GRITO DE GUERREROS:
Por @DefendVenezuela de @Rumbo_Libertad
Quiero sentir el miedo de estar frente a frente a la Libertad y vencerlo. Quiero sentir el sudor correr por mis brazos, obligándome a empuñar más fuerte mi escudo y resistir en el estrecho. Quiero los gritos de mis hermanos guerreros aturdiendo el sosiego latente y venenoso de la levedad.
¡Hagámosla morir, hermanos! ¡Sin contemplación!
Quiero correr y formar de nuevo el muro de escudos, quiero avanzar y que mis latidos opaquen las detonaciones malditas. Quiero sentir el cansancio, desgarrar mis piernas y mi cólera sanarlas al instante: quiero estar en medio de esta guerra interna. Quiero clavar el asta con mis hermanos: no hay Bastille, no hay Iwo Jima. No. Venezuela, te hablo de ella, caminante.
¡Corre y dile a los mortales, que dioses y semidioses de la guerra chocan las puntas de sus lanzas en celebración!
Quiero mi ropa ardiendo por el Sol incalmable. Quiero mis botas polvorosas. Mi cara blanca. Quiero que mi casco sofoque mi frente y que el “¡Aguanten!” de mi hermano escudero se vuelva un manantial. Quiero mi escudo abollado para repararlo por las noches. Tiene heridas como yo. Quiero abrazar a mi gente. Soy su escudo. Quiero cantar con mis hermanos alrededor del fuego.
“¡Soy un guerrero,
soy libertario,
soy un muchacho que ahora lucha por la Patria!
Por mi bandera,
por mis hermanos,
¡Si yo me muero nunca dejen de luchar!”
No quiero caídos. Pero si los hay:
¡Que haya una eternidad de fuego y horror para sus asesinos! ¡Mi pueblo sólo merece gloria y vida eterna! Quiero ser dueño de mi sangre. Quiero ser dueño de mi tierra. Quiero darles a mis hermanos guerreros lo que no tienen. Quiero restituir a mi familia como quiero hacerlo con mi Patria. Quiero que los venezolanos sean los primeros en su Nación. Nacimos para vivir y vivimos para que los nuestros puedan nacer. No otros.
¡La vida de un venezolano en Venezuela es la de un Rey en su trono! ¡Es el destino y aquél que se oponga… sobre su osadía caerán rayos de miseria!
Quiero ser león. ¿Para qué ballena o rinoceronte? Voy con mi manada y las huellas que dejamos son razón de alerta para cualquiera. Si hemos ido ya, van detrás. Si venimos, huyen. Quiero respeto a lo que significamos. Quiero que nos miren hacia arriba. Quiero que el Olimpo sea de los Titanes.
¡No hay celda que me dañe, ni que me detenga, cuando por la Libertad voy!
Quiero vivir. Pero para eso debo combatirlos junto a mis hermanos guerreros. Combatirlos y vencerlos; pulverizarlos. Jamás estrecharé manos con ustedes: tan sólo, una vez caídos, me las llevaré por la fuerza, y quitaré la sangre de héroes que llevan en ellas para regar las tierras de Venezuela, de donde nacerá una nueva legión de poderosos hombres símbolos de orgullo y temple libertario, cuyas creaciones durarán mil años.
¡GLORIA A VENEZUELA! ¡GLORIA A LOS CAÍDOS!
¡LIBERTAD O NADA!
“Los epitafios de los guerreros venezolanos son las primeras palabras de la Nueva Venezuela”
Gánate tu cédula, venezolano
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