EL Rincón de Yanka: UN GALLEGO EN EL CARIBE: ÁNGEL BOTELLO BARROS

Nacido en el pueblo de Cangas de Morrazo, Galicia, en 1913 y fallecido en Puerto Rico, en 1986, se ha convertido en los últimos años, en uno de los artistas que con más frecuencia aparece en las subastas de arte latinoamericano en Sotheby’s y Christie’s. Llamado con frecuencia y por diversas razones “el Gauguin caribeño”, su formación e itinerario artístico incluyen estudios de arte en la École de Beaux Arts, de Bordeaux y en la Academia de San Fernando, en Madrid.

Ángel Botello Barros nació en la pequeña localidad de Cangas de Morrazo, en Galicia, en el noroeste de España. Botello era uno de seis hijos (cuatro niñas y dos niños) de Ángel Botello Suárez, un hombre de negocios en la industria conservera de pescado y Bonis Barros del Amo. En la década de 1920 y, tras la quiebra de la empresa familiar, Angel Botello se trasladó a Burdeos, Francia con su familia y vivió allí hasta 1935. Mientras que en Francia, la madre de Ángel Botello quería fuese agricultor, pero él quería ser arquitecto. En Francia, la arquitectura se considera un arte en vez de una ciencia, y los estudiantes debían tomar cursos de arte. Botello y su hermano menor Manuel estudió durante cuatro años en la Escuela de Bellas artes , donde se graduó con honores y destacó en dibujo, pintura y modelado. En 1935, Botello regresó a España, donde solicitó y fue aceptado con una beca en la Escuela de Arte de la Academia de San Fernando en Madrid . Los pocos cuadros que quedan de la obra de los jóvenes Botello en Francia y España reflejan la ruptura inmediata de su formación estrictamente académica de los impresionistas y post-impresionistas conceptos y técnicas que dieron forma a su desarrollo.

La Guerra Civil española comenzó en 1936, lo que le hizo abandonar sus estudios para unirte a la republicana Ejército como cartógrafo. Luchó en la Guerra Civil española, junto con su hermano Manuel que murió en el campo de guerra. En 1939, la Guerra Civil española terminó con una victoria para el general Francisco Franco, que hizo imposible permanecer en España. Botello finalmente regresó a Francia para reunirse con su familia que se encontraban en un campamento de refugiados . La familia de Botello decidió abandonar Europa y pasar a la República Dominicana, donde fue calurosamente recibido. La comunidad de artistas Dominicanos lo incluyó como uno de los suyos, y muchas de las pinturas creadas en este momento se presentaron en el "American Art Exposición de América" en el Museo Riverside en 1940. Durante ese año, la familia de Botello viajó a Cuba, donde permanecieron durante ocho meses. A su regreso a Santo Domingo, sus pinturas fueron observados por el peruano embajador allí que invitó a Botello mostrarlos en Puerto Príncipe, Haití en 1944.

Después de su llegada a Haití, Botello se reunió Christiane Auguste quien se convirtió en su esposa y manager artístico. Después de su matrimonio con Christiane, Botello cambió sus planes artísticos para trasladarse a México para reunirse con el mayor artista mexicano Diego Rivera pero se quedó en Haití. Botello fue cada vez más reconocido y aclamado por la crítica.

Sus paisajes haitianos y estudios de figuras se consideran algunas de sus mejores obras. En Haití, Botello desarrolló su carrera artística de la madera y que está considerado el padre de las tallas de madera de Haití y enseñó a los artistas haitianos al respecto. Durante diez años, la familia de Botello vive en Haití hasta 1953, cuando se mudaron a San Juan, Puerto Rico , donde podrían residir permanentemente. Para entonces, ya había ganado el reconocimiento internacional en el mundo de las artes plásticas . Una pintura de Botello "Madre y niño" titulado apareció en un episodio de Discovery Channel Auction Kings durante la segunda temporada de la serie lograr un precio de 17.000$

Después de la familia Botello dejó Haití para ir a Puerto Rico en 1953, abrieron su primera galería de arte en el Hotel Caribe Hilton. Más tarde establecieron una segunda galería de arte en el Viejo San Juan.

Botello dijo que los colores claros y brillantes de los trópicos abrieron un mundo nuevo para él y estimulaban su creatividad. Desde la década de 1960 hasta su muerte en 1986 su obra se hizo más personal, ya que se enriquece con su nuevo tema favorito: sus tres hijos.

El profundo amor que sentía por sus hijos y su familia se refleja en sus últimas pinturas y esculturas. En 1959, Botello viajó a Rávena, Italia para aprender sobre la técnica del mosaico y produjo algunos mosaicos, pero abandonó rápidamente la técnica, convencido de haberla dominado.

A principios de la década de 1980, Botello comenzó una carrera artística doble en la pintura y la escultura. En 1985, Ángel Botello fue diagnosticado con cáncer de pulmón y sabiendo que su vida estaba en peligro, aceleró su ritmo de producción artística y nunca se rindió a su enfermedad. En el último año de su vida, a los 73 años, Botello produce la increíble cantidad de 22 esculturas en bronce de gran formato.

Los 33 años que Botello vivió en Puerto Rico considerado el período más prolífico de su carrera artística, en cuanto a la calidad de sus pinturas, de esculturas y la cantidad de obras de arte producidas y utilizadas medios artísticos. Este período artístico de Botello en Puerto Rico tiene una fuerte influencia en lo figurativo y surrealista, es el período de mayor reconocimiento. Sus obras de este periodo son conocidas en Puerto Rico como el " Estilo Botellian ", reconocido por sus caricaturas cifras, especialmente las niñas. Ángel Botello murió en San Juan, Puerto Rico el 11 de noviembre 1986 dejando tras de sí un impresionante legado de óleos, litografías , linóleos, serigrafías y esculturas de bronce . Su antigua casa situada en el Viejo San Juan de Puerto Rico ahora es una galería de arte donde se exponen sus pinturas, esculturas y obras de arte de otros destacados artistas puertorriqueños y internacionales.