EL Rincón de Yanka: VA A SER LA NAVIDAD... VENID

inicio














miércoles, 28 de noviembre de 2007

VA A SER LA NAVIDAD... VENID



DOMINGO GARCÍA CRIADO


VA A SER LA NAVIDAD... VENID
Se ha arrodillado el tiempo...
para adorar al misterio.
Va a ser la Navidad:


Éxtasis, sublime y quietud insondable.
Caricia eterna,
mil veces repetida y una vez expresada para siempre;
universal expectación y ansiedades colmadas;

Navidad... actualidad celeste y novedad terrestre;
encuentro indescriptible con Dios en carne y hueso;
hechizado silencio en que resuena LA PALABRA eterna;
presencia diminuta pero plena en el tiempo.
Navidad... idilio transparente entre fe y anhelo;
comunión enajenada entra seres redimidos;
fascinación sin límites;
puro embrujo divino en nuestra historia.

Va a ser la Navidad... Y ésta es la hora...
la hora de los siglos, la hora del amor, la hora cero
tan soñada por Dios, como anhelada
por nuestra pobre humanidad perdida.
Esta es la hora en que la noche poblada de secretos,
hará estallar la luz en sus entrañas.
Esta es la hora en que una mujer, virgen,
se siente ya más madre, al borde de la vida.

Esta es la hora en que María
está a punto de reventar a mares
su joven feminidad y su madura maternidad divina.
Esta es la hora en que en el rítmico latido de la tierra
Dios nos ha dado el todo de sí mismo:
un beso tan humano tan tierno y tan sencillo como un niño.

Va a ser la Navidad
un algo tan divino, tan tenue, tan sutil, tan pobre y tan sublime,
que solo los humildes lo perciben
en el más fino fondo de su espíritu.
Va a ser la Navidad, y qué armonía
la de un universo en danza... en danza enamorada...
en danza apasionada fascinada, endiosada...
y un niño silencioso dormido, cobijado en la suave quietud del regazo materno,

Va a ser la Navidad ...Y yo os invito
a levantar con las estrellas la copa de la vida
para brindar por la infinita paz del universo.
Va a ser la Navidad... Y yo os sugiero
que elevéis vuestros ojos de hombres buenos
más allá del capricho y del deseo
para posarlos luego en la cima polar de la esperanza.
Vivir la Navidad es contemplarla.
Venid humanos todos, desde los cuatro puntos cardinales.
Venid a contemplar lo insospechado...
el más grande espectáculo del mundo
envuelto en sencillez y transparencia.

Venid a contemplar la visión ancestral de los Profetas;
lo que fue para ellos ilusión, expectación... un sueño,
es hoy para nosotros realidad y vida.
Venid a contemplar el carnaval de Dios:
un baile sin disfraces, lleno de luz, presencias y mensajes.
Venid a contemplar el designio divino.

Vivir la Navidad es acogerle.
Venid humanos todos, desde los cuatro puntos cardinales.
Venid a recoger el DON DEL HIJO,
el regalo más puro y más valioso que jamás se haya hecho.
Venid a recoger la promesa salvífica
fielmente mantenida por los siglos. ,

Venid a recoger la paz... la paz a manos llenas,
la paz que irá poblando los pequeños rincones de la tierra.
Venid a recoger la libertad soñada
que hoy mismo se os ofrece como una canción nueva.

Venid a recogerla, mas venid liberados:
de sombras y mentiras, de palabras vacías,
de orgullo y de egoísmos, de juicios y prejuicios,
de vidas sin sentido, de horizontes perdidos
Venid a recoger esa llama encendida.
Vivir la Navidad es también hacer fiesta.
Venid humanos todos, desde los cuatro puntos cardinales.
Vivid la Navidad y haced la fiesta de la ilusión del hombre.
que no sólo es belenes, turrones, villancicos.

Vivid la Navidad y haced la fiesta
de los brazos tendidos y abiertos para el pobre.
Vivid la Navidad y haced la fiesta del mendigo sin nombre
poniéndole una hogaza de amor entre las manos.
La Navidad es fiesta
cuando a un desorientado se le muestra un camino;
cuando a un inmigrante, solo,
se le ofrece la patria de un hogar sencillo;
cuando un portador del SIDA se ve y se siente acogido;
cuando un marginado entra en un corro de amigos.

Vivid la Navidad y haced la fiesta
de hacer callar las armas,
de orillar para siempre las sangrientas batallas.
Vivid la Navidad y haced la fiesta
dejando una caricia en las cosas pequeñas.

Vivid la Navidad y haced la fiesta,

una fiesta cristiana,
orando a vuestro Dios con la oración del alba,
cantando al Niño Dios vuestra canción del alma.


Ángel Esteban González