EL Rincón de Yanka: BAJO LA DICTADURA DE LOS IMBÉCILES: IDIOCRACIA por FÍGARO

inicio














jueves, 31 de marzo de 2022

BAJO LA DICTADURA DE LOS IMBÉCILES: IDIOCRACIA por FÍGARO


Bajo la dictadura de los imbéciles
Según Dostoyevski llegará un día en que la tolerancia sea tan intensa que se prohibirá pensar a los inteligentes para no molestar a los imbéciles; ese día ha llegado. Antes lo llamaban la dictadura del proletariado, pero con el marxismo que dicen cultural, cambiaron las palabras que nombraban a las cosas. Ahora eso es "progreso" y sus adeptos los "progresistas".
"Se podría afirmar por tanto que la izquierda española no ha aportado prácticamente nada al pensamiento español y tampoco al universal", escribió Ramiro de Maeztu. Pues es la izquierda la que se ha erigido en la abanderada de la vida, desde la transición. La que tiene que decirnos quién es bueno y quién es malo, qué es la verdad, y lo que hay que hacer y pensar. Y a juzgar por el estado de descomposición al que ha llegado la sociedad, de mano de los "progresistas" mediante el engaño, la propaganda y el adoctrinamiento ideológico, queda palmariamente demostrado que no aportó a la Humanidad nada bueno, sino todo lo contrario. Con el "progresismo" al ser una mentira, fue todo a peor. "Progresistas" en el mal.

Hoy cuando los perros y mascotas son considerados personas, y las personas tratadas como animales, se ha enterrado la razón y sus atributos con todo rastro de raciocinio y sentido común. Reina la destrucción y la locura, con la estupidez. No se protege al hombre del lobo, si no, al revés. El hombre no tiene ningún derecho frente a quien le puede arruinar la vida que los tiene todos: el lobo, el delincuente, el ocupa y la administración estatal, que lejos de protegerlo va a acabar con él. El gobierno prohíbe la caza del lobo en todo el territorio nacional porque quiere que coman a los españoles; como si no les llegara con los lobos de dos patas y con la subida astronómica de precios e impuestos del gobierno. Eso pasa cuando los delincuentes ocupan el poder, y dejan en la calles a sus amigos de fatigas que han de proteger. Las buenas personas pasaron a ser los malvados que hay que liquidar porque así es el mundo al revés, y para eso subieron al poder los revolucionarios: para matar a la buena gente. Los verdugos ahora son las víctimas.

Bien lo decía Lenin, después Francisco Largo Caballero, el "Lenin" español, y ahora el coleta cortada, hijo de un terrorista, Pablo Iglesias Turrión, y sus secuaces, sobre cómo acabar con los buenos: "Sus casas deben ser allanadas y ellos encarcelados, precisamente por eso, porque ellos son personas buenas. Siempre mostrarán compasión por los oprimidos. Siempre estarán contra la persecución".

En una palabra, que la buena gente sobra porque no es revolucionaria. Estos individuos que llegan al poder engañando que es para hacer el bien, hacen todo lo contrario; lo primero es asegurarse para no soltarlo, y dar un paso más adelante en su aberrante dirección. No quieren la democracia si no como medio de acceso al poder para luego destruirla. Sin democracia ya no hay oposición, y la que surja la combaten a tiros. "Hay que ocupar", repite Pablo Iglesias, para animar a los ocupas y aumentar el ejército de delincuentes. Para incrementar la violencia. No hubo nadie que les dijera nada, salvo VOX. Adiós a la propiedad privada y a la libertad que es consustancial a ella. A nuestra última propiedad que es nuestro propio cuerpo, que según ellos, y ya de niños, pertenece al estado, o sea a los directores comunistas. Para matar niños indefensos parece ser que no les llega con el aborto, o muerte del nasciturus. Y otra perla marca de la casa, la eutanasia, para concluir la vida. Pues es ésta y la libertad, la que toda esta gentuza, no soportan. A la persona viva y libre la quieren muerta, física y moralmente. Que no tenga vida ni libertad, o sea, propiedad alguna. Bien lo dice la Agenda 2030, "no tendrás nada y serás feliz". O sea, que no tendrás ni la vida. Que estarás dando ortigas. ¿Cabe mayor sarcasmo?

Todos los principios, raíces de nuestro ser, nuestro fundamento de estar aquí, nuestro pasado y presente, son eliminadas por los corruptos "progresistas", depravados y puteros socialistas que están ahí, como que sí, como que no, -ni perro dentro, ni perro fuera- nada más que chupando mariscadas y dinero, mamoneando, para dar paso al totalitarismo comunista absoluto, sin compasión y regado de terror y sangre, y donde se acaban bajo la cruel dictadura, las contemplaciones, todo el baile humano y negociación. 

Los socialistas son unos dictadores y enemigos de España, que ya destrozaron, y viven de la receptación, de tomar el dinero robado a los demás, según su propia administración. Reparten muy bien, pero solo entre ellos y quitándoselo a los demás, convencidos de que el dinero público no es de nadie, como asegura Carmen Calvo. Viven del caciquismo, del desfalco y el chantaje. Veamos los viejos sindicatos que ya estaban cuando la guerra. UGT y CC.OO. Puente entre el socialismo y el comunismo, si les hubiera ido mal el negocio, ya no lo mantendrían. El sindicato socialista, UGT, tiene 130 años. Ahora están comprados mejor que nunca, por el gobierno criminal, lo defienden a capa y espada, en vez de defender a los trabajadores, tras traicionarlos, y por lo que se hicieron sindicalistas. ¿Se puede conseguir mayor ejemplo de corrupción y robo que nace de este gobierno nauseabundo?

El social-comunismo, para mayor desgracia en el poder, como gobierno de coalición, ha atacado con sus leyes liberticidas y antinatura a nuestras vidas; ha acabado con la cultura de siempre, y las tradiciones, con nuestras ideas, referencias y sentimientos, para que puedan dominarnos a placer; para que puedan matarnos de hambre y torturas, que son los primeros resultados del comunismo. Ha cambiado el ambiente a peor en todos los órdenes. Han conseguido que sea normal lo que no lo es, como la corrupción y cualquier delito o pecado, en el que no creen. No ha quedado ni un solo rincón en el que no haya inyectado el virus venenoso de su mentira, ni hayan dejado en España piedra sobre piedra, con su toxicidad, como hacen con la memoria histórica demoliendo el patrimonio histórico cultural. Les falta derribar la gran cruz más grande del mundo en Cuelgamuros. Y no será por el empeño incesante. La sombra del mal es infinita. La sombra del mal ciega a demasiados tuertos ya fanatizados. No les falta gente que les vote, convencidos o no, y muchos con el simple deseo de que no gane la derecha.

Es sangrante la manipulación de las relaciones humanas, la de criminalizar a los hombres y excitar a las mujeres contra ellos. Como resultado vino un aumento de la violencia jamás conocido que ellos llaman de género. En el lenguaje son tan animales como en los actos. La violencia no tiene género. Habría que empezar porque estos iletrados sinvergüenzas, supieran lo que es "género", pero eso ya es harina de otro costal. Toda corrupción empieza por el lenguaje, y es aterrador oír en gente de derechas, el lenguaje de las izquierdas. Sangrante es también la manipulación y adoctrinamiento de nuestros menores. En programas de TV, series, dibujos animados y cuentos infantiles se les plantea de manera constante y sibilina que el valor del cuerpo, su genitalidad, no define nada. «Son» lo que sienten. Los sentimientos fluyen, varían. Hoy siento esto, mañana aquello. No hay nada firme. No hay verdad. Todo se relativiza constantemente. Si no hay nada estable, no tengo donde apoyarme. Si no tengo identidad, ¿Quién soy? Es mover los fundamentos de la persona para derribarla, el destierro al llevarla a otro medio, como arrancar un árbol y transponerlo donde pueda dejar de existir, bajo la tea del incendio de España por sus enemigos.

No surgirá una revolución violenta y armada, porque a los revolucionarios que la empezaron se les acabaría el chollo de vivir del cuento; de ese cuento contado por un idiota; tampoco estallará otra guerra civil, como la anterior, porque los que la empezaron quedaron bien escarmentados, al perderla. Esto no es seguro porque sólo los necios perseveran en sus errores, y después de tantos años les surgió un odio feroz que nadie entiende, salvo que sacan mucho dinero de él. También se puede crear una república de derechas, y no sería mala idea. ¿Por qué las repúblicas tienen que ser de izquierdas, sabiendo cómo terminan? Podían empezar la movilización los que están aguantando por mantener la paz, ya llevarían la ventaja de que el primero, da dos veces, pero eso es tan difícil como tocar con un dedo en el cielo. Son anti revolucionarios. Sólo ejercen el derecho del pataleo y expresan la verdad. Esa verdad que según George Orwell, dicha en una época de engaño universal, es un acto revolucionario.

Por eso los problemas nacionales, ya son internacionales. El globalismo, el NOM, (Nuevo Orden Mundial) es de extrema izquierda en carne viva, como el Grupo de Puebla, de la ciudad mexicana, es el comunismo total, enmascarado para engañar, el "mundo feliz" de Aldous Huxley. Iros con la patraña de vuestra novela al infierno. La broma de la globalización está en manos de los más poderosos del mundo, como es Xi Jinping, presidente de China, que es el primero del Foro de Davos. (Foro Económico Mundial, -FEM-) Se trata de crear el poder mundial en la sombra, de manera que no sepas quién te asesina, o al menos todo apunta a esos fines. Cuando se hizo presidente, y de qué manera, Pedro Sánchez, con el primero que se entrevistó y en secreto fue con el magnate George Soros, de la indicada camarilla. Es terrorífico pensar que el comunismo de China envuelva al mundo entero, y haya un solo gobierno mundial como pretenden. Eso es, el comunismo extendido a toda la tierra, sueño eterno de los comunistas. El nuevo orden, pues siempre le ponen el nombre de nuevo, o de progresista, o cualquier término engañoso, a todo lo que tocan. Ejemplo: "el hombre nuevo del marxismo". Y es nada más que un eslabón del sistema criminal, un robot, sin sentimientos, y memoria; sin entendimiento ni voluntad, o sea, sin alma. Ese es el hombre "nuevo" que venden, de cebo, como en todos los argumentos marxistas. O cuando llamaban, "nueva realidad", a la pos pandemia, después de traernos el virus letal comunista y gestionarlo mortalmente, sin compasión. Todo un engaño en el que tanta gente cae, como las moscas en la miel. Eso, simplemente no es el bien, ni la verdad; es nada más que el mal y la mentira.


"La forma inteligente de mantener a la gente en un estado de pasividad y obediencia es moverse siempre en el espectro de opiniones respetables, con enorme debate dentro de ese espectro, incluso animando a las personas más críticas y disidentes. De ese modo, la gente tiene la sensación de tener un pensamiento libre, mientras que, en realidad, sólo se refuerzan los preceptos del sistema dentro de los límites del debate acordados". Noam Chomsky