COSMOS SIGNIFICA BELLEZA ORDENADA Y PROPORCIONADA

LUCAS 6, 39-45 

PARA EL PURO, TODO ES PURO

"Todo depende de cómo vemos las cosas y no de como son en realidad". Carl Jung "Hay cada vez más infelices que dejan de "VER" los reflejos infinitos de comunión de la "VIDA", para encerrarse sólo en el ensimismado mirarse al espejo de su propio vacío". Yanka¿QUÉ GANAMOS CON NAVEGAR HASTA LA LUNA SI NO SOMOS CAPACES DE CRUZAR EL ABISMO QUE NOS SEPARA DE NOSOTROS MISMOS? THOMAS MERTON

La palabra Cosmos significa belleza, bonito, es todo lo ordenado, por ello, cosmético es ordenar, poner elementos para verse bien. 

Esta palabra orienta para guiar la vida con éxito, quiere decir, ser ordenados, ser disciplinados y organizados, en un gran talento importante y necesario.

Dios es lo más bello de la existencia, por ser bello creo la belleza de la creación, el cosmos, cuya característica es lo tremendo del orden funcionando bien, todo lo hizo y lo hace bien, hasta nosotros los seres humanos, somos obra perfecta de Dios, aunque usted no lo crea.

Su prójimo, sus seres queridos, todos con usted son bellos. Somos bellos, así es lógico decir sobre la belleza de Jesús, su obra de salvación es bella, la locura de la cruz, es un tsunami de hermosura, de la divinidad.

Como un ser perfecto, su palabra, gracia y amor iba en esa tónica, orientando a los hijos/as, no perder la imagen y semejanza de Dios, para que así sea dio reglas, para la vida, practicar y tener una vida bella. Las normas recomendadas son: Cultivar un buen conocimiento, una actividad permanente, con un buen maestro, este es, porque nadie puede enseñar lo que no sabe, debemos aprender lo que se nos enseña y mucho más, otra orientación es, el reconocimiento personal que todos tenemos, faltas o errores, nadie tiene derecho a criticar al otro, siempre en la vida hay rasgos de virtud en el malvado y rasgos de maldad en el virtuoso, es decir, hay tanto malo en el mejor de nosotros y tanto bueno en el peor de nosotros. Somos ángeles y demonios, por lo tanto no es correcto, ni justo el señalar los defectos del otro, sin darnos cuenta sobre nuestros propios defectos.

Otro consejo es también: Los hechos hablan más que las palabras, o sea, “Por sus frutos los conoceréis”, un mismo maestro, solo puede demostrar su nivel por sus obras, no se puede escuchar lo que se dice, sino lo demuestra con sus hechos, por muy elegantes que sean las palabras, nunca se comparan a las buenas obras. O es decir, los cristianos deben distinguirse por su actuar, haciendo es como se vive, no hablando, sin embargo hay que decir: Lo mejor es ser consecuente, cumpliendo con lo que decimos, cuando lo hacemos así, la palabra se hace verbo, quiere decir que cuando la palabra de Dios la ponemos en obra, Dios se encarna en nosotros, similar, no igual al ministerio de Jesús, “La palabra se hizo carne”, significa que el mejor método de evangelización, es presentado en nuestras vidas al Jesús encarnado, quien vive y reina en nosotros y con nosotros. 

Además, otra regla es: Hablamos palabra con pensamiento de Dios, si tenemos en nuestro corazón a Dios, y los evangelios dicen: “De la abundancia del corazón, habla la boca”, si el árbol es bueno, da buenos frutos, si es malo, malos frutos (Mateo 12,33-35).

No es tarea costosa, si permitimos que el Espíritu Santo haga la obra en nosotros (as), y nos mantenga firmes en la fe, y podamos tener una mente y corazón puro, interpretando todas las cosas en el mejor sentido como está escrito: Para los puros, todas las cosas son puras, si no está la fe de Dios en sus vidas, su mente y conciencia son impuras. (Tito 1,15-16).

Obispo Medardo E. Gómez 

Iglesia Luterana Salvadoreña 

Domingo 20 de diciembre de 2015