EL Rincón de Yanka: POEMAS "KAF", "ETERNIDAD" Y "DE MIS PALABRAS" por HÉCTOR CACHO

inicio














sábado, 8 de julio de 2023

POEMAS "KAF", "ETERNIDAD" Y "DE MIS PALABRAS" por HÉCTOR CACHO

POEMA KAF
HÉCTOR CACHO

De una urdimbre de epílogos esta hecho el tiempo
que apura su paso para enmudecerme,
un estambre ata mis venas
al polvo que me desaparece.
De mis grietas salen las palabras
que empujan mi voz en pedazos,
una daga refugiada en mis fronteras
escribe mi nombre sobre la tierra,
pues no echo raíces cuando caigo en el camino,
prefiero ser la semilla que vuela
en el pico de un ave que huye.
En el peligro de las horas recibo mi salario
hecho de gotas de penitencia
como un roedor sediento frente al rocío prohibido.
Tengo agotada la fe en los últimos misterios
que se revuelven detrás de mis dientes,
cierro la boca para simular un presidio
donde la vida quede lejos de la ilusión.
Bebo el tránsito de cada segundo
como si hubiese acabado la lluvia en el mundo.


ETERNIDAD 
HECTOR CACHO

Duermo con mis impurezas 
y en el amanecer de los vientos 
que empujan mis talones me llevo 
y me traigo como si naciera mil veces, 
hecho de los deseos desquiciados 
de una noche de amor contigo. 
Reclamo los solsticios que me sugieren 
tenerme para no sucumbir en la tierra 
que traga lo que devora. 
Nadie escucha el gemido de la desilusión 
en el amor inventado para sobrevivir. 
Me convierto en el presente para recibir 
tu cuerpo cristino de mujer, descendido de la cruz, 
aunque en el horno arda mi pasado con su resurrección.
Lleno de amor tus orillas cuando mis ojos 
te buscan entre el cielo y la herida de mis pies 
que quieren encontrarte. 
Me pongo de pie para ver tu luna llena 
en mis ojos aunque el cielo se clausure 
por quererte sin miedo a morir. 
No hay vida después si no estás en mi cansancio, 
hay salvación si tu sangre se derrama dentro de mí 
y para ser eternos dejo caer las promesas 
en el tiempo que termina. 
Tenerte en lontananza es preferible 
que verte con el silencio de mis ojos de añoranza.


DE MIS PALABRAS 
HECTOR CACHO

Nada es invisible cuando escribo 
y mis ojos se vuelven luz de tormenta, 
remolinos de papel persiguiendo 
el rastro rebelde sobre la tierra. 
Las manos envejecidas agitan el bien 
y el mal sin miedo a la felicidad y a sus mentiras. 
La sed detrás de las lluvias 
y el hambre detrás de la carne 
no saben iniciar su epílogo. 
Mi palabra derrama su miel 
desde los cuchillos de mi cabeza 
hasta las raíces que me sostienen, 
me muevo como la realidad que gira 
hecha de trozos de humanidad. 
Las escaleras que me aupan al sótano 
del cielo me elevan para fundir mis ideas en el fuego.
El metal forja los muertos de la guerra 
y cada una de mis palabras, 
la santidad se muere en el poema 
que cabalga sobre la filosofía 
de un amante crucificado. 
En las playas de mi desembarco 
existo para ser los paréntesis 
que devoran pausas y puntos suspensivos. 
No quiero el signo que conspira contra mis versos, 
el amor y el odio gotean la vida como 
el síndrome de mi propia soledad 
y dialogo en el claustro donde se venera 
el verso abatido que se vuelve protesta.