VOTO AZUL: BANDERA AZUL
VOTO MARRÓN: BANDERA MARRÓN
VOTO BLANCO: NINGUNO
VOTO BLANCO: NINGUNO
Dos príncipes con sendas banderas proclaman su mensaje y su consigna al pueblo reunido.
Uno de los dos será ungido como Rey.
Cumpliendo las reglas del consejo, se echa a suertes el turno de proclamación. Y, se recomienda al público en general, que presten con mucha atención, a las sendas palabras principescas.La suerte le ha tocado para comenzar al príncipe de la
bandera azul.Se tocan varias trompetas doradas con solemnidad.
Gran parte del público reunido, grita con gran júbilo al mismo tiempo que flamean sus banderas azules...SILENCIO... PRESTEN ATENCIÓN. SILENCIO.- "Soy vuestro salvador.
Vosotros, ya me habéis elegido.
Yo soy la paz que os pacifica.
Vuestro amor por mí es muy grande.
Seguir así...
(Explosión de aplausos...)
Que no os engañen... Ya os habéis salvado.
Bienaventurados y Bienaventuradas, ya sois...
Gritos entre el público: - ¡VIVA NUESTRO REY!
- Vosotros sois mi REINO.
Yo os he buscado..., Sí. Y, me habéis encontrado...
Sois muy importantes para mí. ¡Cuánto os amo! ¡Cuánto os am...!
No puede terminar la frase.
El público, se emociona, y se oye con clamor general:
- TÚ ERES NUESTRO REY... NO NECESITAMOS MÁS PRUEBAS.
HEMOS OÍDO LO QUE TENÍAMOS QUE OÍR...
- Gracias a vosotros por ser mi pueblo fiel.
Que no os engañen. No hay más que un rey y un reino.
Realmente os digo, sois mi razón, mi verdad...
No os equivoquéis, Yo soy la Única realidad.
La realidad que no necesita ni de palabras ni de silencios.
La realidad del presente.
Disfrutar la dulzura de mi reino. El éxito es vuestro.
Primero os pido, fundamentalmente, que me sigáis...
Después... Creer en mí.
Como dice las escrituras, en Isaías, en el capítulo 42, versículo 16:
“HARÉ ANDAR A LOS CIEGOS, POR UN CAMINO QUE NO CONOCÍAN,
POR SENDEROS QUE NO CONOCÍAN LES ENCAMINARE.
TROCARE DELANTE DE ELLOS LA TINIEBLA EN LUZ Y LO TORTUOSO EN LLANO”
YO SOY VUESTRA META.
Vosotros sois la riqueza de mi reino.
Sois libres. Yo soy la libertad que os dará la verdad.
No os hagáis preguntas. Yo soy la respuesta.
No tenéis que hacer nada. Yo lo hago todo por vosotros.
Porque os amo..."
Gran explosión de aplausos y vítores de alabanzas, prenden todos los fuegos artificiales, luces de diferentes colores surcan los cielos.....
Todos miran hacia el cielo, maravillados...SILENCIO. SILENCIO. SILENCIO...
Le toca el turno al príncipe de la bandera marrón. (Se oyen algunos silbidos...)
Se toca el shofar, un cuerno de carnero, como trompeta, haciendo un sonido seco...
Desconfianza entre el público, cuando sale el príncipe de la bandera marrón.- "Yo Soy el fuego que ha venido al mundo.
El que crea en mí y me siga, aunque esté entre la oscuridad, tendrá mi luz y vivirá en mí.
Algunos del público sacan los mecheros y los levantan encendidos:
- QUIERES FUEGO... JA, JA, JA...
- El Reino Glorioso de Mi Padre, en sí mismo, es inaccesible a vosotros; pero, por medio de su Hijo, os ha sido revelado. Pero, TODAVÍA, no os ha sido desvelado.
Mi Reinado no es ni típico ni tópico.
Arrepentios, convertios a la Vida Plena.
Dentro del público, una persona dice:
- Eres falso y mentiroso. El que tiene que arrepentirse eres tú.
Tus palabras son tramposas.
- Pedid la Sabiduría. Por eso, deben leer y meditar más mi proyecto escrito en el Libro
"VENGAN A MÍ QUE YO VOY".
Yo no os he traído el beso de la paz, sino que he traído la espada de la Justicia.
Grita una niña:
- ¡Tú eres el esperado!
Sentencia un líder del pueblo:
- Tú no eres nuestro Señor.
- ¿Cómo voy a ser vuestro Señor, sino trabajáis por mi Reinado?
A mí no me elegiréis porque Yo Soy el que elijo a los llamados por mi Padre.
Sí... Elegiré para que vayan fuera de aquí, viviendo en mí, con-viviendo por allí por el mundo, viviendo para mí.
Sean como serpientes voladoras.
Aquí no estáis todos los que son. Y, no sois todos los que están.
El que atienda que entienda. El que mire que vea.
Confíen en mí. Yo os guardaré del príncipe adversario.
A mis epígonos: Algunos formaréis parte de mí ejercito; mi causa es una causa obrera. Sois llamados a ruptura de opresión y guíados a redención mesiánica.
Uno de los dos será ungido como Rey.
Cumpliendo las reglas del consejo, se echa a suertes el turno de proclamación. Y, se recomienda al público en general, que presten con mucha atención, a las sendas palabras principescas.La suerte le ha tocado para comenzar al príncipe de la
bandera azul.Se tocan varias trompetas doradas con solemnidad.
Gran parte del público reunido, grita con gran júbilo al mismo tiempo que flamean sus banderas azules...SILENCIO... PRESTEN ATENCIÓN. SILENCIO.- "Soy vuestro salvador.
Vosotros, ya me habéis elegido.
Yo soy la paz que os pacifica.
Vuestro amor por mí es muy grande.
Seguir así...
(Explosión de aplausos...)
Que no os engañen... Ya os habéis salvado.
Bienaventurados y Bienaventuradas, ya sois...
Gritos entre el público: - ¡VIVA NUESTRO REY!
- Vosotros sois mi REINO.
Yo os he buscado..., Sí. Y, me habéis encontrado...
Sois muy importantes para mí. ¡Cuánto os amo! ¡Cuánto os am...!
No puede terminar la frase.
El público, se emociona, y se oye con clamor general:
- TÚ ERES NUESTRO REY... NO NECESITAMOS MÁS PRUEBAS.
HEMOS OÍDO LO QUE TENÍAMOS QUE OÍR...
- Gracias a vosotros por ser mi pueblo fiel.
Que no os engañen. No hay más que un rey y un reino.
Realmente os digo, sois mi razón, mi verdad...
No os equivoquéis, Yo soy la Única realidad.
La realidad que no necesita ni de palabras ni de silencios.
La realidad del presente.
Disfrutar la dulzura de mi reino. El éxito es vuestro.
Primero os pido, fundamentalmente, que me sigáis...
Después... Creer en mí.
Como dice las escrituras, en Isaías, en el capítulo 42, versículo 16:
“HARÉ ANDAR A LOS CIEGOS, POR UN CAMINO QUE NO CONOCÍAN,
POR SENDEROS QUE NO CONOCÍAN LES ENCAMINARE.
TROCARE DELANTE DE ELLOS LA TINIEBLA EN LUZ Y LO TORTUOSO EN LLANO”
YO SOY VUESTRA META.
Vosotros sois la riqueza de mi reino.
Sois libres. Yo soy la libertad que os dará la verdad.
No os hagáis preguntas. Yo soy la respuesta.
No tenéis que hacer nada. Yo lo hago todo por vosotros.
Porque os amo..."
Gran explosión de aplausos y vítores de alabanzas, prenden todos los fuegos artificiales, luces de diferentes colores surcan los cielos.....
Todos miran hacia el cielo, maravillados...SILENCIO. SILENCIO. SILENCIO...
Le toca el turno al príncipe de la bandera marrón. (Se oyen algunos silbidos...)
Se toca el shofar, un cuerno de carnero, como trompeta, haciendo un sonido seco...
Desconfianza entre el público, cuando sale el príncipe de la bandera marrón.- "Yo Soy el fuego que ha venido al mundo.
El que crea en mí y me siga, aunque esté entre la oscuridad, tendrá mi luz y vivirá en mí.
Algunos del público sacan los mecheros y los levantan encendidos:
- QUIERES FUEGO... JA, JA, JA...
- El Reino Glorioso de Mi Padre, en sí mismo, es inaccesible a vosotros; pero, por medio de su Hijo, os ha sido revelado. Pero, TODAVÍA, no os ha sido desvelado.
Mi Reinado no es ni típico ni tópico.
Arrepentios, convertios a la Vida Plena.
Dentro del público, una persona dice:
- Eres falso y mentiroso. El que tiene que arrepentirse eres tú.
Tus palabras son tramposas.
- Pedid la Sabiduría. Por eso, deben leer y meditar más mi proyecto escrito en el Libro
"VENGAN A MÍ QUE YO VOY".
Yo no os he traído el beso de la paz, sino que he traído la espada de la Justicia.
Grita una niña:
- ¡Tú eres el esperado!
Sentencia un líder del pueblo:
- Tú no eres nuestro Señor.
- ¿Cómo voy a ser vuestro Señor, sino trabajáis por mi Reinado?
A mí no me elegiréis porque Yo Soy el que elijo a los llamados por mi Padre.
Sí... Elegiré para que vayan fuera de aquí, viviendo en mí, con-viviendo por allí por el mundo, viviendo para mí.
Sean como serpientes voladoras.
Aquí no estáis todos los que son. Y, no sois todos los que están.
El que atienda que entienda. El que mire que vea.
Confíen en mí. Yo os guardaré del príncipe adversario.
A mis epígonos: Algunos formaréis parte de mí ejercito; mi causa es una causa obrera. Sois llamados a ruptura de opresión y guíados a redención mesiánica.
Quiero obreros para mi causa.
No temáis. No temáis. No temáis.
El miedo no es mío. El miedo esclaviza.
Mi Paz os la soplo...
Recibir mi viento imparable, invencible, inquietante..."
No temáis. No temáis. No temáis.
El miedo no es mío. El miedo esclaviza.
Mi Paz os la soplo...
Recibir mi viento imparable, invencible, inquietante..."
Se oyen grandes pitadas...
La gran mayoría del público grita airadamente:
- Farsante...
- Traidor...
- Eres una serpiente...
- Te hemos reconocido...
SILENCIO. SILENCIO. SILENCIO.
AHORA ES... TU TURNO:
¡A VOTAR!
Juan Carlos (Yanka)
Hemos querido acoger el servicio de la consolación, como recuerda San Pablo a las primeras comunidades en sus viajes apostólicos. De hecho su misión se identifica con la consolación de Dios a su pueblo, sintiéndose portador de un consuelo profundo que él proyecta en su ministerio. A imitación de María cada uno de nosotros debe mostrarse como el lugar de la consolación de Dios.
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