¿Es pecado el secesionismo?
Esto es lo que dice la Doctrina Social de la Iglesia
Algunos cristianos se escandalizan de que haya "hermanos" en la fe catalanes que van a misa y que, a la vez, están a favor de la independencia y del referéndum ilegal.
¿Es moralmente rechazable el nacionalismo? ¿vulnera la independencia catalana la justicia, el bien común y la solidaridad?
El secesionismo divide no sólo a los catalanes, sino también a los católicos. ¿Es moralmente lícito?
Porque, por un lado, tenemos el perturbador legado dejado por los nacionalismos en los dos últimos siglos en Europa. Y que se ha traducido en guerras como la de Yugoslavia, o incluso en la II Guerra Mundial, ya que el régimen hitleriano era una forma exacerbada de nacionalismo.
O el pésimo ejemplo del nacionalismo vasco, que ha degenerado en el gangsterismo de ETA, manchando de sangre (la de los 800 muertos de último medio siglo) a sus cómplices, los nacionalistas moderados (como PNV o Eusko Alkartasuna).
Pero, por otro lado, tenemos a los obispos catalanes, sucesores de los apóstoles, elegidos por el Papa, que se han pronunciado abiertamente por el derecho de autodeterminación de Cataluña (como el obispo de Solsona, monseñor Xavier Novell).
O que han pedido oraciones ante el referéndum del 1 de octubre, o que han reiterado “que sean escuchadas las legítimas aspiraciones del pueblo catalán”. También tenemos a numerosos fieles catalanes que, de buena fe, son partidarios de la independencia.
¿En qué quedamos? La Iglesia condena claramente el nacionalismo excluyente o agresivo, como condenó el marxismo o el socialismo. Y así lo dijo Juan Pablo II en 2001. Y su antecesor, Ratzinger, siendo aún cardenal explicó en el ensayo, ¿Por qué pertenezco en la Iglesia?, que “en medio de un mundo que tiende a la unidad” la Iglesia corre el peligro de dispersarse en “resentimientos nacionalistas, en la exaltación de lo propio y en la denigración de lo ajeno”.
¿Significa eso, que los partidarios de la secesión catalana, están moralmente equivocados? ¿Se puede ser buen católico y a la vez nacionalista o independentista?
Máxime en zonas como el País Vasco y Cataluña donde la fe y el sentimiento nacionalista han ido históricamente de la mano. Si bien es cierto, que la secularización del último medio siglo se ha traducido en un descenso de la práctica religiosa o de las vocaciones en esas dos comunidades autónomas.Manifestación independentista.
¿Qué es lo que dice la Iglesia al respecto?
Lo primero que debe quedar claro es que abordar esta cuestión “referida a la posibilidad de su calificación como pecado en el contexto de la moral personal supone un paso último respecto de una previa y necesaria clarificación en el plano de la moral social general” señala a Actuall, José Francisco Serrano Oceja, periodista, exdecano de Comunicación de la Universidad San Pablo CEU y autor del libro La Iglesia frente al terrorismo de ETA.
Y esa clarificación viene de la mano del “criterio de la Doctrina social de la Iglesia, repetido por los obispos españoles, ante la cuestión de la autodeterminación, del secesionismo mediante un acto de autodeterminación en este momento de España”.
Obispos españoles (2002): “No se encuentran razones actuales que justifiquen la renuncia a los bienes y derechos implícitos al hecho de la multisecular unidad cultural y política de España”
La Doctrina Social de la Iglesia es un conjunto de normas y principios referentes a la realidad social, política y económica de la humanidad basados en el Evangelio y en el magisterio.
Sobre la cuestión del secesionismo ya se pronunciaron en concreto los obispos españoles en 2002 recuerda Serrano Oceja. (Se trata de la Instrucción Pastoral Valoración moral del terrorismo en España, de sus causas y de sus consecuencias):
Expresaron entonces que “no se encuentran razones actuales que justifiquen la renuncia a los bienes y derechos implícitos al hecho de la multisecular unidad cultural y política de España, en su pluralidad y diversidad. La unidad cultural y política de la nación española, siguen afirmando los obispos, es considerada como un efecto importante del ‘bien común de una sociedad pluricentenaria”.
En esa declaración -referida a España- aparecen algunos de los criterios para valorar hasta qué punto son rechazables los independentismos, como por ejemplo la unidad de la nación o el bien común.
Pero hay otras pautas que pueden servir de fundamento: la dignidad de la persona, el bien común, la solidaridad, la justicia social y el destino universal de los bienes.
¿Dónde quedan los derechos de los demás habitantes?
La dignidad de la persona exige que los derechos inherentes a cada uno como ser humano y como hijo de Dios sean inviolables. Desear la independencia de un territorio o región no tiene que ser malo ni estar terminantemente prohibido para un católico. En la Historia tenemos diversos ejemplos.
Ahora bien, que algo no sea malo en general no excluye que lo sea en un hecho concreto. Dependerá de cada caso.
Si La secesión supone violar el principio jurídico vigente a costa de los derechos de los demás no es acorde con la Doctrina Social de la Iglesia
Si la secesión supone violar el principio jurídico vigente a costa de los derechos de los demás habitantes: como podría ocurrir en el caso de España con Cataluña y País Vasco, no sería acorde con la Doctrina Social de la Iglesia.
Porque esta violación unilateral de los derechos individuales y comunitarios conlleva el riesgo de que se den graves problemas de convivencia, bien sea tanto a nivel político como social.
¿Dónde queda el bien común?
Por bien común se entiende el conjunto de condiciones y circunstancias que hacen posible el desarrollo pleno de los miembros de una sociedad. En este caso, la decisión de independizarse sería válida si favorece o permite el bien común de los afectados, es decir, de toda España. No parece que este sea precisamente el caso.
La secesión rompe las condiciones previas que sí permitían ese desarrollo común, y que tuvieron su plasmación política en la Constitución que nos dimos todos los españoles en 1978. La secesión de Cataluña violaría este principio.
Benedicto XVI recordó durante su pontificado que “el bien común de la sociedad es uno de los innegociables para todo católico”.
Y en una instrucción pastoral de 2006, la Conferencia Episcopal advertía que “las propuestas nacionalistas deben ser justificadas con referencia al bien común de toda la población directa o indirectamente afectada”.
No se trata solo del bien de los 7’5 millones de catalanes sino del bien común del conjunto de los españoles (46 millones)
Es decir, en este caso, no se trata solo del bien común de los 7’5 millones de catalanes sino de bien común de los 46 millones de españoles.
Y añadían los obispos: “Si la coexistencia cultural y política, largamente prolongada, ha producido un entramado de múltiples relaciones familiares, profesionales, intelectuales, económicas, religiosas y políticas de todo género, ¿qué razones actuales hay que justifiquen la ruptura de estos vínculos? (…) ¿Sería justo reducir o suprimir estos bienes y derechos sin que pudiéramos opinar y expresarnos todos los afectados?”.
¿Dónde queda la solidaridad?
Por solidaridad se entiende la colaboración y la ayuda al prójimo. Supone, según la Doctrina Social de la Iglesia la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común;es decir, por el bien de todos y cada uno, para que todos seamos verdaderamente responsables de todos.
A eso se refería Juan Pablo II: “es preciso superar decididamente las tendencias corporativas y los peligros del separatismo con una actitud honrada de amor al bien de la propia nación y con comportamientos de solidaridad renovada”.
Y explicaba: “esta solidaridad debe mostrarse de abajo a arriba, de lo pequeño a lo grande: “[la solidaridad] más bien, pasa a través de las comunidades en que el hombre vive –familia, comunidad local y regional, la nación, el continente, la humanidad-“.
Cataluña es una de las regiones más avanzadas de España gracias a la solidaridad del resto de españoles
En el caso catalán habitualmente se esgrime como argumento que ‘España nos roba’, cuando, los casos de corrupción de determinados gobernantes (caso Pujol) demuestra que son otros quienes han robado a los catalanes.
Los secesionistas verían la solidaridad intraterritorial en España como algo negativo ya que, según ellos esgrimen, lo que harían sería mantener a regiones menos trabajadoras que se aprovechan del sudor de los catalanes, como a veces han llegado a decir algunos políticos nacionalistas catalanes.
De lo que se suelen olvidar es que Cataluña es una de las regiones más avanzadas de España por la solidaridad del resto de españoles quienes, a través de sus impuestos vía financiación autonómica, también han contribuido a hacer de Cataluña lo que es hoy. La reciprocidad solidaria es violada por el secesionismo.Los Reyes Católicos reciben a Colón en Barcelona.
¿Dónde queda la verdad sobre la Historia de España?
Hay, en fin, una premisa básica que los nacionalismos niegan: la verdad histórica, sustituir los hechos por la manipulación a fin de justificar sus reivindicaciones. Y esa falsificación tiene consecuencias directas sobre el bien común y la solidaridad.
Soley: “Construir una reivindicación política sobre la mentira, ya sea esta histórica, negando la convivencia de siglos, ya sea esta de carácter económico (…) es a todas luces inmoral”
Jorge Soley, especialista en Doctrina de la Iglesia y colaborador de Actuall, incidía en ello:
“El mismo Magisterio de la Iglesia nos recuerda reiteradamente que existe un criterio básico de moralidad, que es la verdad.
Construir una reivindicación política sobre la mentira, ya sea esta histórica, negando la convivencia de siglos, ya sea esta de carácter económico, manipulando datos y “balanzas” y apelando al egoísmo, como estamos viendo día sí, día también, en las argumentaciones de quienes promueven la independencia de Cataluña, es a todas luces inmoral”.
Basta repasar los libros de texto y material de apoyo que se han enseñado en las ‘ikastolas’ catalanas durante los casi 40 años que lleva funcionando como Comunidad Autónoma, para comprobar como se ha manipulado la Historia, con mentiras y falsedades, haciendo primar la ideología nacionalista sobre el rigor científico.
Máxime cuando España es una de las naciones más antiguas de Europa (no como Alemania o Italia que tienen apenas siglo y medio): unificada desde los Reyes Católicos, hace quinientos años. Y posee un sustrato cultural, económico y social; una empresa colectiva de siglos, con una proyección destacada en el resto del mundo -a través del Descubrimiento de América-.
Todo ello conforma un legado, un bien común transmitido de generación en generación, del que todos los españoles participan
Un legado y una unidad perfectamente compatibles con la identidad cultural de las distintas comunidades a través del Estado de las autonomías, diseñado en la Transición.
Sin embargo, los secesionistas opinan que es el Estado español quien interviene en las Comunidades Autónomas ‘homogeneizando’ culturalmente y eliminando las diferencias históricas culturales entre territorios.
Cuando es exactamente al revés: los nacionalismos convertidos en totalitarismos son los que están arrasando con toda reminiscencia cultural genérica de la Nación para imponer una visión partidista, sectaria y artificial de la cultura ‘autóctona’.
Casos como el arrinconamiento sistemático del español en las escuelas o las multas a los establecimientos que no rotulen sus carteles en ambos idiomas (como mínimo) son un ejemplo de ese nacionalismo excluyente y manipulador, al que se refería Pablo VI cuando en un mensaje para la Jornada Mundial de la Paz (1976) decía:
“Renace con el sentido nacional, legítima y deseable expresión de la polivalente comunión de un pueblo, el nacionalismo que al acentuar dicha expresión hasta formas de gobierno colectivo y de antagonismo exlusivista, hace renacer en la conciencia gérmenes peligrosos y hasta formidables de rivalidad y de luchas muy probables”.
El gran peligro de los nacionalismos es convertir a la Nación en un bien absoluto, al que se supedita todo lo demás, en una suerte de idolatría. Así lo expresaba Juan Pablo II en su libro Memoria e identidad: “se debe evitar absolutamente un peligro: que la función insustituible de la nación degenere en nacionalismo”.
Jorge Soley advierte del “peligro, nada teórico sino bien real” del que siempre han alertado los Papa: “de que los católicos, intoxicados de nacionalismo, fueran abandonando su fe para sustituirla por una nueva idolatría, la del culto a la Nación”.
Alejandro Navas: “Absolutizar y erigir la patria como valor supremo es idolatría”.
Es importante distinguir, por tanto, entre el recto amor a la patria y la ideología nacionalista. La primera es una virtud cristiana, extensión del Cuarto Mandamiento: Honrarás a tu padre y a tu madre –“la patria es verdaderamente una madre para cada uno”- llega a decir el papa Wojtyla-.
En tanto que el nacionalismo es “una ideología desordenada -subraya Soley- que absolutiza una realidad y la idolatra, acabando por destruir aquello a lo que pretende dar culto”.
Como escribe Alejandro Navas, profesor de Sociología de la Universidad de Navarra en un reciente articulo publicado en El Mercurio de Chile: “absolutizar y erigir la patria como valor supremo es idolatría”. Y añade “el nacionalismo que se construye sobre la dicotomía nosotros/ellos tiende con frecuencia a ser excluyente y por eso moralmente discutible”.
¿Dónde queda la Constitución?
La Constitución española de 1978, en la que quedó definido y aceptado por todos los españoles el diseño de Estado, convertía a España de facto en lo más parecido a un Estado federal, con amplias atribuciones para autonomías como la catalana.
Sin embargo, el secesionismo argumenta que la Constitución está caducada y que ha de modificarse, sin especificar si es una modificación para que se le permita la independencia o para lograr un mayor grado de autonomía.
La modificación constitucional concierne a toda España y, de haber referéndum, éste debe ser nacional
Con la Doctrina Social de la Iglesia en la mano, la modificación constitucional correría por parte de toda España y, de haber referéndum, éste debe ser nacional.
Eso sería lo acorde con los criterios de justicia, bien común y solidaridad.
Lo subrayaron los obispos en la Instrucción Pastoral (apartado 35), “la Constitución de 1978 no es perfecta […] Se trata, por tanto, de una norma modificable, pero todo proceso de cambio debe hacerse según lo previsto en el ordenamiento jurídico”.
Y dejaron bien claro:
“Cuando las condiciones señaladas no se respetan [orden legal vigente], el nacionalismo degenera en una ideología y un proyecto político excluyente, incapaz de reconocer y proteger los derechos de los ciudadanos, tentado de las aspiraciones totalitarias que afectan a cualquier opción política que absolutiza sus propios objetivos”.
Por todo ello, cabe concluir que existen reparos morales a la secesión. “las pretensiones nacionalistas independentistas no están moralmente justificadas en el caso de España”, subraya José Francisco Oceja.
Y cita al papa Wojtyla: “Lo dicen con las mismas palabras que Juan Pablo II empleó en el caso de Italia en 1994. No es moralmente aceptable la secesión por medio de la autodeterminación, que “implicaría la negación unilateral de la soberanía de España”.
Queda para la conciencia de cada uno valorar los posibles daños en la convivencia y las posibles injusticias que puede acarrear un proceso de esa naturaleza en un país como España.
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No es ni cristiano, ni evangélico ni políticamente democrático el delito de sedición, el delito de rebelión, ni mucho menos el estúpido derecho de decisión.
"LA PATRIA NO SE HACE, LA DEMOCRACIA, SÍ.
¿Derecho a Decidir?
Sin Poder de Decidir.
Una Nación es algo dado, que no depende de la voluntad.
Igual que no podemos decidir quién es nuestro padre".
Antonio García-Trevijano"
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"No hablen del Pueblo de Dios (que es el que la Iglesia nos confió), sino sólo del pueblo de Cataluña (el medio pueblo de Cataluña que tiene el poder y por el que parecen apostar) elevándolo así a categoría teológica; me duele que no se nombre en ningún momento ni a Cristo ni a su Iglesia y se prescinda del anticristianismo radical de ese "pueblo de Cataluña" que ha profanado ya los símbolos más sagrados de nuestra fe.
¿Debemos entonces aceptar que se abra el camino a todos los sacerdotes, religiosos y religiosas de sus diócesis para que se pongan al servicio incondicional del nuevo Estado inmoral y tiránico que se quiere refrendar contra la mitad del pueblo catalán y contra el resto de España?.
La realidad nacional de Cataluña no es un concepto pastoral, sino políticamente un "DELITO DE SEDICIÓN Y DE REBELIÓN" y que hayan legitimado las aspiraciones de menos de la mitad de los catalanes. Califica de "elucubración hegeliana" el "pueblo catalán" al que se refieren los obispos y cuestiona la receta del diálogo: "Insisten en que se ha de dialogar con ellos. ¿Sobre qué? ¿Sobre el calendario de imposición de la corrupción moral?". Sacerdote Custodio Ballester, titular de la parroquia de la Inmaculada en el barrio de Sanfeliu de Hospitalet de Llobregat
VER+:
Tras décadas de nacionalismo, en Cataluña sólo una de cada cinco bodas es religiosa y poco más del 20% de los alumnos cursa Religión Católica. Por su parte, el País Vasco se ha quedado apenas sin vocaciones, cuando antaño era cuna de misioneros y santos.
Perplejidad y tristeza, sí. Porque ustedes, señores Obispos, se han posicionado públicamente a través de su Nota afirmando la realidad nacional de Cataluña, concepto no pastoral sino político, no fermento de unidad, sino de discordia.
Golpe secesionista
Apelan a secundar el referéndum ilegal en pro de la «autodeterminación» de Cataluña como «nación»
1. Mn. Jaume Abril Figueras, arquebisbat de Barcelona
2. P. Xavier Alegre Santamaría, jesuïta
3. Mn. Emilià Almodóvar i Molina, arquebisbat de Barcelona
4. Mn. Valentí Alonso i Roig, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
5. Mn. Ramon Alventosa i Montfulleda, bisbat de Girona
6. Mn. Miquel Armengol i Barniol, arquebisbat de Barcelona
7. Mn. Xavier Armengol i Siscases, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
8. Mn. Pere Artigas i Reverter, bisbat de Girona
9. Mn. Joan Aurich i Casals, bisbat de Vic
10. Mn. Xavier Aymerich i Miñarro, bisbat de Sant Feliu
11. Mn. Pere-Lluís Aymeric i Armengol, bisbat de Girona
12. Mn. Joan Baburés i Noguer, bisbat de Girona
13. Mn. José Baena i Iniesta, bisbat de Terrassa
14. P . Manel Bagunyà i Valls, escolapi
15. Mn. Ramon Balagué i Bajona, bisbat d'Urgell
16. P. Josep M. Balcell i Xuriach, escolapi
17. Mn. Jaume Ballarà i Alsina, bisbat de Solsona
18. Mn. Joan Zapatero i Ballesteros, arquebisbat de Barcelona
19. Mn . Joan Maria Banús i Banús, arquebisbat de Tarragona
20. P. Josep Baquer i Sistach, jesuïta
21. Mn. Miquel Barbarà i Anglès, arquebisbat de Tarragona
22. Mn. Josep Barcons i Muntada, bisbat de Girona
23. Mn. Leandre Bassó i Ubach, arquebisbat de Barcelona
24. Mn. Xavier Batiste i Mercadé, bisbat de Lleida
25. Mn. Ramon Batlle i Tomàs, arquebisbat de Barcelona
26. Mn. Amado Berenguer i Ubach, bisbat de Vic
27. Mn. Blai Blanquer i Cutrina, bisbat de Terrassa
28. Mn. Ramon Blas i Batet, arquebisbat de Tarragona
29. P. Jaume Boada i Rafí, dominic
30. Mn. Josep Bofarull i Veciana, arquebisbat de Tarragona
31. Mn. Lluís Bonet i Armengol, arquebisbat de Barcelona
32. Mn. Antoni Boqueras i Bailina, bisbat de Vic
33. P. Gaspar Borda i Bori, carmelita
34. Mn. Manel Borges i Anguera, arquebisbat de Tarragona
35. P. Pere Borràs i Duran, jesuïta
36. P. Lluís Borràs i Goixart, franciscà
37. P. Jesús Bosom i Isern, escolapi
38. P. Joan Botam i Casals, caputxí
39. Mn. Martirià Brugada i Clotas, bisbat de Girona
40. Mn. Joan Brulles i Cañellas, arquebisbat de Tarragona
41. Mn. Ramon Bufí i Puigorio, bisbat de Vic
42. Mn. Ramon Bufí, bisbat de Vic
43. Mn. Christian Burillo i Henric, bisbat de Perpinyà-Elna
44. Mn. Cinto Busquet i Paredes, focolar
45. Mn. Joan Cabot i Barbany, arquebisbat de Barcelona
46. Mn. Ricard Cabré i Roigé, arquebisbat de Tarragona
47. Mn. Josep Maria Calderó i Villanueva, arquebisbat de Tarragona
48. Mn. Josep M. Calderó i Villanueva, arquebisbat de Tarragona
49. Mn. Jesús Calm i Masó, bisbat de Girona
50. P. Jaume Calvera i Pi, combonià
51. Mn. Tomàs Calvo i Talaverano, bisbat de Solsona
52. Mn. Joan Camps i Tomàs, bisbat de Solsona
53. Mn. Amador Canaldas i Salvadó, arquebisbat de Tarragona
54. Mn. Joan Cañas i Coch, arquebisbat de Tarragona
55. P. Josep Maria Canet i Capeta, escolapi
56. P. Bru Cañigueral i Colls, claretià
57. Mn. Climent Capdevila i Riu, bisbat de Solsona
58. Mn. Armand Carbonell i Bergès, arquebisbat de Tarragona
59. P. Joan Carrera, jesuïta
60. Mn. Joan Carreres i Péra, bisbat de Girona
61. P. Francesc Carreró i Vidal, escolapi
62. Mn. Jordi Carreter i Cambra, arquebisbat de Barcelona
63. Mn. Joan Casals i Cubinsà, bisbat de Solsona
64. Mn. Antoni Casas i Miguel, arquebisbat de Barcelona
65. Mn. Joan Josep Castaño i Santos, bisbat de Sant Feliu
66. P. Jordi Castanyer i Bachs, monjo de Montserrat
67. Mn. Jordi Castellet i Sala, bisbat de Vic
68. Mn. Miquel-Lluís Castillejo i Brull, arquebisbat de Tarragona
69. Mn. Josep Catà i Mitjans, arquebisbat de Barcelona
70. Mn. Carles Catasús i Pallerola, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
71. Mn. Joaquim Ciuró i Ribas, bisbat de Vic
72. Mn. Joaquim Claver i Caselles, Arquebisbat de Tarragona
73. Mn. Jordi Clot i Puig, bisbat de Lleida
74. Mn. Pere Codina i Mas, claretià
75. P. Joan Codina i Giol, salesià
76. P. Jaume Codinachs i Fabré, franciscà
77. Mn. Santiago Collell i Aguirre, bisbat de Terrassa
78. Mn. Josep Colomer i Puig, bisbat de Girona
79. Mn. Gaspar Comellas i Lladó, bibat de Solsona
80. Mn. Estanislau Corrons i Graells, bisbat de Vic
81. P. Josep Costa i Planagumà, franciscà
82. Mn. Joan Cuadrench i Aragonès, arquebisbat de Barcelona
83. Mn. Miquel Cubero i Balboa, arquebisbat de Barcelona
84. Mn. Ramon Cusió i Ferràs, arquebisbat de Barcelona
85. Mn. Jordi Cussó i Porredon, bisbat de Sant Feliu
86. Mn. Pere Dalmau i Vidal, arquebisbat de Barcelona
87. P. Bernabé Dalmau, monjo de Montserrat
88. Mn. Alexandre Damians i Belart, arquebisbat de Tarragona
89. Mn. Rossend Darnés i Bosch, bisbat de Girona
90. Mn. Gaietà de Casacuberta i Franco, arquebisbat de Barcelona
91. P. Ramon Dieste i Campo, salesià
92. Mn. Pere Domènech i Feixas, bisbat de Girona
93. Mn. Pere Domènech i Feixas, bisbat de Girona
94. Mn. Josep Maria Domingo i Ferrerons, bisbat de Sant Feliu
95. Mn. Ramon Donada i Madirolas, bisbat de Vic
96. P. Jacint Duran i Boada, caputxí
97. Mn. Miquel Elhombre i Trallero, arquebisbat de Barcelona
98. Mn. Josep Esplugas i Capdet, bisbat de Terrassa
99. Mn. Frederic Esteve i Cañameras, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
100. Mn. Jordi Fabregas i Olivan, bisbat de Terrassa
101. Mn. Jordi Fàbregas i Oliva, bisbat de Terrassa
102. Mn. Ramon Fabregat i Mata, bisbat de Lleida
103. Mn. Josep Maria Fabró i Gibert, bisbat de Sant Feliu
104. Mn. Marian Federico i Ribalta, arquebisbat de Barcelona
105. P. Isidre Ferrete i Deop, jesuïta
106. Mn. Pere Fibla i Palazon, arquebisbat de Tarragona
107. P. Francés d'Assís Figueras i Funtané, claretià
108. Mn. Josep Maria Fisa i Bosch, arquebisbat de Barcelona
109. P. Joan Florensa i Parés, escolapi
110. Mn. Eduard Flores i Serradell, bisbat de Vic
111. P. Joaquim Folqué i Nicolau, salesià
112. P. Joan Font Gumfaus, claretià
113. Mn. Josep Font i Gallart, bisbat d'Urgell
114. Mn. Jaume Fontbona i Missé, arquebisbat de Barcelona
115. Mn. Climent Forner i Escobet, bisbat de Solsona
116. Mn. Benet Galí i Johera, bisbat de Girona
117. Mn. Miquel Garcia i Bailach, bisbat de Tortosa
118. P, Manel Gasch i Hurios, monjo de Montserrat
119. Mn. Rafel Gasol i Llorens, bisbat de Vic
120. Mn. Leandre Gassó i Ubach, arquebisbat de Barcelona
121. P. Sergi d'Assís Gelpí i Abradó, monjo de Montserrat
122. Mn. Josep-Pau Gil i Llorens, bisbat de Tortosa
123. Mn. Josep Gil i Ribas, arquebisbat de Tarragona
124. Mn. Jaume Grané i Calvó, bisbat de Sant Feliu
125. Mn. Salvador Gras i Cabutí, bisbat de Girona
126. Mn. Gerard Guerra i Rey, arquebisbat de Barcelona
127. Mn. Antoni Guixé i Vila, bisbat de Solsona
128. Mn. Josep Hortet i Gausachs, arquebisbat de Barcelona
129. Mn. Miquel Àngel Jiménez i Colàs, bisbat de Sant Feliu
130. Mn. Josep Jiménez i Montejo, arquebisbat de Barcelona
131. P. Josep Gendrau i Valls, franciscà
132. Mn. Josep Maria Serra i Roigé, arquebisbat de Tarragona
133. Mn. Josep Maria Jubany i Casanovas, arquebisbat de Barcelona
134. Fra Francesc Linares i Cerezuela, franciscà
135. Mn. Joan Lladó i Vilaseca, arquebisbat de Barcelona
136. Fra. Carles M, Lloig i Rodó, carmelita
137. Mn. Joaquim Lluís i Corominas, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
138. Mn. Francesc Xavier Machacon i Armengol, bisbat de Solsona
139. P. Josep Maria Maideu i Puig, salesià
140. Mn. Francesc Manresa i Manresa, arquebisbat de Tarragona.
141. Mn. Gregori Manso i Santos, bisbat de Barcelona
142. Mn. Fermí Manteca i Rodríguez, bisbat de Solsona
143. P. Marcel.lí Fonts i Bosch, claretià
144. Mn. Xavier Margalef i Jornet, bisbat de Tortosa
145. Mn. Joan Ramon Marín i Torner, bisbat de Sant Feliu
146. P. Joan Marquès i Calafat, salesià
147. Mn. Josep Maria Mas i Vusqué, bisbat de Vic
148. Mn. Ramon Masachs i Plana, bisbat de Girona
149. Mn. Josep Massana i Cortina, bisbat de Vic
150. Mn. Manel Masvidal i Castro, bisbat de Girona
151. Mn. Antoni Matabosch, arquebisbat de Barcelona
152. Mn. Raimon Mateu de la Casa, arquebisbat de Tarragona
153. Mn. Jacint Medina i Fabregó, bisbat de Vic
154. P. Xavier Melloni i Ribas, jesuïta
155. Mn. Josep Maria i Escorihuela Pujol, bisbat de Lleida.
156. Mn. Pere Milà i Vidal, bisbat Sant Feliu de Llobregat
157. P. José Antonio Montobbio i Etcheverría, jesuïta
158. Mn. Gaspar Mora i Bartrès, bisbat de Sant Feliu
159. Mn . Josep Moragues i Borrull, arquebisbat de Tarragona
160. Mn. Xavier Moretó i Navarro, arquebisbat de Barcelona
161. Mn. Xavier Morlans i Molina, arquebisbat de Barcelona
162. P. Josep Manuel Morros i Castelltort, escolapi
163. Mn. Carles Mundet i Tarrés, bisbat de Girona
164. Mn. Carles Muñiz i Pérez, bisbat de Sant Feliu
165. Mn. Fèlix Mussoll i Segura, bisbat de Girona
166. Mn. Joan Nadal i Garcia, Bisbat de Terrassa
167. Mn. Joan Naspleda i Arxer, bisbat de Girona
168. P. Francesc Nolla i Cavallé, jesuïta
169. Mn. Pere Oliva i March, bisbat de Vic
170. Mn. Ricard Olivella i Mitjans, bisbat Barcelona
171. Mn. Ramon Olomi i Batlle, bisbat de Sant Feliu
172. P. Ramon Oranias i Orga, monjo de Montserrat
173. Mn. Jordi Orobitg i Huguet, bisbat de Solsona
174. P. Àngel Pagès i Isern, claretià
175. P. Ramiro Pàmpols i Colomines, jesuïta
176. P, Anselm Parés i Domènech, monjo de Montserrat
177. Mn. Francesc Pausas Mestres, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
179. Mn. Jaume Pedrós i Solé, bisbat de Lleida
180. P. Josep Peñarroya i Artola, monjo de Solius
181. Mn. Joan Perera Faura, bisbat d'Urgell
182. P. Angel Pinto i Comas, salesià
183. P. Xavier Piquer i Peiris, claretià
184. Mn. Antoni Pladevall i Font, bisbat de Vic
185. Mn. Lluís Plana i Sau, bisbat de Girona
186. P. Lluís Planas i Vilella, monjo de Montserrat
187. Mn. Francesc Planella i Arnau, bisbat de Girona
188. P. Joan Lluís Playa i Morera, salesià
189. P. Xavier Poch Farré, benedictí,
190. P.Joaquim Pons i Ribas, jesuïta
191. Mn. Xavier Pont i Camps, arquebisbat de Tarragona
192. Mn. Lluís Portabella d'Alós, bisbat de Sant Feliu
193. P. Antoni Pou i Muntaner, monjo de Montserrat
194. P. Manel Pousa, arquebisbat de Barcelona
195. Mn. Lluís Prat i Sabata, bisbat de Solsona
196. Mn. Ramon Prat i Pons, bisbat de Lleida
197. P. Jordi Prunera i Tort, carmelita
198. Mn. Carles Pubill i Gamisans, bisbat de Solsona
199. Mn. Joan Puig i Mas, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
200. Mn. Ramon Blas i Batet,arquebisbat de Tarragona
201. Mn. Adolf Pujol i Camprubí, bisbat de Sant Feliu de Llobregat
202. P. Hilari Ernest Raguer i Suñer, monjo de Montserrat
203. P. Josep M. Rambla i Blanch, jesuïta
204. P. Miquel Ramon i Campins, franciscà
205. Mn. Josep Raventós i Giralt, arquebisbat de Tarragona
206. P. Eduard Rey i Puiggròs, caputxí
207. P. Joan Ribalta i Balet, jesuïta
208. P. Josep Ribalta i Jovell, franciscà
209. P. Ramon Ribas i Boixeda, jesuïta
210. P. Ignasi Ricart i Fàbregas, claretià
211. P. Josep Ricart i Oller, jesuïta
212. P. Carles Riera i Montserrat, jesuïta
213. Mn. Carles Riera i Fonts, bisbat de Vic
214. P. Antoni Riera i Figueras, jesuïta
215. Mn. Josep Frigola i Ribas, Pares Blancs
216. P. Josep Maria Rierola i Roqué, escolapi
217. P. Josep Roca i Alsina, claretià
218. Mn. Anton Roca i Roig, bisbat de Sant Feliu
219. Mn. Pepe Rodado i Leon, arquebisbat de Barcelona
220. Mn. Andreu Rodríguez i Morales, bisbat d'Urgell
221. Mn. Ricard Rodríguez i Martos Dauer, arquebisbat de Barcelona
222. Mn. Manuel Roig i Cisteré, arquebisbat de Barcelona
223. Mn. Agustí Roig i Marcè, bisbat de Sant Feliu
224. Mn. Jaume Roig i Roig, arquebisbat de Tarragona
225. P. Francesc Roma, jesuïta
226. Mn. Toni Roman i Luis, arquebisbat de Barcelona
227. P. Josep Vilarrubias i Codina,claretià
228. fra Jesús Romero i Lagatto, caputxí
229. Mn. Francesc Romeu i Torrents, arquebisbat de Barcelona
230. Mn. Jordi Rossell i Farré, arquebisbat de Tarragona
231. Mn. Salvador Roura i Comas, arquebisbat de Barcelona
232. Mn. Enric Roura i Sabà, bisbat de Girona
233. Mn. Joaquim Rovirosa i Cendrós, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
234. Mn. Creu Sáiz i Ruiz, arquebisbat de Tarragona
235. Mn. Jordi Salvany i Guerrero, arquebisbat de Barcelona
236. Mn. Joan Sanglas i Banús, bisbat de Vic
237. Mn. Joan Sanmartí i Roset,arquebisbat de Barcelona
238. Mn. Mateu Santacana i Capella, bisbat de Sant Feliu
239. Mn. Carles Sauró i Calzada, arquebisbat de Barcelona
240. P. Josep Maria Segarra i Latorre, caputxí
241. Mn. Joan Serrabassa i Faja, bisbat de Vic
242. Mn. Antoni V. Serramona i Terrado, arquebisbat de Barcelona
243. P. Jordi Seubas i Goixart, caputxí
244. Mn. Jesús Miguel Silvestre i Garcia, bisbat de Vic
245. Mn. Josep Lluis Socias i Bruguera, arquebisbat de Barcelona
246. Mn. Lluís Solà i Triadú, bisbat de Girona
247. Mn. Pere Soldevila i Plans, bisbat de Vic
248. Mn. Felip Soldevila i Cuní, bisbat de Vic
249. Mn. Ferran Solé i Minaes, bisbat d'Urgell
250. Fra. Josep M. Solé i Rovira, carmelita
251. Mn. Josep Soler i Llopar, arquebisbat de Barcelona
252. Mn. Pere Soler i Puigoriol, bisbat de Vic
253. Mn. Joan Solés i Pujol, bisbat de Girona
254. Mn. Enric Subirà i Blasi, arquebisbat de Barcelona
255. P. Josep Sugrañes i Moliné, jesuïta
256. P. Joan Suñol i Bosch, jesuïta
257. Mn. Josep Taberner i Vilar, bisbat de Girona
258. Mn. Jesús Tarragona i Muray, bisbat de Lleida
259. P. Joan Tordera Cunill, monjo de Montserrat
260. Mn. Joan Torra i Bitlloch, bisbat de Vic
261. Mn. Pere Torras i Ferrer, bisbat de Girona
262. Mn. Josep Torrente i Bruna, bisbat de Sant Feliu
263. P. Josep Roger Torras i Aguiló, jesuïta
264. Mn. Melcior Trèmols i Capo, arquebisbat de Barcelona
265. P. Mateu Trenchs i Verdaguer, escolapi
266. Mn. Joan Triadó i Serracant, bisbat de Girona
267. Mn. Andreu Trilla i Llobera, bisbat de Vic
268. Mn. Abel Trulls i Noguera, bisbat de Solsona
269. Mn. Sadurní Tudela i Prats, bisbat de Solsona
270. P. Josep-Oriol Tuñí i Vancells, jesuïta
271. Mn. Llorenç Utgés i Ginesta, bisbat d'Urgell
272. P. Joan Valls i Ferrer, salesià
273. P. Ignasi Velasco i Suàrez-Bravo, jesuïta
274. Mn. Jesús Vergara i Gainza, salesià
275. P. Ignasi Vila i Despujol, jesuïta
276. Mn. Jordi Vila i Borràs, arquebisbat de Tarragona
277. Mn. Jaume Vilardell i Torregasa, bisbat de Solsona
278. P. Anton Maria Vilarrubias i Codina, claretià
279. P. Antoni Vilarrubla i Grau, salesià
281. Mn. Joan Villegas i Acien, arquebisbat de Barcelona
282. P. Francesc Xicoy i Bassegoda, jesuïta
Llistat dels diaques de les diòcesis catalanes que s'adhereixen a la "Declaració sobre el referèndum d'autodeterminació convocat pel Govern de Catalunya, el proper 1 d'octubre".
1. Mn. Miquel Adrover Santamaria, arquebisbat de Barcelona.
2. Mn. Ramon Buyreu Bello, arquebisbat de Barcelona.
3. Mn. Joan Josep Castaño Santos, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
4. Mn. Antoni Cid Briansó, bisbat de Solsona.
5. Mn. Josep Farrerons Fugueroles, bisbat de Girona
6. Mn. Josep Maria Gómez Del Perugia, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
7. Mn. Ignasi Lopez Clevillé, bisbat de Girona.
8. Mn. Xavier Lloses Salvador, bisbat de Girona.
9. Mn. Albert Manich Bou, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
10. Mn. Miquel Miras Núñez, bisbat de Terrassa.
11. P. Aniol Noguera i Clofent, bisbat de Vic, escolapi.
12. Mn. Eduardo Ocio Ugartondo, bisbat de Terrassa
13. Mn. Bertomeu Palau Redon, arquebisbat de Barcelona.
14. Mn. Sebastià Payà Sánchez, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
15. Mn. Ricard Rodriguez Martos Dauer, arquebisbat de Barcelona
16. Mn. Josep Maria Rufas Martínez, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
17. Mn. Carles Sánchez García,bisbat de Girona.
18. Mn . Jaume Sedó Mestres, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
19. Mn. Miquel Toneu Lloveras, arquebisbat de Barcelona.
20. Mn. Josep Vidal i Perelló, arquebisbat de Barcelona.
21. Mn . Florenci Travé Travé, bisbat de Sant Feliu de Llobregat.
que firmaron a favor del Referéndum.
La parroquia donde se encuentran
y su cargo pastoral
Entre los muchos disparates y despropósitos que estos días se oyen en relación al referéndum del 1 de octubre está la afirmación de que "los curas catalanes son todos independentistas". Es una completa falsedad como ayer ya nos avanzó Oriolt en su escrito. Es cierto que son muchos los que han firmado el famoso manifiesto, pero son una inmensa minoría en relación a los que no han firmado.
Si desgranamos la lista de los firmantes -delictivo de sedición y rebelión-, primero por diócesis y después por arciprestazgos nos daremos cuenta de los números reales. Eso es lo que hemos hecho nosotros con la diócesis de Barcelona y hemos visto que hay arciprestazgos donde no ha firmado nadie, otros donde ha firmado uno o dos en colectivos amplios de sacerdotes, y en alguno donde todos o una buena parte son religiosos. Jesuitas, escolapios, claretianos o salesianos... en franca decadencia y ausencia de vocaciones se han apuntado en una buena parte a la rebeldía contra la legalidad.
Uno de nuestros objetivos a lo largo de estos diez años de historia es señalar las parroquias de confianza, a las que hemos llamado "germinantes", y aquellas poco recomendables por no actuar de acuerdo con el Magisterio y la Doctrina de la Iglesia o por estar más preocupadas por el adoctrinamiento nacionalista que por la evangelización. Gracias a estas firmas nos sale una lista bastante precisa de muchas parroquias que son de poca confianza. ¿Cómo alguien va a confiar en unos sacerdotes que públicamente se manifiestan al margen de las leyes promocionando la desobediencia y fomentando la división y el enfrentamiento entre los ciudadanos y por tanto también entre los creyentes?
Os dejamos la lista por si antes de ir a alguna de sus celebraciones en sus parroquias quieren pensárselo dos veces y buscar otra parroquia de más confianza.
ZONA PASTORAL I
Arciprestazgo de la Catedral (9 parroquias/14 sacerdotes)
- Gaietà de Casacuberta Franco. Párroco de la basílica de Santa Maria del Pi (Barcelona)
- Xavier Morlans Molina. Adscrito a Santa Anna (Barcelona)
Arciprestazgo Rambles-Poble Sec (9 parroquias/16 sacerdotes)
- Joan Cabot Barbany. Párroco de la Mare de Déu de Lourdes, Sant Pere Claver, Sant Salvador d'Horta y Santa Madrona y Administrador Parroquial de Sant Pau (Barcelona)
- Josep Catà Mitjans. Colaborador del Equipo sacerdotal de las parroquias de Poble Sec: Mare de Déu de Lourdes, Santa Madrona, Sant Pere Claver y Sant Salvador d'Horta (Barcelona)
- Josep Ricart Oller. jesuita, Colaborador del Equipo sacerdotal de las parroquias de Poble Sec: Mare de Déu de Lourdes, Santa Madrona, Sant Pere Claver y Sant Salvador d'Horta (Barcelona)
Arciprestazgo de Sant Josep Oriol (11 parroquias/15 sacerdotes)
- Francesc Boqueras Bailina, vicario de La Preciossima Sang i Sant Domènec de Guzman (Barcelona)
Arciprestazgo de la Puríssima Concepció (4 parroquias/10 sacerdotes)
- Ramon Batlle Tomás. Párroco de Sant Ramon de Penyafort (Barcelona)
- Jordi Salvany Guerrero. Vicario de Sant Ramon de Penyafort (Barcelona)
Arciprestazgo de la Sagrada Família (6 parroquias/16 sacerdotes)
- Lluis Bonet Armengol. Párroco de la Sagrada Familia (Barcelona)
- Pere Codina Mas, claretiano, párroco de l'Inmaculat Cor de Maria y Sant Tomàs d'Aquino (Barcelona)
- Josep Roca Alsina, claretiano, vicario de l'Inmaculat Cor de Maria y Sant Tomàs d'Aquino (Barcelona)
Arciprestazgo de la Sant Martí (4 parroquias/10 sacerdotes)
- Xavier Moretó Navarro. Párroco de Sant Ignasi de Loiola (Barcelona)
- Josep Maria Rierola Roqué, escolapio, Párroco de Sant Josep de Calassanç (Barcelona)
ZONA PASTORAL II
Arciprestazgo de Horta (5 parroquias/7 sacerdotes)
- Óscar Pueyo Bes, Párroco de Mare de Déu de Mont Carmel (Barcelona)
- Josep Maria Iglesias Cornet, párroco Sant Marcel (Barcelona)
- Pere Obiols Riba, salesiano, vicario de Sant Joan d'Horta (Barcelona)
Arciprestazgo de Guinardó (3 parroquias/9 sacerdotes)
- Jordi Cussó Porredon. Párroco de Crist Redemptor (Barcelona)
Arciprestazgo de Vall d'Hebron (6 parroquias / 6 sacerdotes)
- Ricard Olivella Mitjans. Párroco de Sant Crist y Administrador Parroquial de Sant Tomàs More (Barcelona)
Arciprestazgo de Vilapicina (8 parroquias/13 sacerdotes)
- NINGUNO
Arciprestazgo de Gràcia (10 parroquias/20 sacerdotes)
- Jordi Carreter Cambra. Párroco de Sant Joan de Gràcia (Barcelona)
- Josep Ribalta Jovell, franciscano, Párroco de la Mare de Déu de la Salut (Barcelona)
- Lluis Borràs Goixart, franciscano, vicario de la Mare de Déu de la Salut (Barcelona)
Arciprestazgo de Sant Gervasi (8 parroquias/19 sacerdotes)
- Josep Maria Jubany Casanovas, Párroco de Sant Ildefons (Barcelona)
- Carles Sauró Calzada, Párroco de la Mare de Déu de la Bonanova (Barcelona)
Arciprestazgo de Sarrià (11 parroquias/22 sacerdotes)
- Josep Maria Maideu Puig, salesiano, párroco de María Auxiliadora (Barcelona)
- Antoni Vilarrubla Grau, salesiano, vicario de Maria Auxiliadora (Barcelona)
- Domènec Valls Ferrer, salesiano, párroco de la basílica del Tibidabo
- Joan Marqués Calafat, salesiano, vicario de la basílica del Tibidabo
ZONA PASTORAL III
Arciprestazgo de Poblenou (7 parroquias/8 sacerdotes)
- Francesc Romeu Torrents. Párroco de Santa Maria del Taulat, Sant Bernat Calbó y Sant Pancraç (Barcelona)
- Joaquim Brustenga Miquel, adscrito de Santa Maria del Taulat y a Sant Bernat Calbó
- Joan Villegas Acién. Párroco de Sant Francesc de Pàola y Sagrat Cor (Barcelona)
- Melcior Tremols Capo. Vicario de Sant Francesc de Pàola y Sagrat Cor (Barcelona)
Arciprestazgo de Provençals (9 parroquias/10 sacerdotes)
- NINGUNO
Arciprestazgo de Sant Andreu (6 parroquias/12 sacerdotes)
- Jaume Fontbona Missé. Párroco de Crist Rei (Barcelona)
- Màxim Muñoz Duran, claretiano, adscrito a Crist Rei (Barcelona)
- Josep Soler Llopart. Párroco de Sant Andreu (Barcelona)
- Vicente Araque Elvira. Párroco de Sant Pacià (Barcelona)
Arciprestazgo de Trinitat-Roquetes (8 parroquias/13 sacerdotes)
- Joan Cuadrench Aragonés. Párroco de Sant Sebastià y Santa Maria Magdalena (Barcelona)
- Francesc Carreró Vidal, escolapio, vicario de Sant Marc y de Santa Bernadeta (Barcelona)
- Manuel Pousa Engroñat. Vicario de la Santísima Trinitat (Barcelona)
- Josep Rodado León. Adscrito a Santa Engràcia (Barcelona)
ZONA PASTORAL IV
Arciprestazgo de Sants-La Marina (9 parroquias/13 sacerdotes)
- Josep Hortet Gausachs. Párroco de Santa Maria de Port y Sant Bartomeu (Barcelona)
- Josep Lluis Socias Bruguera. Párroco de Santa Maria de Sants (Barcelona)
- Enric Subirà Blasi. Párroco de Sant Medir (Barcelona)
- Francesc Nolla Cavallé, jesuita, párroco del Sant Àngel Custodi (Barcelona)
Arciprestazgo de La Torrassa-Collblanc (8 parroquias/13 sacerdotes)
- Emilià Almodóvar Molina. Párroco de Sant Benet (L'Hospitalet de Llobregat)
- Xavier Alegre Santamaría, jesuita, adscrito a Sant Antoni de Padua (Esplugues de Llobregat) y a Santa Gemma Galgani (L'Hospitalet de Llobregat)
- Josep Miralles Massanes, jesuita, adscrito a Sant Antoni de Pàdua (Esplugues de Llobregat) y a Santa Gemma Galgani (L'Hospitalet de Llobregat)
Arciprestazgo de l'Hospitalet de Llobregat (8 parroquias/16 sacerdotes)
- Joaquim Pons Ribas, jesuita. Párroco de la Mare de Déu de Bellvitge (L'Hospitalet de Llobregat)
- Miquel Cubero Balboa. Párroco de Sant Joan Evangelista y Santa Maria de la Gornal (L'Hospitalet de Llobregat)
- Josep Jiménez Montejo, Párroco de Sant Josep (L'Hospitalet de Llobregat)
Arciprestazgo de Cornellà de Llobregat (6 parroquias/10 sacerdotes)
- Joan Sanmartí Roset. Párroco de Santa Maria (Cornellà de Llobregat)
- Antoni Casas Miguel. Párroco Verge del Pilar y Sant Ildefons (Cornellà de Llobregat)
- Gregori Manso Santos. Párroco de Sant Ildefons (Cornellà de Llobregat)
- Josep Maria Fisa Bosch. Párroco Mare de Déu del Carme (Sant Joan Despí)
- Joan Zapatero Ballesteros. Adscrito a Mare de Déu del Carme (Sant Joan Despí)
ZONA PASTORAL V
Arciprestazgo de Badalona Sud (8 parroquias/19 sacerdotes)
- Salvador Roura Comas, Párroco de la Mare de Déu de la Salut (Badalona)
- Isidre Ferraté Deop, jesuita, adscrito a la Mare de Déu de la Salud (Badalona)
- Carles Riera Montserrat, jesuita, adscrito a la Mare de Déu de la Salud (Badalona)
- Josep Lluís Calvís Comangés, Párroco de Sant Antoni de Pàdua (Badalona)
- Miquel Elhombre Trallero. Párroco de Sant Pau (Badalona)
Arciprestazgo de Badalona Nord (10 parroquias/10 sacerdotes)
- NINGUNO
Arciprestazgo de Gramenet (9 parroquias/11 sacerdotes)
- Miquel Àngel Pérez Sánchez, Párroco de Santa Coloma (Santa Coloma de Gramenet)
- Gerard Guerra Rey, vicario de Sant Jaume i de Sant Joaquim (Santa Coloma de Gramenet)
ZONA PASTORAL VI
Arciprestazgo de La Cisa (11 parroquias/12 sacerdotes)
- Toni Román Luis. Párroco de Sant Joan de Vilassar de Mar
Arciprestazgo de Mataró (15 parroquias/21 sacerdotes)
- Jaume Abril Figueras. Párroco de Sant Andreu de Alfar, Sant Esteve de Canyamars y Sant Aciscle y Santa Victòria (Dosrius)
- Ramon Bosch Costa, salesiano, Vicario de María Auxiliadora (Mataró)
Otros sacerdotes (sin parroquia)
- Leandre Gassó Ubach. Jubilado
- Jaume Duch Fumador, Jubilado
- Josep Anton Arenas Sampera. Jubilado
- Manuel Tort Martí, jubilado
- Antoni Matabosch Soler. Sin Parroquia
- Manuel Roig Cisteré Delegado de Misiones en Barcelona, ejerce el sacerdocio en la diócesis de Sant Feliu
- Joaquim Cervera Durán, secularizado y casado
- Alexandre Damians Belart, no aparece en la lista oficial de sacerdotes de Barcelona
Un cura catalán habla de las causas del delito de sedición en Cataluña.
Sobre la alienación de unos pocos nazioanalistas para adoctrinar
desde las escuelas al pueblo catalán.
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