VIRGEN DE CHIQUINQUIRÁ
DE MARACAIBO ZULIA VENEZUELA
Y RESUCITÓ
Los Chiquinquireños
Fue en una aldea judía,
donde comenzó la sagrada historia
de un niño que traería la Gloria,
la paz y victoria de una profecía.
Y aquella niña sería a quien revelaría
el gran plan divino y que iba a marcar el destino
que había prometido El Padre a María.
Madre, madre, bendita, bendita,
del cielo, infinita, sierva fiel del creador,
lámpara del redentor, madre abnegada
que a la cruz fue tras la sangre de Jesús,
siguiendo el paso del cordero,
aquella tarde, se abrió el cielo,
y hubo una luz, y hubo una luz,
que iluminó, y que tocó, su negro velo.
Fue el Mismo Dios que en su desvelo,
le reveló que aquel cordero,
en esa cruz triunfó en su anhelo,
de darnos la salvación,
de conseguir el perdón,
que Isaías, cual profecía le revelaría
por mandato de Dios.
Y ella entendió y agradeció
cual conoció que aquel llamado,
que el tercer día no moriría
y ascendería y viviría, porque sucedió.
Que resucitó,
resucitó, para su gloria,
resucitó, para su gloria, resucitó,
que para la historia, resucitó, y para darnos,
resucitó. Resucitó...(2)
Y hoy el Dios Trino, aun sigue vivo,
es el camino, la verdad y la vida.
Nuestro Señor, Nuestro Señor....
Que resucitó...
Y por siempre Jesús,
Su Palabra se cumplió,
en su Gloria subió,
nuestro Señor, aún sigue vivo,
Nuestro Señor, aún sigue vivo
y está en tu corazón...
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