LA SOMBRA DEL PADRE
HISTORIA DE JOSÉ DE NAZARET
EL MÁS SANTO DE LOS SANTOS
Querido Juan, En la «SOMBRA DEL PADRE»
has puesto al descubierto la luz
del Protector de Jesús y de su Madre Inmaculada…
Nos has ayudado a entender a san José…
Dios te lo premiará…
Stefan Cardenal Wyszyński
Primado de Polonia
El autor emprende la formidable tarea de rehacer no solo la vida del San José, San Patriarca, sino también el entorno en el que se desarrolló.
Jan Dobraczynski es el escritor polaco más conocido de nuestro tiempo. Con "La sombra del Padre" reafirma su calidad de narrador y constructor de novelas históricas. En esta historia novelada de José de Nazaret, emprende la formidable tarea de rehacer no solo la vida del Santo Patriarca, sino también el entorno en que se desarrolló: las dificultades que presentaba el ambiente familiar, impregnado del exigente espíritu de raza; el clima de tensión con el que los judíos esperaban la venida del Mesías; las peripecias políticas de la corte de Herodes el Grande, con sus intrigas, sus degeneraciones y sus crímenes. Para todo esto, se vale de las fuentes escriturísticas y del vasto material literario de la época descrita."Me siento profundamente edificado por el tacto y la finura con la que Vd. ha sabido acometer un trabajo tan difícil y apasionante", son palabras que le dirigió el cardenal Wiszynski.
Jan Dobraczynski (1910-1994) nació en Varsovia, donde realizó sus estudios universitarios. Durante la Segunda Guerra Mundial combatió como capitán de caballería hasta que fue herido y se dedicó a actividades políticas clandestinas. Fue capturado durante la insurrección de Varsovia y enviado a Belsen y otros campos de concentración. Cuando fue liberado, volvió a Polonia y se dedicó a la escritura. En 1947 viajó a Bélgica, Francia e Italia y se entrevistó con Papini, Ungaretti, Mauriac y Cesbron. En los años 80 fundó un movimiento patriótico de inspiración cristiana. Fue un autor muy fecundo y publicó novelas sobre la Guerra Mundial, de argumento religioso y contemporáneo, además de ensayos y reportajes. Tanto su calidad literaria como la acogida del público hacen de él uno de los principales autores polacos contemporáneos. Sus novelas se han traducido a 19 idiomas.
Ediciones Palabra ha publicado La sombra del Padre (19ª ed.),Y el rayo cayó por tercera vez(5ª ed.), San Antonio de Padua(7ª ed.), Magdalena (5ª ed.) y Bajo las murallas de Viena.
Relato de la historia novelada de san José. Los preliminares comienzan en Belén, cuando sabe con claridad que es el cabeza de la estirpe de David. Ante un posible riesgo de ser asesinado, su familia le aconseja que se vaya a vivir a otro lugar. De modo natural conocerá a Zacarías e Isabel y será esta quien le hable de María, que vive en Nazaret. De Judea a Galilea hay un buen trecho, pero no deja de estar en Israel. Se instala profesionalmente allí y entabla amistad don Cleofás, a cuya sobrina María ha conocido en el pozo al buscar agua. Se hacen novios, aceptando José, las premisas de María. Un día María desaparece, se ha ido sin avisar a José a cuidar de Isabel, que en su ancianidad está esperando un hijo. El relato respeta con delicadeza todos los hechos narrados en los Evangelios y el autor, suple con su piedad y conocimiento del marco religioso geográfico e histórico los amplios espacios que quedan si narrar desde que José se enamora de María hasta la vuelta de Jerusalén a Nazaret cuando Jesús tiene doce años. La precaria salud de José en la etapa final del libro, deja abierta la posible muerte en pocos años de José. El elogio del Cardenal polaco Wiszynski es una garantía, su lectura una delicia. El autor tiene derecho a discrepar de las vías seguidas por el autor para resolver las lagunas que la Sagrada Escritura no ha narrado y que son libres de interpretación, siempre que se respeten los datos cierto que sí nos han llegado.
José ha sido identificado por algunos teólogos como la sombra del Padre celestial. En el Antiguo Testamento, la presencia de Dios se identificó con una nube que hacía sombra y marcaba el lugar donde se levantaba “la tienda de Yahvé”. Ese era el lugar del encuentro con Aquél a quien no podían ver cara a cara y cuyo nombre no podían pronunciar. La sombra tenía una connotación de protección casi maternal, recordándonos que Dios es tanto Padre como Madre.
El Padre es el Misterio insondable, el Principio de todo, el Silencio que engendra al Verbo. Si José es la sombra del Padre, se justifica su silencio, es parte de su esencia. Podríamos decir que en José, está la presencia escondida de Dios Padre.
Reflexionemos en estas semejanzas entre José y el Padre celestial. A Dios nadie puede verlo nunca, José pasa casi desapercibido. El Padre es silencio eterno y nosotros no contamos con una sola palabra que haya salido de labios de José. José desplegó su creatividad en su oficio de artesano, mientras que el Padre es el artesano Creador del universo. José cuidó de la Sagrada Familia así como el Padre cuida de todas sus creaturas. Jesús los llamó por igual “abbá”.
En su sencillez y humildad, José nunca pretendió y quizá nunca fue consciente de personificar al Padre del cielo, pero con plena consciencia y decisión asumió la paternidad terrena de Jesús.
PROPÓSITO O TAREA
En oración, pidamos a Dios Padre la gracia de conocerle mejor a través de la figura paterna de José y de nuestro propio padre en la tierra.
ORACIÓN A SAN JOSÉ
Salve, custodio del Redentor y esposo de la Virgen María
A ti Dios confió a su Hijo, en ti María depositó su confianza,
contigo Cristo se forjó como hombre.
¡Oh, bienaventurado José!
Muéstrate padre también a nosotros
y guíanos en el camino de la vida.
Concédenos gracia, misericordia y valentía
y defiéndenos de todo mal.
Amén.
San José, sombra del Padre
0 comments :
Publicar un comentario