Benditos,
vosotros que sufrís en soledad.
Benditos,
vosotros que vivís sin libertad.
Benditos,
vosotros que no descansáis en paz.
Benditos,
vosotros que nacéis para ayudar.
Desde la oscuridad,
un pensamiento brillará,
una luz de ilusión
envolverá
el corazón.
Benditos,
aquellos que no se rinden jamás.
Benditos,
aquellos que han aprendido a soñar.
Benditos,
Aquellos que no se quieren callar
Benditos
aquellos que descubren la verdad.
En la mente de Dios,
todos tenemos un lugar,
no importa el color,
no importa la edad,
ni el bien, ni el mal.
Benditos,
Todos los seres de la Eternidad.
Benditos,
Animales, plantas, piedras, aire y mar.
Benditos,
Sensaciones, devociones, un altar.
Benditos,
Caminos de fé y de esperanza.
Una voz hablará
desde el fondo del alma,
alboroza tu ser,
Rreconcíliate,
es tiempo de creer.
Benditos,
los que no pueden dejar de llorar.
Benditos,
los que no encuentran y vuelven a buscar.
Benditos,
los que abrazan para perdonar.
Benditos,
los que, aun tristes, intentan cantar,
Una lluvia de amor,
un arcoíris de resurrección,
sanará tu dolor,
calmará tu temor,
En el Templo del Amor.
Benditos,
quienes se crecen en la adversidad.
Benditos,
quienes tropiezan y vuelven a andar.
Benditos,
quienes despiertan a su realidad.
Benditos,
quienes no tienen pero siempre dan.
Letra y Música:
Angel Luis Fernández
Entradas
.jpg)
0 comments :
Publicar un comentario