EL Rincón de Yanka: PEDRO ELÍAS GUTIÉRREZ HART Y RAFAEL BOLÍVAR CORONADO LOS CREADORES DEL ALMA LLANERA

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miércoles, 16 de marzo de 2016

PEDRO ELÍAS GUTIÉRREZ HART Y RAFAEL BOLÍVAR CORONADO LOS CREADORES DEL ALMA LLANERA


El 14 de marzo de 1870 nació 
compositor musical del 'Alma Llanera'

Pedro Elías Gutiérrez Hart (n. La Guaira; 14 de marzo de 1870 — f. Macuto; 31 de mayo de 1954) fue un compositor y músico venezolano, fue el creador de la música de la zarzuela Alma Llanera, cuyo tema musical homónimo es considerado como el segundo himno nacional de Venezuela.

Fue hijo del militar, legislador y político General Jacinto Gutiérrez y de Sofía Ana Hart. Realizó sus primeros estudios en el Colegio "Santa María de Caracas". El director por entonces de esa institución era el sabio venezolano Agustín Aveledo, quien contaría varios años después, siendo Gutiérrez un compositor y músico reconocido, que frecuentemente hallaba al futuro músico y compositor, abstraído, creando sus primeras melodías. Al cumplir los 15 años, pese a la oposición de sus padres, Gutiérrez comenzó a estudiar música bajo la dirección del maestro Trino Gil y más tarde en la Academia de Música del Instituto Nacional de Bellas Artes de Caracas, hoy conocida como "Escuela de Música José Ángel Lamas". A los 16 años de edad escribió su "Marcha triunfal a María" que desde entonces se interpretó en los templos venezolanos. Después de la muerte de sus padres se afianzó en sus estudios musicales, llegando a dominar el contrabajo y prácticamente todos los instrumentos de cuerda.

A los 19 años estrenó su primera obra musical, titulada "Sinfonía", en el "Teatro Municipal de Caracas" por lo que el Presidente de la República, de ese tiempo, Juan Pablo Rojas Paúl, asistente al concierto le hace ganador de una beca para cursar estudios en el continente europeo. Sin embargo, Gutiérrez declinó el ofrecimiento de dicha beca para no dejar sola a su madre, que había enviudado. Esta conducta con su progenitora le hizo merecedor por parte del gobierno venezolano de dos premios: el "Busto del Libertador" y la "Medalla de Instrucción Pública" siendo una de las personas más jóvenes a la que se hayan otorgado dichos honores.

Como compositor cultivó el género de la zarzuela y el vals; sin embargo su ámbito musical es amplio, es conocido históricamente como un gran director de banda y un virtuoso del contrabajo. Comenzó sus estudios musicales a la edad de 15 años en la Academia de Música del Instituto Nacional de Bellas Artes.

Inicia su actividad profesional como músico, en la Banda Marcial del Distrito Federal, hoy conocida como "Banda Marcial Caracas", como contrabajista en 1901 donde llega a ser director por el período comprendido entre los años 1909 y 1946. Para dicha banda realizó innumerables transcripciones y adaptaciones. Una zarzuela de las muchas que compuso, le dio fama mundial a través de una de sus piezas: el joropo Alma Llanera de la zarzuela homónima en un acto y tres cuadros, estrenada en Caracas el 10 de septiembre de 1914 escrita por Rafael Bolívar Coronado. La música de Alma Llanera es una adaptación que el Maestro Pedro Elías Gutiérrez realizó del vals “Marisela” de Sebastián Díaz Peña (primera parte de Alma Llanera), y el vals "Mita" del compositor Jan Gerard Palm (1831-1906) de Curazao (segunda parte de Alma Llanera). Este joropo se convirtió en un auténtico símbolo de venezolanidad, un segundo himno nacional. Entre sus creaciones destacan también Geraneo, su gran vals compuesto en 1903 y “Misa Panamericana” estrenada en la Catedral de San Patricio, en Nueva York. Algunas de sus otras piezas musicales más famosas son: Sínfonía, primera obra que estrena en el Teatro Municipal de Caracas; El Alma llanera; Percance en Macuto, zarzuela; Un gallero como pocos, zarzuela; Laura, vals; Madre Selva, vals; Celajes o Geraneo, vals compuesto en honor a Eloy Alfaro, Presidente de Ecuador.

Pedro Elías Gutiérrez murió en Macuto, el 31 de mayo de 1954, más su Alma Llanera permanece como una de las más importantes producciones de la cultura venezolana.

Aparentemente, no existen trabajos impresos o en Internet al momento presente, acerca de la discografía dejada por Pedro Elías Gutiérrez. Sin embargo, gracias a la base de datos «Encyclopedic Discography of Victor Recordings» que recoge las grabaciones realizadas por la empresa estadounidense "Victor Talking Machine Company", se puede deducir que el músico fue uno de los artistas pioneros de la industria discográfica venezolana. Puede suponerse, a partir de dicha base de datos, que a principios de enero del año 1917, técnicos y agentes de dicha empresa, llegaron a Caracas a fin de realizar lo que se cree son las primeras grabaciones de audio hechas en territorio venezolano, bajo el sistema mecánico acústico procesadas posteriormente por la empresa en sus instalaciones de Camden, Estados Unidos. En dichas sesiones de grabación, Gutiérrez dirigió la "Banda Marcial de Caracas", de la cual era director titular, la "Orquesta Caraqueña" fundada y también dirigida por él y una orquesta no identificada para respaldar al tenor Pepino Sarno, de quien se desconocen datos.

El siguiente es el listado obtenido a partir de los datos existentes sin incluir otra información, puesto que no se conocen grabaciones posteriores del músico.


Alma llanera es una canción compuesta por Pedro Elías Gutiérrez sobre un texto de Rafael Bolívar Coronado. Obedece a un tipo de canción popular en Venezuela, el joropo. La música de Alma Llanera es una adaptación que el Maestro Pedro Elías Gutiérrez realizó del vals “Marisela” de Sebastián Díaz Peña (primera parte de Alma Llanera), y el vals "Mita" del compositor Jan Gerard Palm (1831-1906) de Curazao (segunda parte de Alma Llanera). Alma llanera está considerada como un himno nacional oficioso de Venezuela. Es una tradición en Venezuela poner fin a cualquier reunión social o fiesta con la entonación de Alma Llanera. La canción nació dentro de un espectáculo homónimo de zarzuela, estrenada el 19 de septiembre de 1914 en el Teatro Caracas, bajo el nombre “Alma Llanera: zarzuela en un acto” por la compañía española de Matilde Rueda.


Esta popular canción, considerada en la actualidad como el segundo himno nacional de Venezuela, comenzó a ser conocida masívamente a partir de su presentación en el Teatro Caracas, llamado también “Coliseo de Veroes”, el día sábado 19 de septiembre de 1914, con gran aceptación del público espectador, hasta el extremo de que el autor de su letra, el villacurano Rafael Bolívar Coronado (1884 – 1924), fue premiado por el general Juan Vicente Gómez, Presidente de la República, con una beca de estudios en España.

La mencionada composición lírica forma parte del contenido de una zarzuela (pequeña obra de teatro), escrita por Bolívar Coronado para un “acto” y tres “cuadros”; la musicalización corrió a cargo del maestro guaireño Pedro Elías Gutiérrez (1870 – 1954), quien se desempeñaba como director de la Banda Marcial de Caracas.

La obra fue escenificada por la compañía de opereta de Manolo Puertolas, recién llegada a Caracas de una gira por varios países latinoamericanos, con participación de las tiples Matilde Rueda y Lola Arellano, Emilia Montes, una señora Argüelles, el mismo Puertolas, Rafael Guinán, Jesús Izquierdo y un negrito villacurano”joropeador” llamado Mamerto, que le dio un toque criollo especial a la pieza.

Al día siguiente, un comentarista del diario El Universal reseñó: “Alma Llanera es escena de la vida en las sabanas venezolanas a las riberas del Arauca y sobre su delicadeza de asunto y abundancia de chistes se hacen halagadores comentarios”.

A pesar de su rotundo éxito inaugural, no volvió a ser interpretada hasta el 28 de diciembre de ese mismo año, en el Teatro Municipal de Caracas, en un homenaje al actor venezolano Teófilo Leal; luego pasó a Valencia, Puerto Cabello y Barquisimeto.

En 1915, Bolívar Coronado publicó la primera edición de Alma Llanera, en la Imprenta Americana de don Pepe Valery. En 28 páginas, con una dedicatoria del autor a Matilde Rueda:”…la genial artista que de tan humilde opúsculo ha hecho una llamarada de exaltación y de ensueño”. El éxito editorial corrió parejo al de la representación teatral de la obra, siendo conocida no sólo en toda Venezuela, si no también en Centroamérica y España. Desde ese momento, comenzó a ser considerada como el segundo Himno Nacional de Venezuela.

La última representación de la zarzuela se hizo el día 1º de junio de 1930, ya fallecido su autor, en el Teatro Olimpia de Caracas, montada por Rafael Guinand y su grupo.

Según Oldman Botelllo, el Cronista de la ciudad de Maracay (1993: 61), el músico Pedro Elias Gutiérrez, de común acuerdo con el autor de la letra, decidió independizar la pieza musical, montándola en la Banda Marcial de Caracas bajo su dirección, estrenándola en la Plaza Bolívar de la capital, el día 31 de diciembre de 1914, en la retreta de despedida del año. Desde entonces pasó a formar parte del repertorio musical de la mencionada Banda Marcial, al igual que de las del interior del país.




Rafael Bolívar Coronado: (El primer compositor ecológico del mundo). 



Fue hijo del escritor costumbrista venezolano Rafael Bolívar Álvarez (1860-1900).  Estudió la educación primaria en Caracas, pero la terminó en su tierra natal. Se inició en el periodismo en 1912, al colaborar con las publicaciones El Cojo Ilustrado, El Nuevo Diario y El Universal, entre otros periódicos.

Junto con el músico y compositor Pedro Elías Gutiérrez, compuso la zarzuela "Alma Llanera", estrenada en Caracas el 19 de septiembre de 1914. En uno de los actos de la pieza figura un joropo del mismo nombre, que pronto tuvo éxito en la capital convirtiéndose en una pieza de amplia difusión nacional e internacional. El Alma Llanera es hoy considerada como el segundo himno de Venezuela. Sin embargo, el escritor consideraría años después haría un juicio negativo de su obra, afirmando que "De todos mis adefesios es la letra del Alma Llanera del que más me arrepiento". Bolívar Coronado jamás percibió, en los años posteriores, dinero alguno por la letra de la composición, ya que Pedro Elías Gutiérrez se atribuyó la autoría, aunque varios años después sus familiares cobrarían tales derechos. Posteriormente. gana los Juegos Florales de Venezuela con su cuento "El nido de azulejos"

A raíz del éxito de "Alma Llanera, el entonces mandatario Juan Vicente Gómez lo premió con una beca a España, donde se convirtió en activo antigomecista. Sin dinero ni trabajo, Bolívar convenció al poeta Francisco Villaespesa para trabajar como corrector en la revista Cervantes, dirigida por este último. Fue despedido poco después tanto por los errores ortográficos en su trabajo, como por pasar algunos escritos propios como si fuesen de insignes escritores latinoamericanos.

En 1916, luego del éxito de su zarzuela, se trasladó a Madrid. Allí escribió artículos literarios y anti gomecistas para distintos periódicos, y trabajó de copiador de manuscritos en la Biblioteca Nacional de Madrid para la "Editorial América", propiedad del escritor venezolano Rufino Blanco Fombona. También trabajó como secretario del escritor español Francisco Villaespesa, lo que le permitió colaborar en publicaciones periódicas españolas.

Sin embargo, Bolívar Coronado nunca asistió a la biblioteca, limitándose a inventar cinco crónicas firmadas como Fray Nemesio de la Concepción Zapata, Maestre Juan de Ocampo, F. Salcedo Ordoñez, Diego Albéniz de la Cerrada y Mateo Montalvo de Jarama. Estas falsificaciones fueron descubiertas por el escritor e historiador venezolano Vicente Lecuna debido a la presencia de estructuras de redacción y vocablos, inexistentes en la época en que presuntamente se escribieron.

Gracias a su habilidad para copiar estilos, hizo pasar por legítimos desde poemas hasta crónicas imaginarias de la conquista de América. Muchas de estas obras fueron publicadas por "Editorial América", que desconocía la falta de autenticidad de los mismos.

Lecuna avisó a Blanco Fombona, quien, tras cotejar los libros contra los de la biblioteca en Madrid, confirmó que no eran iguales. En la editorial también consiguió obras falsas como El llanero (Estudio de sociología venezolana)de Daniel Mendoza, Letras españolas, primera mitad del siglo XIX de Rafael María Baralt y Obras científicas de Agustín Codazzi, entre muchas otras, incluyendo trabajos supuestos del mismo Blanco Fombona, Andrés Eloy Blanco, Andrés Bello, Juan Antonio Pérez Bonalde, Juan Vicente Gómez, Pío Gil, José Antonio Calcaño y Arturo Uslar Pietri, entre otros. En total, Coronado utilizó alrededor de 600 nombres, entre falsos y verdaderos, para firmar sus escritos, que incluyeron además antologías de poetas que nunca existieron. Las falsificaciones de Bolívar fueron reveladas en Venezuela en un aviso anónimo publicado en la revista venezolana "Billiken" en su edición del 6 de diciembre de 1919.  El aviso denunció la edición de un libro con un prologo de Luis Felipe Blanco Meaño (hermano de Andrés Eloy Blanco) que este nunca escribió. En sus escritos más personales, Bolívar Coronado justificó sus acciones como asunto de necesidad.

Descubierto su engaño, Bolívar Coronado se ganó la enemistad de Rufino Blanco Fombona, quien lo persiguió por toda Europa, sin éxito. En su fuga, obtuvo empleo como corresponsal de guerra en África. Nunca realizó el viaje, pero escribió crónicas con las informaciones que lograba recoger en el puerto. Con su reputación afectada por sus engaños, Bolívar nunca volvió a Venezuela y vivió el resto de sus días marginado y en la pobreza.

Finalmente, sin mayores recursos económicos, murió en Barcelona, España, como consecuencia de una epidemia de gripe, el 31 de enero de 1924.