La parábola de los ciegos
Pieter Brueghel el Viejo
Ciegos guiando sordomudos
(Política Partidocrática española actual)
Navío en que el capitán es el viento,
Rebaño por los lobos resguardado,
Los pastores execran su cayado,
Y el sextante avizora el hundimiento.
El cobarde encabeza el regimiento,
Y el docto por el necio es castigado.
La traición, academia del soldado,
Y el liceo, purgatorio del talento.
Confiado agarra el sordo la batuta,
Despliega partituras de preludio.
¡Y atención! Es el manco el que ejecuta.
Y sometido un pleito a largo estudio,
Darásele al verdugo la cicuta,
Y a la vil verdad, carta de repudio.
Lanza el Cuervo Galaico su graznido,
Augura tal vez su propia condena.
Y el Pétreo canino afila la Hiena:
Es tiempo de morder o ser mordido.
La Rivera otea el Buitre forajido,
Apesta a cadáver, y entra en barrena.
Y ensangrienta la Rata su Melena,
Lo dantesco alimenta su libido.
Asociaranse en velada artimaña,
Renovando el clan de la necrofilia
Y quebrantarán los huesos de España.
¿Por qué pugnar si el pillaje concilia?
He aquí el consenso de la alimaña:
Todos, en la carroña, sois familia.
0 comments :
Publicar un comentario