PUDIMOS. ¡ESPAÑA CAMPEÓN!

ESPAÑA CAMPEÓN DE LA EUROCOPA 2008

FERNANDO TORRES Y MARCOS SENNA,

LOS QUE NO PODÍAN FALTAR

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LUIS ARAGONÉS SUÁREZ

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DOMINGO 29 DE JUNIO DE 2008.

España, la mejor.

Campeona de la Eurocopa en Viena. Histórico. Precioso. Increíble. Uno de los mayores hitos del deporte español por inesperado, deseado y por la forma. La España del toque, del gusto por el fútbol y de la elegancia se ha impuesto sobre Alemania en una final en la que nunca perdió el estilo. Torres cristalizó con su gol el sueño perseguido desde hace décadas. Ya se puede decir bien alto: campeones.
Con todo merecimiento. Con justicia. Casillas levantó con sus manos el trofeo que España merecía. Brilló la codiciada copa en el cielo de Viena. Se la entregó Platini, presidente de la UEFA, y ex jugador francés que en 1984 impidió a la roja alcanzar el trofeo en la final.
Ya está. Los complejos fuera. La selección se desquitó de todas las frustraciones y heridas del pasado. La Eurocopa de 1964 ya tiene su versión actual: la de 2008. En color y en versión moderna.
Porque España se marcha del campeonato con todos los partidos ganados. Como equipo más goleador. Con el pichichi Villa en lo alto de la tabla. Y con una lección de juego que por definición converge en una sola palabra: fútbol. Fútbol en esencia y en concepto.
La España de Luis pasará a la historia por su preciosismo. Por su belleza plástica. Y porque, como un torbellino, ha arrasado a todo el que se le ha cruzado por el camino sin reparos. Desde el primer partido hasta el último.
Tributo a la exquisitez
Ni el inicio arrollador de Alemania intimidó a España. Alentada por la mayoría numérica en las gradas, con mosaico incluido, la selección germana apretó en los primeros compases. Un espejismo que le alcanzó a los germanos sólo 10 minutos. Porque España fue siempre mejor que su rival. Entregados los germanos al fútbol directo y al juego subterráneo comandado por Ballack (¿otra final perdida?), el equipo de Luis supo aguantar las oleadas. Y desplegar el abanico de recursos con el que ha hecho del fútbol un tributo a la exquisitez.
En la tierra de Mozart, España ha completado una actuación magnífica. Brillante. Entró con dudas y sale reforzada y con la consolidación de un estilo que debe convertirse en tradición. La España de los pequeñitos es un gigante. La España de la ilusión y de la juventud, del desparpajo y la mentalidad ganadora, es una realidad. El final del ciclo de Luis es el principio de una historia que, con letras doradas, debe convertir a España en lo que se merece. En una campeona.

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0 - Alemania: Lehmann; Fiedrich, Mertesacker, Metzelder, Lahm (Jansen, m.46); Frings, Hitzlsperger (Kuranyi, m.58); Schweinsteiger, Ballack, Podolski; Klose (Mario Gómez, m.79).
1 - España: Casillas; Sergio Ramos, Puyol, Marchena, Capdevila; Senna; Iniesta, Xavi, Cesc (Xabi Alonso, m.63), Silva (Cazorla, m.66); Torres (Güiza, m.78).
Gol: 0-1: m.33: Torres aprovecha un pase entre líneas de Xavi, supera a Lahm y la salida de Lehmann.
Árbitro: Roberto Rosetti (Italia). Amonestó a los alemanes Ballack (m.42), Kuranyi (m.87) y a los españoles Casillas (m.42), Torres (m.74).