I Cor 9,
17. Si lo hiciera por propia iniciativa, ciertamente tendría derecho a una recompensa. Mas si lo hago forzado, es una misión que se me ha confiado.
18. Ahora bien, ¿cuál es mi recompensa? Predicar el Evangelio entregándolo gratuitamente, renunciando al derecho que me confiere el Evangelio.
19. Efectivamente, siendo libre de todos, me he hecho esclavo de todos para ganar a los más que pueda.
20. Con los judíos me he hecho judío para ganar a los judíos; con los que están bajo la Ley, como quien está bajo la Ley - aun sin estarlo - para ganar a los que están bajo ella.
21. Con los que están sin ley, como quien está sin ley para ganar a los que están sin ley, no estando yo sin ley de Dios sino bajo la ley de Cristo.
22. Me he hecho débil con los débiles para ganar a los débiles. Me he hecho todo a todos para salvar a toda costa a algunos.
23. Y todo esto lo hago por el Evangelio para ser partícipe del mismo.
24. ¿No sabéis que en las carreras del estadio todos corren, mas uno solo recibe el premio? ¡Corred de manera que lo consigáis!
25. Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible.
26. Así pues, yo corro, no como a la ventura; y ejerzo el pugilato, no como dando golpes en el vacío,
27. sino que golpeo mi cuerpo y lo esclavizo; no sea que, habiendo proclamado a los demás, resulte yo mismo descalificado.
*************************************************
"Bienaventurados los pobres de espíritu,
porque de ellos es el Reino de los Cielos".
Mt 5, 3
*************************************************
"Dios no llama a personas preparadas ni a personas dispuestas.
Llama a personas pobres, y después, las prepara".
Porque todo es por Su Gracia. ¿O no?
.........................................
Solo una Iglesia pobre y humilde puede irradiar la bondad de Dios:
Porque “la verdadera y más grande pobreza en Europa, es la dramática imposibilidad de ser aceptados y amados, la falta de la experiencia de la bondad de Dios”.
Hoy las personas mueren por el hambre de testimonio personal de Dios por parte de los cristianos. Buscan un modo aparentemente pobre, pero honrado y apasionado de contar el propio camino con Jesucristo. Para este tipo de predicación en el “espíritu de adopción”, la “Iglesia más adulta, madura y vieja” debe liberarse de sus propios límites.
Por otra parte los cristianos en particular y la Iglesia están afectados por la tendencia a tener una mirada condescendiente y “de condena del mundo”, de la que deriva una falsa confianza en sí mismos y la falta de comprensión de la propia pobreza ante Dios (pero si hay que condenar y denunciar la injusticia, el mal, este sistema patogenizador, la mentira y la manipulación: no se puede ser ingenuo). Esta mirada es el obstáculo que está en la base de la obra de predicación de la Iglesia, y revela un tipo distinto de pobreza, es decir, la falta de comprensión de la dependencia de la misericordia divina.
Por esto es indispensable una profunda conversión y auto-evangelización de los cristianos mismos que deben ser capaces de ofrecer un testimonio humilde y apasionado de Cristo como Salvador.
"El testimonio de una Iglesia Pobre puede evangelizar
a los ricos que tienen su corazón apegado a las riquezas, convirtiéndolos y liberándolos
de esta esclavitud y de su egoismo".
(Puebla, Nº 1156)
0 comments :
Publicar un comentario