♥ NADA MÁS ♥

HÁBLALE BAJITO AL PADRE
QUE ÉL NOS ESCUCHA EL ADENTRO
COMO UN ROMPIENTE MOTRIZ
DE DELICADA TERNURA
Y SERENO SOL DEL VIENTO.

Cuéntale de tus zozobras.
Comulga con sus Raudales de gratitud infinita.
Como ÉL hace en sí mismo.
Cada vez que lo susurra tu cansancio incalculable.

¡LEVANTA LA MELODIA!,
QUE CRISTO TIENE EN SUS NOTAS
LA SINFONÍA PERFECTA
PARA QUERERTE INSONDABLE
Y AMARTE HASTA INFINITO
LLEVÁNDOTE CON SUS ÁNGELES
POR DONDE BROTAN LOS RÍOS
CUANDO TÚ LE LLAMAS... PADRE
O CADA VEZ QUE EN ÉL CANTAS.
CUANDO TE SIENTES CANSAD@
Y DESPUÉS,
VAS A SU VIDA
Y EN ÉL
REFUGIAS AL ALMA COMO LEÑO DE SU SER
EN LA HOGUERA DE SU MADRE.

Refúgiate entre sus brazos.
Arrúllate entre su CALMA.
Despójate del cansancio.
Y bébete sus plegarias.

TÓMALE CON SUS REMANSOS
SANÁNDOTE CON SU ALMA.

¡ABANDÓNATE EN SU MIEL!,
¡ZÁMBULLETE ENTRE SUS AGUAS!,
¡DÉJATE AMANECER!,
¡DATE CON ÉL TODA EL ANSIA
DE CUANDO TE DA EN LA SED
LOS ALBORES DE SU ALMA!;

Después, desciende en su ser
Ascendiéndote las ascuas.
Donde Dios es el vergel
De delicadas fragancias
Para sentir que con ÉL
Nada más nos sobra o falta.

M. García