EL Rincón de Yanka: LIBRO "EL CABALLERO VERDE": LA HISTORA DEL CABALLERO SANCHO MARTÍN por JAVIER LORENZO

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viernes, 6 de enero de 2023

LIBRO "EL CABALLERO VERDE": LA HISTORA DEL CABALLERO SANCHO MARTÍN por JAVIER LORENZO

 

EL

EL CABALLERO VERDE

JAVIER LORENZO

Hace más de 900 años, hubo un caballero español que luchó en Tierra Santa. Se llamaba Sancho Martín y gracias a sus actos de valor y a su llamativa indumentaria se ganó el sobrenombre de “Caballero Verde” y fue admirado incluso por Saladino.
Novela histórica basada en la vida de Sancho Martín, un aragonés de carne y hueso, que en el siglo XII viajó al otro extremo del Mediterráneo, a Tierra Santa, para combatir en las cruzadas y llegó incluso a entrevistarse con Saladino. El sultán pidió hablar con este hombre que siempre vestía de verde (se le conocía como «el caballero verde») y su nombre aparece tanto en las crónicas cristianas como en las musulmanas por sus actos de valor y estrategia.
Además, estamos ante un thriller con dosis de novela de aventura, que permite tratar otros temas como la unión del Reino de Aragón con el Condado de Barcelona, el nacimiento de Cataluña, la tercera y cuarta cruzadas, y todo esto dentro de una trama de tráfico de reliquias.

No pasaba un día sin que los cristianos 
hicieran dos o tres salidas contra los sarracenos. 
Los comandaba un caballero de España 
que estaba en la ciudad de Tiro 
llamado Sancho Martín. 
Lucía armas verdes. (…) 
Los turcos lo llamaban el Caballero Verde. 
Llevaba las astas de un venado sobre su yelmo.

«HONOR Y DIGNIDAD»
—¿Y cuando tomaré posesión de todo ello? —pregunté con cierta ingenuidad.
—Cuando se decida y lo merezcas. Mientras tanto, honor y dignidad —. 
No hay mayores tesoros para un hombre. Haz cuanto puedas para conservarlos. Lo demás vendrá por añadidura. Que razón tenía. [Pág. 19]
El asedio de Tiro tuvo lugar del 12 de noviembre de 1187 al 1 de enero de 1188. Un ejército comandado por Saladino realizó un asalto anfibio a la ciudad, defendido por Conrado de Montferrat. Después de dos meses de lucha continua, Saladino despidió a su ejército y se retiró a Acre. ¿Que ocurrió para que el poderoso Saladino se retirara del asedio a Tiro?
La pelea fue dura. El ejército de Saladino tenía diecisiete máquinas de asedio que atacaban constantemente los muros de la ciudad; mientras que los barcos de los cruzados, llenos de arqueros, ballesteros y máquinas de lanzamiento de piedras, acosaban al ejército musulmán.

Todos los ataques de Saladino fallaron, y el asedio se prolongó, con ocasionales reuniones de los defensores, liderados por un caballero español llamado Sancho Martin, mejor conocido como el «caballero verde» debido al color de sus vestiduras. Se decía que su valentía y habilidad causaban admiración tanto en los ejércitos cristianos como musulmanes, y particularmente en Saladino. Se dijo que Saladino le ofreció muchas riquezas si se convertía al Islam y luchaba en su ejército. Sin embargo, se negó y siguió liderando los ataques cristianos contra el ejército musulmán.
Hasta aquí lo que nos dice la historia, que la verdad no es mucho. Pero tenemos la suerte de contar con un gran periodista y escritor como es Javier Lorenzo que ya destacó con sus dos novelas anteriores ambientadas en la Cantabria del siglo I d.C., y tituladas El último soldurio y Las guardianas del tabú. Esta vez nos vamos al siglo XII.

La novela se asienta sobre tres patas muy importantes como son que Sancho Martín es un personaje histórico aunque poco conocido; sobre la Tercera Cruzada y el encuentro con Saladino, y el tráfico de reliquias como la tercera pata.
La novela ganadora del XIII Premio Logroño de Narrativa se presentó bajo la plica El caballero de la Santa Cruz y publicado como El caballero verde es una novela histórica basada en la vida de Sancho Martín, un aragonés de carne y hueso, que en el siglo XII viajó al otro extremo del Mediterráneo, a Tierra Santa, para combatir en las cruzadas y llegó incluso a entrevistarse con Saladino al que derrotó en dos ocasiones. El sultán pidió hablar con este hombre que siempre vestía de verde (se le conocía como «el caballero verde») y, por si fuera poco, luce una cornamenta de ciervo en el yelmo. No sólo lo dicen las crónicas. Así se aprecia en la miniatura que ilustra esta reseña, obra que el iluminador de manuscritos francés Jean Colombe hizo en el siglo XV; y su nombre aparece tanto en las crónicas cristianas como en las musulmanas por sus actos de valor y estrategia.

Estamos ante un thriller con dosis de novela de aventuras, interesante, divertida, sorprendente e inteligente en la que el autor ha sabido rellenar los huecos que la biografía de Sancho Martín tiene, con una gran imaginación que se complementa perfectamente con los datos históricos que disponemos de aquella época.
La novela también permite tratar otros temas como la unión del Reino de Aragón con el Condado de Barcelona mediante la boda de la reina Petronila y el conde Ramón Berenguer IV, el nacimiento de Cataluña, la tercera y cuarta cruzadas, y todo esto dentro de una trama de tráfico de reliquias.

Ni rey ni papa, ni noble ni obispo, ni clérigo ni bufón. Nadie sino este pecador es el culpable de las líneas que ensuciarán estos gastados y repulidos pergaminos. Y nadie, sino yo, las blandirá con tanta saña, procurando que cada una de ellas sea un latigazo sobre mis viejas y maltrechas carnes. Sobre esta alma marchita y perdida. 

Ahora sólo soy un monje y el sayal del hábito —o la gonela, como decimos en Aragón— me causa más llagas que las junturas de una armadura; la casulla que cubre mi cabeza presiona mis sienes con más fuerza que un yelmo germano; el breviario me es tan pesado como un escudo de hierro y hasta el rosario francés, con sus pulidas cuentas de madera de nogal, me resulta más difícil de manejar que una lanza de diez codos. Y sí, lo admito orgulloso: con gusto cambiaría ahora mismo el crucifijo que cuelga sobre mi pecho por una espada. Sobre su cruz de acero rezaría mis plegarias mucho más a gusto y bravamente que en las interminables misas y letanías a las que por fuerza estoy sometido. 

Maldito sea el padre Telmo. 

Me llamo Sancho Martín y quizá mi destino ya estuviera escrito desde el día en que nací. Huérfano desde el momento en que llegué al mundo —mi padre, muerto en una algarada contra los moros; mi madre, a resultas de mi parto—, una de las primeras historias que me contaron fue la de que la concha de vieira con la que el sacerdote pretendía bautizarme se le resbaló de entre los dedos y se hizo añicos contra el suelo de piedra de la catedral de Jaca.

'El caballero verde' de Javier Lorenzo

El Caballero Verde - Javier... by Sofia Darthes