad mayoritaria en diferentes barrios, restaurantes con comidas antes exóticas dominan calles del centro de las ciudades, aulas con muy pocos alumnos de origen nativo. Argumentos que los partidarios de esta teoría difunden en redes y en medios. Datos criminológicos que demuestran el aumento de agresiones y robos como consecuencia de la inmigración ilegal y masiva, datos sociológicos que revelan que las ayudas sociales favorecen la llegada de extranjeros de países pobres, datos demográficos que apuntan al descenso continuo de la población nacional y el crecimiento sostenido de la foránea (como revela el Instituto Nacional de Estadística en España). Números que corroboran, para los mismos partidarios, la realidad de esta tesis.
La necesidad intelectual y social obliga, por ello. Se tiene que abordar, historiográficamente, el estudio completo de esta teoría sobre la planificada "invasión migratoria" por parte del globalismo, como culminación de su proyecto transformador. Tanto en su polémica génesis intelectual como en sus conse cuencias sociales y políticas, de impacto presente e influencia futura. Lo demanda el mundo que nos rodea. Así, analizamos esta construcción en cinco grandes episodios otesis, exponiendo sus principales promotores, sus principios esenciales y sus evoluciones doctrinales, siempre en el seno de los debates, reales o posibles, sobre el control de la inmigración (de la selección por afinidades al repudio por incompatibilidades) y de sus mutaciones políticas, bajo las estrategias multiculturalistas que promueven este cambio sociodemográfico, o bajo la reacción identitaria (nativista o valórica) que la denuncia y la combate, denominada como nacionalismo populista por Fukuyama o como renacimiento patriótico por Scruton.
La Depredación de España es un largo proceso de más de cuatro décadas en el que los españoles hemos perdido nuestra soberanía económica e infinidad de derechos sociales. España es hoy, económicamente hablando, como un bote a la deriva que se dirige a la cascada de su destrucción.
Este libro es un descarnado relato sin censuras de cómo se ha tramado y desarrollado dicha Depredación por parte de sus principales actores: la clase política española, los Fondos Buitre y los Paraísos Fiscales. Un esfuerzo investigador del Doctor en Economía, Guillermo Rocafort, que le ha llevado varios años el desarrollar y compilar y que es recogido en este Libro, que está llamado a ser una referencia en la futura Reconstrucción económica de nuestra Nación.
Guillermo Rocafort no tiene etiquetas ni servidumbres políticas y sacude a un lado y a otro del espectro político, evidenciando que la corrupción político-económica en España es de carácter sistémico y transversal, y radica en lo más profundo de un Estado que, en vez de defender a su Pueblo, se ha convertido en el principal peligro y amenaza para su seguridad.
Debemos asumir que en las puertas del Congreso de los Diputados ya no hay feroces Leones que defiendan al Pueblo Español frente a sus enemigos, lo que hay son Buitres y Especuladores que nos están depredando de forma encubierta y silenciosa.
Pero por encima de todo, este Libro nos ofrece un Manual con infinidad de medidas y soluciones económicas para revertir este proceso y reconstruir económicamente nuestra Sociedad, con el objetivo de proyectarla sólidamente hacia el III Milenio, llamado a ser si nos liberamos de nuestros enemigos económicos, El Milenio Hispánico.
Los Fondos Buitre iniciaron hace una década el asalto definitivo a la economía española. En estos años transcurrido no se les ha ofrecido apenas resistencia. Mientras las principales naciones de nuestro entorno se esfuerzan en proteger sus tejidos productivos, la oligarquía financiera, política, mediática y jurídica en España les ha abierto las puertas de par en par para que depreden nuestro país. No sólo les han regalado miles y miles de viviendas sociales, negando los derechos a sus moradores, las personas más humildes de nuestra nación, sino que además su sola presencia supone una desestabilización completa de las bases de la economía y del empleo. Los abusos de los Fondos Buitre no conocen límite. Son galopantes y desenfrenados, llegando al extremo de que están recibiendo cientos de millones de euros en forma de subvenciones por parte de las propias administraciones públicas. Y nadie ha levantado su voz contra de este expolio en el parlamento español ni en ninguna otra institución tanto nacional como europea. El libro analiza los daños irreparables que causan en la economía, pero no se queda en eso. Su objetivo es buscar soluciones reparadoras, y es por ello que ofrece toda una batería de medidas para defenderse. Estamos ante el resultado de años de reflexión y de análisis sobre un fenómeno que ha pasado casi inadvertido por la opinión pública española porque es un expolio invisible, el peor de todos.
La élite de la UE ha perdido el control del discurso. Los europeos están alejándose en masa de las mentiras y los mitos del Pacto Verde.
La idea fundadora de la Unión Europea fue la de crear, a través de la prosperidad compartida, solidaridad y un sentido de destino compartido entre las naciones de Europa. Por eso se formaron tres comunidades: la económica, la del carbón y el acero, y la de la energía nuclear. Hasta alrededor del año 2000, en términos de crecimiento e innovación, la economía europea, año tras año, estaba a la par de la estadounidense.
De aquel gesto inicial –y bastante brillante– de “paz a través de la prosperidad”, literalmente no queda nada . A ninguno de los actuales dirigentes de la UE le importa el bienestar financiero de los europeos. El carbón es considerado el combustible del diablo y las élites europeas aborrecen la energía nuclear , que dicen preferir las ineficientes y erráticas turbinas eólicas. Desde el año 2000, la economía europea ha estado sumida en un estancamiento que se ha agravado desde 2008 y amenaza con alcanzar su punto álgido en los próximos años, terminando en la destrucción de Europa.
Pacto Verde
La UE es una red de instituciones con las que un estadounidense no estaría familiarizado, así que digamos simplemente que esta red está dominada por una institución: la Comisión Europea . Es una especie de "gobierno" europeo con el monopolio de las iniciativas legislativas . Nada se vota en la UE sin el asentimiento de la Comisión.
La Comisión no oculta que su prioridad absoluta es el Pacto Verde : convertir a Europa en una « sociedad neutra en carbono » de aquí a 2050. Esto significa lograr un equilibrio entre las emisiones de gases de efecto invernadero producidas y las absorbidas por los sumideros de carbono naturales o tecnológicos. Las principales estrategias de la UE para lograr este equilibrio incluyen la reducción de las emisiones mediante un aumento masivo del uso de fuentes de «energía renovable» como la solar, la eólica, la hidroeléctrica y la biomasa, la mejora de la eficiencia energética de los edificios, los vehículos y las industrias, y el avance hacia procesos industriales de bajas o nulas emisiones, en particular en el acero, el cemento y los productos químicos. También pretenden desarrollar tecnologías de captura y almacenamiento de carbono ( CAC ) para absorber y almacenar el CO2 procedente de fuentes de combustión o del aire. El dióxido de carbono capturado suele almacenarse en formaciones geológicas como yacimientos de gas natural agotados o antiguas minas de carbón.
En Europa, el lecho marino del Mar del Norte es un lugar ideal para el almacenamiento de carbono.
El problema es que estas tecnologías de captura y almacenamiento de CO2 son extremadamente caras . Imponerlas de la forma gigantesca que exige la neutralidad de carbono implica costes adicionales imposibles de digerir para cualquier economía desarrollada. Probablemente por eso estas fantásticas tecnologías de captura y almacenamiento de CO2 desempeñan un papel tan marginal en Europa. La verdad es que la reducción de las emisiones de CO2 en Europa se debe casi exclusivamente a que la industria se va de Europa. Ese es el pequeño secreto sucio del Pacto Verde: Europa está reduciendo sus emisiones de CO2 en la misma medida y en proporción a la destrucción de su industria.
Sin embargo, la industria destruida en Europa renace inmediatamente en otras partes del mundo: en Asia Oriental , Sudamérica y, por supuesto, en los Estados Unidos . Esto significa que las emisiones de CO2 destruidas en Europa reaparecen como por arte de magia en otro lugar, antes de que los productos de esa industria en particular sean reexportados a Europa. En la mayoría de los casos, dado que el transporte de cualquier cosa emite CO2, el balance de esta maniobra europea para reducir las emisiones globales de CO2 es negativo.
El motivo y la razón de ser del Pacto Verde es salvar el clima, que en los círculos europeos se escribe a menudo con C mayúscula: “clima”, lo que dice mucho sobre la religiosidad de todo el planteamiento. Para “ salvar el planeta ”, se nos dice, tenemos que reducir las emisiones de CO2.
La única forma tecnológica que conocemos hasta ahora para reducir las emisiones de CO2 es la energía nuclear. Sin embargo, las "élites" de la UE odian la energía nuclear : su verdadero objetivo no es mitigar el cambio climático y "salvar el planeta", sino forzar la salida del capitalismo y el retorno a la economía de subsistencia que siempre ha sido la ambición, el sueño y el horizonte de los ecologistas, mucho antes de que se hablara del calentamiento global. " El capitalismo está matando al planeta ", escribió The Guardian.
Libertad de interlocución
Si hay una realidad que los líderes cuyo poder se basa en mitos aborrecen, es la transparencia . Mientras que en 2020, el poder de los medios tradicionales estadounidenses todavía les permitía hacer creer a la gente que el portátil de Hunter Biden era una operación de desinformación rusa , en los últimos años, este poder se ha reducido a pedazos. El mismo cambio está ocurriendo en Europa, bajo la influencia no de las redes sociales europeas, porque no existen, sino de las estadounidenses, como X. La élite de la UE ha perdido el control de la narrativa . Los europeos se están alejando en masa de las mentiras y los mitos del Pacto Verde.
Esto es lo que la UE no puede tolerar. Al adoptar la Ley de Servicios Digitales (DSA), la UE quería dotarse de un instrumento con el que someter a las plataformas estadounidenses y se vio obligada a financiar hordas de censores para perseguir el contenido que no está de acuerdo con la Reina-Comisión Europea. La UE ha estado exigiendo una multa del 6% de los ingresos mundiales a las empresas de redes sociales, lo que inevitablemente acabaría con las plataformas.
Estos cazadores de censores sin rostro, que no rinden cuentas a nadie, deberían eliminar todo contenido que sea odioso , discriminatorio o transfóbico. Ninguno de estos términos vagos puede definirse con rigor. Dada la ausencia de definiciones precisas, los censores hacen lo que quieren . La arbitrariedad es total. En la práctica, estos censores suprimen masivamente los contenidos llamados " de derecha ", mientras que dejan intacta la abundante literatura antisemita, islamista y marxista.
Ese es, aparentemente, el quid de la cuestión. La izquierda europea , al igual que la izquierda estadounidense, muestra un antagonismo ilimitado contra todo lo que no piense, hable, sueñe, coma o trabaje como ella.
Al introducir leyes como la DSA, Europa se afirma como un actor importante en el campo de la censura , siguiendo el ejemplo de China, Irán, Rusia y los países islamistas, y contribuye a la descivilización del continente europeo. Al fin y al cabo, ¿no es la libertad la definición, la razón de ser y el único criterio distintivo de la civilización occidental?
Fronteras abiertas
No pasa una semana en Europa sin que un inmigrante ilegal , un recién llegado, un solicitante de asilo o un afgano que está aquí sin que nadie sepa en calidad de qué, atropellando deliberadamente a peatones, apuñalando a mujeres jóvenes o masacrando a bebés y niños pequeños en una cuna . Europa vive la peor crisis de anarquía migratoria desde las invasiones normandas e islámicas de la Alta Edad Media.
Esta anarquía no es una calamidad natural, sino el resultado de una serie de decisiones políticas compartidas entre la UE, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y los Estados miembros. La UE, en particular, al ser un mercado sin fronteras, ha creado y desarrollado un servicio de guardia de fronteras exteriores, FRONTEX . El problema es que, tal como está actualmente la legislación europea (UE + CEDH), estos guardias fronterizos proporcionan esencialmente un servicio de ferry gratuito entre África y Europa. La legislación europea les prohíbe expresamente rechazar a los inmigrantes ilegales cuando son interceptados. Tienen la obligación de llevarlos a la Unión Europea para que puedan ejercer todos sus " derechos ".
En Europa, incluso más que en los Estados Unidos, una vez que un inmigrante ilegal llega al país, en la abrumadora mayoría de los casos se queda: millones de ellos . Los europeos observan con asombro cómo sus orgullosas ciudades –París, Berlín, Bruselas, Roma, Londres– sufren metamorfosis demográficas en tiempo real, mientras multitudes llenas de odio marchan regularmente por sus calles gritando consignas antisemitas, “ muerte a los judíos ” y otras bendiciones tomadas de su amistosa cultura nativa.
¿Es posible salvar la UE?
Una razón para que exista la democracia es permitir un cambio pacífico de liderazgo y de políticas. En las últimas elecciones al Parlamento Europeo, los europeos votaron masivamente a la derecha, evidentemente como reacción y furia contra las políticas de la Comisión Europea bajo el liderazgo de Ursula von der Leyen . Lo que enfureció a los votantes fue el Pacto Verde , que hace que la energía sea inasequible, y el caos migratorio , ahora fuertemente teñido de islamismo y odio a los judíos.
¿Qué salió de esas elecciones?
¡Una nueva Comisión Von der Leyen! ¿Con un programa diferente? No, con un programa aún más radical, ecologista y censurador que la primera Comisión Von der Leyen. Es como si los estadounidenses hubieran votado en un 60% a los republicanos y el presidente elegido fuera un socialista.
¿Cómo puede ser esto, cuando Europa dice jurar por la "democracia"?
Parece que se debe a dos factores.
El primero: el grupo más numeroso del Parlamento Europeo es el Partido Popular Europeo ( PPE ), de centroderecha. Este grupo está dominado numéricamente por la CDU/CSU de Alemania, el partido de la ex canciller Angela Merkel. Su partido, sin embargo, está a la izquierda del Partido Demócrata estadounidense en la mayoría de los temas. Su apoyo al ecologismo más obtuso, y en particular al Pacto Verde, parece total. Por eso, a la hora de imponer un nuevo presidente de la Comisión Europea tras las elecciones de junio de 2024, la CDU/CSU eligió entre sus filas a alguien que mantiene fuertes convicciones ecologistas: Ursula von der Leyen.
El segundo factor, y el más importante, es que la UE es, en realidad, una democracia Potemkin. Parece una democracia, pero en realidad es una burocracia autoritaria . No hay elección por parte de los ciudadanos de un parlamento digno de ese nombre, no hay transparencia, no hay recursos y, al parecer, no hay forma de eliminar la organización o alguna parte de ella. Los ciudadanos europeos pueden votar como quieran, pero es una élite autoproclamada dentro de las instituciones europeas la que decide el futuro de Europa. Estas "élites" harán cualquier cosa para mantenerse a sí mismas y a su ideología en el poder . La semana pasada, el diario holandés De Telegraaf reveló que la primera Comisión Von der Leyen había financiado masivamente a ONG ambientalistas para presionar a los miembros del Parlamento Europeo -¡viva la separación de poderes!- y a los ciudadanos a favor del Pacto Verde.
Además, Qatar se ha infiltrado masivamente en el Parlamento Europeo, comprando parlamentarios para promover sus intereses y su visión islamista del mundo. No importa si la gente vota a izquierdas o a derechas:
Von der Leyen y su agenda ecologista de extrema izquierda siguen en el poder. ¿Se puede medir la sensación de alienación que deben sentir los europeos, obligados a financiar una burocracia corrupta que trabaja en contra de sus intereses?
En materia de inmigración, economía, libertad de expresión y democracia, la UE no es la solución a ningún problema. La UE es el problema.
«Ningún votante de este continente acudió a las urnas para abrir las puertas a millones de inmigrantes sin control»
Una de las cosas de las que quería hablar hoy es, por supuesto, de nuestros valores compartidos. Y, bueno, es genial estar de vuelta en Alemania. Como habéis escuchado antes, estuve aquí el año pasado como senador de Estados Unidos. Vi al Secretario de Asuntos Exteriores, David Lammy, y bromeé con él sobre que ambos, el año pasado, teníamos trabajos diferentes a los que tenemos ahora. Pero ahora es el momento de que todos nuestros países, de que todos nosotros, que hemos tenido la suerte de recibir el poder político de nuestros respectivos pueblos, lo usemos con sabiduría para mejorar sus vidas.
Y quiero decir que he tenido la suerte, durante mi estancia aquí, de pasar algo de tiempo fuera de los muros de esta conferencia en las últimas veinticuatro horas, y me ha impresionado mucho la hospitalidad de la gente, incluso, por supuesto, cuando aún se están recuperando del horrendo ataque de ayer. La primera vez que estuve en Múnich fue, de hecho, con mi esposa, que está aquí conmigo hoy, en un viaje personal. Siempre me ha encantado la ciudad de Múnich y siempre me ha encantado su gente.
JD Vance, vicepresidente de EEUU: «Ningún votante de Europa acudió a las urnas para abrir las puertas a millones de inmigrantes sin control»
Solo quiero decir que estamos profundamente conmovidos, y nuestros pensamientos y oraciones están con Múnich y con todas las personas afectadas por el mal que se ha infligido a esta hermosa comunidad. Estamos pensando en vosotros, rezamos por vosotros y, sin duda, estaremos apoyándoos en los días y semanas que vienen.
Nos reunimos en esta conferencia, por supuesto, para hablar de seguridad. Y normalmente nos referimos a amenazas a nuestra seguridad exterior. Veo aquí hoy a muchos grandes líderes militares. Pero, aunque la administración Trump está muy preocupada por la seguridad europea y cree que podemos llegar a un acuerdo razonable entre Rusia y Ucrania, también creemos que, en los próximos años, Europa debe dar un gran paso adelante para garantizar su propia defensa. Sin embargo, la amenaza que más me preocupa en lo que respecta a Europa no es Rusia, ni China, ni ningún otro actor externo. Lo que me preocupa es la amenaza interna. La retirada de Europa de algunos de sus valores más fundamentales: valores que comparte con Estados Unidos de América.
Me sorprendió que un excomisario europeo apareciera recientemente en televisión y pareciera encantado de que el Gobierno rumano hubiera anulado unas elecciones enteras. Advirtió que, si las cosas no salen según lo previsto, lo mismo podría suceder en Alemania.
Ahora bien, estas declaraciones despreocupadas resultan impactantes para los oídos estadounidenses. Durante años se nos ha dicho que todo lo que financiamos y apoyamos es en nombre de nuestros valores democráticos compartidos. Todo, desde nuestra política sobre Ucrania hasta la censura digital, se presenta como una defensa de la democracia. Pero cuando vemos a tribunales europeos anulando elecciones y a altos cargos amenazando con cancelar otras, deberíamos preguntarnos si realmente nos estamos exigiendo un estándar lo suficientemente alto. Y digo «nosotros» porque creo firmemente que estamos en el mismo equipo.
Debemos hacer más que hablar de valores democráticos. Debemos vivirlos. Ahora bien, dentro de la memoria de muchos de los que estáis en esta sala, la Guerra Fría posicionó a los defensores de la democracia contra fuerzas mucho más tiránicas en este continente. Y pensemos en el bando de esa lucha que censuraba a los disidentes, que cerraba iglesias, que anulaba elecciones. ¿Eran los buenos? Desde luego que no.
Y gracias a Dios, perdieron la Guerra Fría. La perdieron porque ni valoraban ni respetaban todas las extraordinarias bendiciones de la libertad: la libertad de sorprender, de cometer errores, de inventar, de construir. Al final, no se puede imponer la innovación o la creatividad, de la misma manera que no se puede obligar a la gente a pensar, sentir o creer en algo. Y creemos que esas cosas están, sin duda, conectadas. Lamentablemente, cuando miro a la Europa de hoy, a veces no está tan claro qué ha pasado con algunos de los ganadores de la Guerra Fría.
Miro a Bruselas, donde los comisarios de la Comisión Europea han advertido a los ciudadanos de que pretenden cerrar las redes sociales en tiempos de disturbios civiles, en cuanto detecten lo que ellos han juzgado como «contenido de odio». O a este mismo país, donde la policía ha llevado a cabo redadas contra ciudadanos sospechosos de publicar comentarios antifeministas en internet como parte de la lucha contra la «misoginia» en la red.
Miro a Suecia, donde hace dos semanas el Gobierno condenó a un activista cristiano por participar en quemas del Corán que acabaron con el asesinato de su amigo. Y como señaló escalofriantemente el juez en su caso, las leyes suecas que supuestamente protegen la libertad de expresión no conceden, de hecho, y cito, «carta blanca» para decir o hacer cualquier cosa sin correr el riesgo de ofender al grupo que sostiene esa creencia.
Y quizás lo más preocupante, miro a nuestros muy queridos amigos del Reino Unido, donde el retroceso en los derechos de conciencia ha puesto en el punto de mira las libertades básicas, especialmente de los británicos religiosos. Hace poco más de dos años, el Gobierno británico acusó a Adam Smith-Connor, un fisioterapeuta de 51 años y veterano del Ejército, de cometer el atroz crimen de estar de pie a 50 metros de una clínica de abortos y rezar en silencio durante tres minutos. No obstruyó a nadie, no interactuó con nadie, simplemente rezó en silencio por su cuenta. Cuando las fuerzas del orden británicas lo detectaron y le exigieron saber por qué rezaba, Adam respondió simplemente que lo hacía por su hijo no nacido.
Él y su exnovia habían abortado años atrás. Pero a los agentes no les conmovió su respuesta. Adam fue declarado culpable de infringir la nueva Ley de Zonas de Exclusión del Gobierno, que penaliza la oración silenciosa y otras acciones que puedan influir en la decisión de una persona dentro de un radio de 200 metros de una clínica de abortos. Fue condenado a pagar miles de libras en costas legales al Estado.
Ahora bien, ojalá pudiera decir que esto fue un caso aislado, un ejemplo disparatado de una ley mal redactada aplicada contra una sola persona. Pero no. En octubre pasado, hace solo unos meses, el Gobierno escocés comenzó a distribuir cartas a ciudadanos cuyas casas se encuentran dentro de las llamadas zonas de acceso seguro, advirtiéndoles de que incluso rezar en privado dentro de sus propios hogares podría suponer una violación de la ley. Naturalmente, el Gobierno instó a los lectores a denunciar a cualquier conciudadano sospechoso de cometer un delito de pensamiento en el Reino Unido y en toda Europa.
Me temo que la libertad de expresión está en retirada y, en aras del humor, amigos míos, pero también en aras de la verdad, admitiré que, a veces, las voces más fuertes a favor de la censura no han venido de Europa, sino de mi propio país, donde la administración anterior amenazó y presionó a las empresas de redes sociales para que censuraran la llamada desinformación. Desinformación como, por ejemplo, la idea de que el coronavirus probablemente se había filtrado de un laboratorio en China. Nuestro propio Gobierno alentó a empresas privadas a silenciar a personas que se atrevieron a decir lo que resultó ser una verdad evidente.
Así que vengo hoy aquí no solo con una observación, sino con una oferta. Y del mismo modo que la administración Biden parecía desesperada por silenciar a la gente por expresar su opinión, la administración Trump hará precisamente lo contrario, y espero que podamos trabajar juntos en ello.
En Washington, hay un nuevo sheriff en la ciudad. Y bajo el liderazgo de Donald Trump, podemos no estar de acuerdo con vuestras opiniones, pero lucharemos por defender vuestro derecho a expresarlas en la plaza pública. ¿Estáis de acuerdo o en desacuerdo? Ahora bien, hemos llegado a un punto en el que la situación ha empeorado tanto que, en diciembre pasado, Rumanía anuló directamente los resultados de unas elecciones presidenciales basándose en meras sospechas infundadas de una agencia de inteligencia y en la enorme presión de sus vecinos continentales. Hasta donde tengo entendido, el argumento fue que la desinformación rusa había contaminado las elecciones rumanas.
Pero les pediría a mis amigos europeos que tengan un poco de perspectiva. Se puede creer que está mal que Rusia compre anuncios en redes sociales para influir en vuestras elecciones. Nosotros ciertamente lo creemos. Incluso se puede condenarlo en el escenario mundial. Pero si vuestra democracia puede ser destruida con unos cientos de miles de dólares en publicidad digital de un país extranjero, entonces nunca fue muy fuerte desde el principio.
Ahora bien, la buena noticia es que creo que vuestras democracias son sustancialmente menos frágiles de lo que muchos aparentemente temen. Y realmente creo que permitir a nuestros ciudadanos expresarse libremente solo las hará aún más fuertes.
Lo que, por supuesto, nos devuelve a Múnich, donde los organizadores de esta misma conferencia han prohibido la participación de legisladores de partidos populistas tanto de izquierda como de derecha en estas conversaciones. Ahora bien, no tenemos por qué estar de acuerdo con todo, o con nada, de lo que digan estas personas. Pero cuando los líderes políticos representan a un electorado importante, es nuestra obligación al menos participar en un diálogo con ellos.
Para muchos de nosotros, al otro lado del Atlántico, cada vez parece más que los viejos intereses establecidos se esconden detrás de términos feos de la era soviética como «desinformación» y «fake news» simplemente porque no les gusta la idea de que alguien con un punto de vista alternativo pueda expresar una opinión diferente o, Dios no lo quiera, votar de manera distinta, o lo que es aún peor, ganar unas elecciones.
Esta es una conferencia de seguridad, y estoy seguro de que todos vinisteis aquí preparados para hablar de cómo exactamente planeáis aumentar el gasto en defensa en los próximos años conforme a algún nuevo objetivo. Y eso está muy bien, porque el presidente Trump ha dejado absolutamente claro que cree que nuestros amigos europeos deben desempeñar un papel más importante en el futuro de este continente. No queremos oír más hablar de “reparto de cargas”, sino que creemos que es una parte fundamental de estar en una alianza compartida que los europeos den un paso adelante mientras América se centra en otras zonas del mundo que están en grave peligro.
Pero permítanme también preguntarles: ¿cómo siquiera empezar a reflexionar sobre cuestiones presupuestarias si ni siquiera sabemos qué es lo que estamos defendiendo en primer lugar? Ya he escuchado mucho en mis conversaciones, y he tenido muchas, muchísimas grandes conversaciones con muchas personas reunidas aquí en esta sala. He oído mucho sobre de qué deben defenderse, y, por supuesto, eso es importante. Pero lo que me ha parecido un poco menos claro, y ciertamente creo que también a muchos ciudadanos de Europa, es exactamente qué es lo que están defendiendo.
¿Cuál es la visión positiva que da vida a este pacto de seguridad compartido que todos creemos que es tan importante?
Creo firmemente que no puede haber seguridad si se teme a las voces, las opiniones y la conciencia de su propio pueblo. Europa enfrenta muchos desafíos. Pero la crisis que este continente enfrenta en este momento, la crisis que creo que todos enfrentamos juntos, es una crisis creada por nosotros mismos. Si huyen de sus propios votantes, no hay nada que América pueda hacer por ustedes. Y, de hecho, tampoco hay nada que puedan hacer por el pueblo estadounidense que me eligió a mí y al presidente Trump. Necesitan mandatos democráticos para lograr algo valioso en los próximos años.
¿No hemos aprendido nada del hecho de que los mandatos débiles producen resultados inestables? Pero hay mucho valor que se puede lograr con el tipo de mandato democrático que, creo, vendrá de ser más receptivos a las voces de sus ciudadanos. Si desean disfrutar de economías competitivas, de energía asequible y de cadenas de suministro seguras, entonces necesitan mandatos para gobernar, porque tendrán que tomar decisiones difíciles para conseguir todo esto.
Y, por supuesto, lo sabemos muy bien. En Estados Unidos, no se puede ganar un mandato democrático censurando a los oponentes o metiéndolos en la cárcel. Ya sea el líder de la oposición, una humilde cristiana rezando en su propia casa o un periodista tratando de informar. Tampoco se puede obtener un mandato democrático ignorando a su propio electorado en cuestiones como quién puede formar parte de nuestra sociedad compartida.
Y de todos los desafíos urgentes que enfrentan las naciones representadas aquí, creo que ninguno es más apremiante que la migración masiva. Hoy, casi una de cada cinco personas que viven en este país vino del extranjero. Ese es, por supuesto, un récord histórico. Es una cifra similar, por cierto, en Estados Unidos, también un récord histórico. El número de inmigrantes que entraron a la UE desde países no pertenecientes a la UE se duplicó entre 2021 y 2022. Y, por supuesto, ha aumentado mucho más desde entonces.
Y todos conocemos la situación. No surgió de la nada. Es el resultado de una serie de decisiones conscientes tomadas por políticos de todo el continente, y de otros lugares del mundo, a lo largo de una década. Ayer vimos los horrores que estas decisiones han provocado en esta misma ciudad. Y, por supuesto, no puedo mencionarlo sin pensar en las terribles víctimas, que vieron arruinado un hermoso día de invierno en Múnich. Nuestros pensamientos y oraciones están con ellas y seguirán estándolo. Pero, ¿por qué sucedió esto en primer lugar?
Es una historia terrible, pero es una que hemos escuchado demasiadas veces en Europa, y, lamentablemente, también en Estados Unidos. Un solicitante de asilo, a menudo un joven de veintitantos años, ya conocido por la policía, embiste con un coche contra una multitud y destruye una comunidad. ¿Cuántas veces más debemos sufrir estos terribles golpes antes de cambiar de rumbo y llevar nuestra civilización compartida en una nueva dirección?
Ningún votante de este continente acudió a las urnas para abrir las puertas a millones de inmigrantes sin control. Pero, ¿saben por qué sí votaron? En Inglaterra, votaron por el Brexit. Y, estén de acuerdo o no, votaron por él. Y en cada vez más lugares de Europa, están votando por líderes políticos que prometen poner fin a la migración descontrolada. Ahora bien, resulta que estoy de acuerdo con muchas de estas preocupaciones, pero ustedes no tienen que estarlo.
Solo creo que a la gente le importan sus hogares. Les importan sus sueños. Les importa su seguridad y su capacidad de proveer para sí mismos y para sus hijos. Y son inteligentes. Creo que esta es una de las cosas más importantes que he aprendido en mi breve tiempo en la política. Contrario a lo que podrían escuchar en Davos, los ciudadanos de todas nuestras naciones no se ven a sí mismos como animales educados o como piezas intercambiables de una economía global. Y no es de extrañar que no quieran ser manipulados o ignorados implacablemente por sus líderes. Y es el deber de la democracia adjudicar estas grandes cuestiones en las urnas.
Creo que despreciar a la gente, ignorar sus preocupaciones o, peor aún, cerrar medios de comunicación, cerrar elecciones o excluir a las personas del proceso político no protege nada. De hecho, es la manera más segura de destruir la democracia. Hablar y expresar opiniones no es una interferencia electoral. Incluso cuando las personas expresan opiniones fuera de su propio país, e incluso cuando esas personas son muy influyentes. Y créanme, digo esto con humor: si la democracia estadounidense ha sobrevivido a diez años de los regaños de Greta Thunberg, ustedes pueden sobrevivir unos meses de Elon Musk.
Pero lo que ninguna democracia, ni la estadounidense, ni la alemana ni la europea, sobrevivirá es decirle a millones de votantes que sus pensamientos y preocupaciones, sus aspiraciones, sus súplicas por ayuda, no son válidas o no merecen ser consideradas. La democracia descansa sobre el principio sagrado de que la voz del pueblo importa. No hay espacio para cortafuegos. O se defiende el principio o no. Europeos, el pueblo tiene una voz. Los líderes europeos tienen una elección. Y mi firme convicción es que no tenemos por qué temer al futuro.
Acojan lo que su gente les dice, incluso cuando les sorprenda, incluso cuando no estén de acuerdo. Y si lo hacen, podrán enfrentar el futuro con certeza y confianza, sabiendo que la nación está detrás de cada uno de ustedes. Y esa, para mí, es la gran magia de la democracia. No está en estos edificios de piedra o en estos hermosos hoteles. Ni siquiera está en las grandes instituciones que construimos juntos como sociedad compartida.
Creer en la democracia es entender que cada uno de nuestros ciudadanos tiene sabiduría y tiene voz. Y si nos negamos a escuchar esa voz, incluso nuestras batallas más exitosas habrán asegurado muy poco.
Como dijo el Papa Juan Pablo II, en mi opinión, uno de los mayores defensores de la democracia en este continente o en cualquier otro: «No tengáis miedo».
No debemos tener miedo de nuestro pueblo, incluso cuando expresan opiniones que discrepan con el liderazgo.
Gracias a todos. Buena suerte a todos ustedes. Que Dios los bendiga.»
"En realidad, el hombre no tiene derechos en una democracia.
No los perdió en beneficio de la colectividad nacional ni de la nación, sino de una casta político-financiera de banqueros y agentes electorales.
La democracia masónica (globalista), a través de una traición sin igual, se disfraza de apóstol de la paz en esta tierra y al mismo tiempo proclama la guerra entre el hombre y Dios.
Sí, los enemigos también están dentro. Son los que piensan que Occidente ha sido una basura que ha contaminado al resto del planeta con su economía, religión, política y cultura. Son esos que sostienen que Europa fue una máquina de explotación que debe desaparecer como civilización para dar cabida a los supuestamente explotados. Son todos aquellos que aquí quieren cancelar museos, escritores y artistas porque les resultan «machistas» o «esclavistas». Son los que laminan los programas educativos y universitarios para ahormarlos a su ideología woke, o que censuran las opiniones y el lenguaje que no coincide con el dogma del progreso. Todos estos han enfermado a Europa. Son una plaga como lo fueron los totalitarios del siglo XX, aquellos fascistas, nazis y comunistas que castraron la libertad como identidad de Europa para construir una civilización nueva ajustada a su ideología excluyente e «indiscutible».
Creo en el Dios de Jesús y de María, el Dios de los bienaventurados, sencillos y sabios humildes como Abraham y Sara; Isaac y Rebeca; Jacob y Raquel. Y no el de los expertos racionalistas e ideologistas teólogos y entendidos escribas de todos los tiempos, El Mismo JesuCristo nunca los eligió ni como apostóles ni como discípulos. Ni antes ni ahora. Soy Venezolano, Maracucho/Maracaibero, Zuliano y Paraguanero, Falconiano; Soy Español, Gallego, Coruñés e Fillo da Morriña; HISPANOAMÉRICANO; exalumno marista y salesiano; amigo y hermano del mundo entero.
La Línea Editorial de este Rincón es la Veracidad y la Independencia imparcial.
¡¡¡ Que El Señor de La Comunicación, de La Amistad, de La Paz con Justicia, te bendiga, te guarde, te proteja, siempre... AMÉN !!! ________________________________
¡La Paz del Señor sea contigo!
¡Shalom aleijem!
¡As Salam ie aleikum!
бо да благословит вас
上帝保佑你
神はあなたに賛美する ईश्वर
Бог да те благослови
ETIQUETAS
BUSCAR EN ESTE BLOG
Código QR (Quick Response)
Seguidores
JesuCristo, Hosana en el Cielo, Bendito el que viene en Nombre Del Señor, Hosana en el Cielo
ORACIÓN A LA SEÑORA DE TODOS LOS PUEBLOS
Señor Jesucristo, Hijo del Padre, manda ahora Tu Espíritu sobre la tierra. Haz que el Espíritu Santo habite en el corazón de todos los pueblos, para que sean preservados de la corrupción, de las calamidades y de la guerra. Que la Madre de todos los Pueblos, La Santísima Virgen María, sea nuestra Abogada. Amén
ORACIÓN DE APOYO PARA LA CONSAGRACIÓN DE MIS REDES SOCIALES A SAN JOSÉ, TERROR DE LOS DEMONIOS
ORACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
ARMADURA DE DIOS
ESPADA DE DIOS
Líbranos de todos los males, Señor, y concédenos la paz en nuestros días, para que ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.
"EL CRISTIANO HA NACIDO PARA LUCHAR": PAPA LEÓN XIII
“Retirarse ante el enemigo o callar cuando por todas partes se levanta un incesante clamoreo para oprimir la verdad, es actitud propia o de hombres cobardes o de hombres inseguros de la verdad que profesan. "La cobardía y la duda son contrarias a la salvación del individuo y a la seguridad del Bien Común, y provechosas únicamente para los enemigos del cristianismo, porque la cobardía de los buenos fomenta la audacia de los malos. El cristiano ha nacido para la lucha”. S.S. León XIII, Papa
ORACIÓN Y MEDALLA DE SAN BENITO
EN GAB
EN FACEBOOK
(cuenta sancionada muchas veces y ahora, cancelada por la inquisición globalista)
EN TWITTER
(cuenta habilitada por la nueva dirección)
En YouTube
(cuenta suspendida por la inquisición globalista)
@Yankas (cuenta rehabilitada por la nueva dirección)
Consejos para criar a los hijos
-
*Un águila aconsejó a una mujer sobre la mejor forma de criar a los hijos.*
—¿Estás bien, madre humana? —preguntó el águila.
La mujer, sorprendida, la m...
A vueltas con la apertura del año judicial
-
El ceremonial con que se abre el año judicial no es sino la prolongación
del engaño en el que España permanece desde la fundación de la monarquía de
part...
12 de septiembre: Fiesta del Nombre de María
-
Significado del nombre de María y 2
Y el nombre de la virgen era María
Origen de la fiesta
Recorrido histórico de la celebración
Dulce Nombre de María
Orac...
Otros artículos
-
Mira Milosevich-El Mundo El órdago de Vladimir Putin El episodio de los
drones no es en sí mismo el órdago, pero sí lo es la invasión de Ucrania.
La apue...
AMÉRICA LATINA, EN MANOS DE TIRANOS Y MISERABLES
-
La verdad sobre lo que significó España para los países de América se abre
hoy camino gracias al esfuerzo de investigación y difusión de cientos de
intelec...
Boletín Info-RIES nº 1112
-
*Ya pueden disponer del último boletín de la **Red Iberoamericana de
Estudio de las Sectas (RIES), Info-RIES**. La suscripción es gratuita en *
http://www....
Un santo para toda circunstancia
-
Este es un reportaje que preparamos desde Londres sobre Santo Tomás Moro.
Una introducción para los que no lo conocen, y con sorpresas edificantes
para todos.
El legado del Papa Francisco
-
El pasado lunes de Pascua el mundo se despertaba conmocionado por la
noticia del fallecimiento de Francisco. El día anterior lo habíamos visto
en el balcón...
Analizando a los simpatizantes de Hamás
-
El sufrimiento de otros puede justificar la compasión, pero sólo si ese
sufrimiento es inmerecido. Alguien que es encarcelado injustamente puede
provocar t...
“Cumplimos La Mayoría De Edad”
-
18 años en diálisis pero con las mismas fuerzas de vivir. ¡Hola comunidad
de donavida! Hoy estoy aquí, frente a ustedes, compartiendo un capítulo
especia...
Un pequeño aviso personal
-
Queridos amigos y hermanos
Ustedes saben que este blog comenzó en diciembre de 2008. 12 años ya. Y
habrán advertido en los últimos tiempos cierta escasez...
La tertulia de las lechuzas
-
Willie Dixon decía que el blues sucede “cuando tu chica te ha abandonado,
estás solo en la estación de autobuses, sin un céntimo, y ha empezado a
llover”....
MALEVO, VA
-
*De hábitos vulgares, propio de los arrabales. (y 4 más)*
¡Queridos amigos!, el adjetivo que hoy os traemos a esta humilde página es
sin duda una interes...
"Hay una sola manera de degradar permanentemente a la humanidad, y esta es destruir el lenguaje". Nortthrop Frye
SOY LIBRESENTIPENSADOR: "En la razón soy librepensador y, en la Fe, soy libre por Cristo". Yanka
"La Verdad es útil a quien la escucha, pero desventajosa a quien la dice, porque lo hace odioso". Blaise Pascal
DERECHOS HUMANOS A LA LIBERTAD DE MANIFESTAR SU RELIGIÓN Y CREENCIA TANTO EN PÚBLICO Y X ENSEÑANZA
Vote para Celebrar la Fiesta de la Pascua todos en la misma fecha.
FIRMA PARA SINCRONIZAR FECHA DE SEMANA SANTA PARA TODOS LOS CRISTIANOS
LITURGIA DE LAS HORAS DEL DÍA
#YoTambiénSoyCristianoPerseguido
#NoEstánSolos: Ya estamos hartos de que los criminales exterminen a los cristianos solo por su fe. Ha llegado la hora de movilizarse y defenderlos. Basta de cobardía. Se valiente y osado frente a los asesinos y defiende con ardor tu fe y a los que son perseguidos por la horda. Coloca en tu página el símbolo creado por el movimiento en defensa de los cristianos perseguidos para la campaña mundial que se ha iniciado para que no nos olvidemos de todos aquellos que están siendo perseguidos y masacrados por ser cristianos. El símbolo del centro es la letra N del alfabeto árabe, con la que los yihadistas están marcando las casas de los Nazarenos, que es como ellos llaman a los cristianos. Juntos hagamos que no se olviden aquellos hermanos perseguidos en todo el mundo por amar a su Dios. #NoEstanSolos #PrayForthem #ن #YoTambiénSoyCristianoPerseguido #Iglesia #Kenya #Siria #Irak #Afganistán #ArabiaSaudí #Egipto #Irán #Libia #Nigeria #Pakistán #Somalia #Sudán #Yemen y otros...
EL SILENCIO CULPABLE
QUE LA LUZ BRILLE SOBRE TI, TIERRA FÉRTIL #SOSVENEZUELA
VENEZUELA UN PAÍS PARA QUERER Y PARA LUCHAR
“Nací y crecí en un lugar donde dicen ” Pa’lante es pa’llá”, donde se pide la bendición al entrar, al salir, al levantarte y al acostarte, donde se comen arepas, cachapas y espaguetti con diablito, donde se menea el whisky con el dedo, donde se respira alegría aún en las adversidades, donde se regalan sonrisas hasta a los extraños, donde todos somos panas, donde aguantamos chalequeos, donde se trata con cariño sincero, donde los hijos de tus amigos son tus sobrinos, donde la gente siempre es amable, donde los problemas se arreglan hablando y tomando una cervecita, donde no se le guarda rencor a nadie y donde nadie se molesta por tonterías, donde hasta de lo malo se saca un chiste, donde besamos y abrazamos muchísimo, donde expresamos con cariño nuestros sentimientos, donde hay hermosas playas, ríos, selvas, montañas, nieve, llanos, sabana y desierto, un país de gente bella, cariñosa y alegre donde se mezclaron armoniosamente las razas, donde el extranjero se siente en casa y donde siempre encontramos cualquier motivo para celebrar con los amigos. Nací y crecí en VENEZUELA, me siento orgulloso de ser venezolano y seguiré manteniendo mi espíritu venezolano en cualquier lugar del mundo”
¡NO TE RINDAS!
♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥ Si la angustia te seca, si la ansiedad te asfixia, si la tristeza te ahoga, si el pesimismo te ciega... llora, grita, comunícate, exterioriza tu dolor.... pero JAMÁS te rindas.
Levanta tu mirada, respira hondo... ¡LUCHA..! amig@...lucha ... PORQUE Sí hay salida. Sí hay sentido. Sí hay ESPERANZA. Levanta tus manos y pide ayuda.
No te des por vencid@...y poco a poco verás La Luz. NO te rindas amig@, lucha. NO ESTÁS SOL@.
PORQUE VERÁS QUE SÍ VALIÓ LA PENA... ♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥♥
LA FUERZA INVENCIBLE DE LA FE
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
"Ya veis que no soy un pesimista, ni un desencantado, ni un vencido, ni un amargado por derrota alguna. A mí no me ha derrotado nadie, y aunque así hubiera sido, la derrota sólo habría conseguido hacerme más fuerte, más optimista, más idealista, porque los únicos derrotados en este mundo son los que no creen en nada, los que no conciben un ideal, los que no ven más camino que el de su casa o su negocio, y se desesperan y reniegan de sí mismos, de su patria y de su Dios, si lo tienen, cada vez que le sale mal algún cálculo financiero o político de la matemática de su egoísmo.
¡Trabajo va a tener el enemigo para desalojarme a mi del campo de batalla! El territorio de mi estrategia es infinito, y puedo fatigar, desconcertar, desarmar y doblegar al adversario, obligándolo a recorrer por toda la tierra distancias inmensurables, a combatir sin comer, ni beber, ni tomar aliento, la vida entera; y cuando se acabe la tierra, a cabalgar por los aires sobre corceles alados, si quiere perseguirme por los campos de la imaginación y del ensueño. Y después, el enemigo no podrá renovar su gente, por la fuerza o por el interés., que no resisten mucho tiempo, y entonces, o se queda solo, o se pasa al amor, que es mi conquista, y se rinde con armas y bagajes a mi ejército invisible e invencible...."
(Fragmento de una página del discurso de Joaquín V. González "La universidad y alma argentina" 1918). ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
COMBATE Y DENUNCIA A LOS PEDÓFILOS (PEDERASTAS)
SEÑOR, TE PEDIMOS QUE PROTEJAS A L@S NIÑ@S, TE LO PEDIMOS EN EL NOMBRE DE JESÚS. AMÉN. ¡Ay de aquel que escandalice a uno de estos pequeñitos! Mejor le fuera que le ataran al cuello una piedra de molino y lo arrojaran al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos....... Lc 17,1-2 -- ÚNETE Y DENUNCIA --
SI LOS MEDIOS CALLAN, EL PUEBLO GRITA...
PARROQUIA VIRTUAL (VIRTUAL CHURCH) EN FACEBOOK
FORO DE CRISTIAN@S CATÓLIC@S LAIC@S SEGLARES EN FACEBOOK
TELÉFONO DE LA ESPERANZA 902 500 002
Cuando existe la esperanza, todos los problemas son relativos
EL SENTIDO COMÚN ES IMPRESCINDIBLE PARA EL BIEN COMÚN Y PARTICULAR
SOMOS ANTI-OBSOLESCENCIA: NUESTRA CALIDAD TIENE VALOR
OBSOLESCENCIA ES LA planificación o programación del fin de la vida útil de un producto o servicio de modo que este se torne obsoleto, no funcional, inútil o inservible tras un período de tiempo calculado de antemano, por el fabricante o empresa de servicios, durante la fase de diseño de dicho producto o servicio, nos conduce al CONSUMISMO exacerbado, por culpa de algo evitable, destruimos recursos, planeta y dinero por algo que podríamos tener durante mucho tiempo.