«Espera la Virgen pura»,
Francisco Vaquerizo
Espera la Virgen pura,
el momento ya inminente,
en que dé a luz al Infante
que ha concebido en su vientre,
porque va a nacer el día
veinticuatro de diciembre.
En la grávida doncella[1]
un gozo especial se advierte
y hay un brillo en su mirada
que sobrepasa con creces
la belleza y el candor
que imaginarse uno puede.
Espera la Virgen pura,
el momento ya inminente,
en que la familia humana,
sumida en sombras de muerte[2],
con la venida del Niño,
la claridad recupere
y se sienta hija de Dios
y heredera de sus bienes.
Espera la Virgen pura,
el momento ya inminente,
en que aparezca en la tierra
el que será Rey de Reyes
y el que abra al hombre las puertas
de las moradas celestes[3].
Mientras llega ese momento,
la esperanza la mantiene
en una íntima vigilia
de ternuras y quereres,
siempre atenta a los anuncios
que a su Niño se refieren
porque sabe a ciencia cierta
que, ya en el mismo Pesebre,
será preciso que empiece
a cumplir con sus deberes.
Gozosa mira a José,
ensimismada y silente,
mientras piensa que su Niño
llenará el globo terrestre
de amor e instaurará un reino
que durará eternamente.
[1] grávida doncella: bella formulación; grávida vale ʽencinta, embarazadaʼ.
[2] sumida en sombras de muerte: alude al pecado y, por extensión, a todo el mal que se extiende por el mundo. La antítesis sombras / claridad es evidente.
[3] el que abra al hombre las puertas / de las moradas celestes: Cristo, con su muerte y resurrección, redimirá al género humano.
Camina la Virgen pura
de Egipto para Belén
y a la mitad del camino
pidió el Niño de beber.
- No pidas agua, mi vida,
no pidas agua, mi bien,
que los ríos bajan turbios
y no se puede beber.
Allá arriba en aquel alto,
hay rico naranjel
y el hombre que lo cuida,
es un ciego que no ve.
- Ciego dame una naranja,
pa este niño que trae sed.
- Coja usted las que usted quiera
las que sea menester.
El Niño como era niño
no dejaba de coger
las que cogía la Virgen
volvían a florecer.
Apenas se va la Virgen
el ciego a ver.
¿Quién ha sido esa señora?
¿Quién ha sido esa mujer?
que en los ojos me ha dado luz
y en el corazón también.
Ha sido la Virgen Pura
que va de Egipto a Belén.
Guitarra y voz: Joaquín Díaz
Guitarra: Jesús Angel Martinez
Diana Navarro - Brillará (Villancico)
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