Libérame, Señor,
de los miedos que me impiden seguirte
y de todos los obstáculos
que yo mismo voy poniendo
para evitar escuchar
la llamada que me haces, sobre todo,
a través de mis hermanos pobres.
Señor,
tengo miedo de decir que tengo Fe,
de confesarme cristiano
en medio de esta sociedad
en la que Tú
pareces una extraña reliquia del pasado.
Libérame de ser tan precavido,
de calcularlo todo,
de huir del riesgo
y de evitar decisiones que me comprometen.
Ayúdame a mirar más alto
que los planes que me voy trazando.
Ayúdame a ser mucho más libre
a la hora de hacer opciones en mi vida,
para que oiga la voz de los otros,
sobre todo la de los que sufren
y Tú desde ellos me invites y me digas:
“¿Qué estás dispuesto a hacer por tus hermanos?”
Libérame, Señor,
de justificarlo todo,
de hacer mi vida,
de andarte esquivando,
de seguirte a medias
y de andarme engañando.
Libérame, Señor.
Hazme libre,
mucho más libre.
para pensar,
para vivir,
para arriesgar,
para volver a empezar
y, sobre todo, para amar.
ahora que empiezo a entender
cuánto nos has amado Tú.
JUANJO ELEZCANO
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por Comunicarnos, por Compartir:
Gracias a ello, nos enriquecemos desde la pluralidad y desde la diversidad de puntos de vista dentro del respeto a la libre y peculiar forma de expresión.
La Comunicación más alta posee la gracia de despertar en otro lo que es y contribuir a que se reconozca.
Gracias amig@ de la palabra amiga.
"Nos co-municanos, luego, co-existimos".
Juan Carlos (Yanka)