EL Rincón de Yanka: CONFUSIÓN

inicio














Mostrando entradas con la etiqueta CONFUSIÓN. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta CONFUSIÓN. Mostrar todas las entradas

lunes, 15 de septiembre de 2025

HISPANIDAD O 'HISPANCHIDAD' ('HISPANCHISMO') por JUAN MANUEL DE PRADA y por HUGHES

 


HISPANIDAD O ‘HISPANCHIDAD’


Entre las generaciones más jóvenes aflora un malestar que se desagua de las formas más variopintas, desde la flojera y pesadumbre de vivir hasta la rabia más feroz; expresiones todas ellas propias de pueblos sin futuro. Y entre estas expresiones se cuenta un rechazo creciente a los «panchitos», que es como ahora llaman a las gentes procedentes de la América hispánica. En ese rechazo se entremezclan en zurriburri todos los detritos del pensamiento antiespañol y anticatólico, desde el «supremacismo» racial más abyecto hasta el europeísmo más servil; y, para denigrar el concepto de Hispanidad, se ha acuñado el parónimo burlesco de «Hispanchidad». Curiosamente, este rechazo a los «panchitos» está aflorando sobre todo en ámbitos derechoides, donde en apariencia más se promueve la idea de Hispanidad. ¿O será que en realidad se promueven sucedáneos?

Hace algún tiempo un líder de la derecha autóctona, invitado por un lobi gringo, remató su lamentable discurso con un grotesco «God bless America and Hispanicity». Donde por «America» no se refería al continente americano, sino a los Estados Unidos, según la abusiva sinécdoque que los yanquis han convertido en lema de su imperialismo rapaz. Pero pedir a Dios que bendiga de una tacada a Estados Unidos y a la Hispanidad es tan delirante (y maligno) como pedir que bendiga a la vez la gonorrea y el amor conyugal. Esta misma confusión se ha naturalizado en Madrid, donde se engalanan las calles y se disponen recursos públicos para que diversas comunidades hispanoamericanas celebren ignominiosamente las «independencias» de sus respectivos países. Permitir que se celebren esas festividades antiespañolas (sufragándolas, para más inri, a costa del erario) nada tiene que ver con la Hispanidad; como tampoco tiene nada que ver con la Hispanidad contratar por cifras millonarias a cantantes «latinas» más viejas que la Tana que han probado su servilismo a los Estados Unidos. Desde la derecha se está promoviendo desnortadamente una «Hispanchidad» que acabará convirtiendo nuestras capitales en imitaciones casposas de la muy casposa Miami, donde las sectas protestantes hacen su agosto entre los hispanoamericanos más pobres, mientras los más ricos acaparan los pisos de los barrios pijos, inflando el mercado inmobiliario, y nos advierten de los peligros de las dictaduras bolivarianas fumándose un puro. La derecha española, en fin, está promoviendo una «Hispanchidad» colonizada mentalmente por los Estados Unidos que es la antítesis de la Hispanidad. Frente a la unidad civilizadora y orgánica de la Hispanidad, bajo el fundente de una fe común, se promueve la unidad de hormiguero que interesa al mundialismo, con pueblos hispánicos convertidos en masa colectánea degradada por los subproductos culturales gringos.

Y esa «Hispanchidad», en una sociedad desnortada, está engendrando rechazo hacia los pueblos de la América hispánica, que es la mayor vileza en la que un español puede incurrir.


HISPANCHISMO

Ahora resulta que la culpa de que en Madrid en verano sólo haya ancianos solitarios e hispanoamericanos currando y que al poner un café alguien diga «preciosura» no es de la política inmigratoria del PSOE o del peperismo «de todos los acentos» o de la natalidad por los suelos; la culpa es de la Hispanidad.
O como dicen algunos: de la hispanchidad o del hispanchismo, jugando con lo de «panchos» (Internet está dando un Losantos Colectivo igual de desorientador).

Ya sabíamos que muchos españoles no entendían «la idea de España»; no debe extrañarnos que a muchos, algún amigo entre ellos, no les entre fácilmente la «idea de Hispanidad».
Algunos la rechazan porque se quedan en la raza. Son etnonacionalistas, o algo así, que ignoran la importancia de la lengua española y cuyo etnicismo, al final del día, no distingue entre un marroquí y uno de Caracas.
Son «basados». Bros que miran la ventana de Overton como Bin Laden las Torres Gemelas. Pero ¿por qué se quedan ahí, en lo de «panchitos»? Yo extendería la exigencia al producto nacional y pediría certificados de limpieza de sangre, acreditación de hidalguía (basta con ver el semblante) y un CI superior a 120. Los que no, a nadar al mar, ¡que están sobrando!

Estas personas han amenizado el verano ignorando o queriendo ignorar que lo que llaman hispanchidad lo pensaron Zacarías de Vizcarra, el párroco vasco que escribiera Vasconia españolísima, Ramiro de Maeztu, mártir del nacionalismo español, Francisco Franco o Blas Piñar, que ahora serían unos boomers, unos masonazos, disidencia controlada o incluso juguetes del sionismo.
Entre los moderados de la prensa tradicional y los inmoderados del Interné la verdad es que estamos apañaos…
Esto de arremeter contra la hispanidad se parece un poco a aquello de «que se vayan los catalanes» y tras el error se adivina también un comprensible hartazgo y algunas razones.

Porque no se puede disculpar el impacto en el precio de la vivienda, por poner un ejemplo, con el camelo cateto de convertirnos en Miami; la Hispanidad tampoco deja de tener un aire elitista e intelectual que nada consuela al que ve empeorar sus condiciones de vida (en servicios, salario, vivienda o seguridad, que hay donde elegir) y no pocas veces se presenta como una forma de escapismo persiguiendo los molinos de la Leyenda Negra; adopta ahora la hispanidad, para colmo, una forma nueva e izquierdista que pretende «derrotar al anglo» con una geopolítica como de película de Tony Leblanc.

La hispanidad tiene, por su misma definición y catolicidad, un ecumenismo, un universalismo que a veces puede ignorar la estricta y amenazada españolidad. Pero decía Morente que España sin hispanidad sería el hueco, la tumba de España, y es verdad que la hispanidad parece la idealidad o sustancia de lo español, lo superespañol o lo que siendo español ya no sólo le pertenece a España; su herencia y proyección.

Esto del hispanchismo, mezclar las churras de la hispanidad con las merinas de la inmigración, lleva una clara intención política, aunque guiado por la buena fe (que no es el caso) podría conducir a una discusión sobre los límites, impactos y maneras de la inmigración legal. Asunto que algunos países ya juzgan con la pesarosa sensación de haber llegado tarde. Un debate pertinente que exige realismo y pluralidad de enfoques y que se hará mejor (suicida sería lo contrario) con la óptica de la hispanidad que sin ella.

jueves, 22 de mayo de 2025

LIBRO "LA TIRANÍA DE LA MENTIRA": DESINFORMACIÓN, CENSURA Y CAOS por CRISTINA MARTÍN JIMÉNEZ 👿👥💥💀🙈🙉🙊

 CRISTINA MARTÍN JIMÉNEZ

LA TIRANÍA DE LA MENTIRA

Desinformación, censura y caos

Quien controla la información controla el poder y moldea la sociedad. Es hora de despertar y recuperar nuestra libertad.
La famosa máxima «la información es poder» ha adquirido en las últimas décadas un carácter entre perverso y visionario, que amenaza con aniquilar el pensamiento crítico de las sociedades e imponer lo que en este libro se denomina «la era del caos».
La libertad de expresión no solo es la base de la democracia, sino del desarrollo de la Humanidad. Pero también es una amenaza para el poder, para los plutócratas y mil millonarios que quieren forjar la sociedad a su gusto. Por eso, el derecho a la información parece haberse replegado hasta perder todo su sentido, y su resultado es un más que preocupante estado de desinformación, inquietud y duda.
¿Cómo saber qué es verdad y qué es mentira? ¿Cómo se explica que una misma noticia tenga varias interpretaciones completamente opuestas? ¿Por qué ya no confiamos en el periodismo? ¿Qué está pasando en las redes sociales?
"Las revoluciones, tan incontinentes en su prisa, 
hipócritamente generosa, de proclamar derechos, 
han violado siempre, hollado y roto 
el derecho fundamental del hombre, tan fundamental 
que es la definición misma de su sustancia: 
el derecho a la continuidad".
 
José Ortega y Gasset, 

INTRODUCCIÓN

Guarda mi memoria que, desde que era una niña, siempre quise ser periodista. Y, aun­ que suene excesivo -incluso desafiante-, creo que amo el periodismo más que nadie lo ha amado jamás. Debe de haber mucha verdad en lo que siento porque, hasta hoy, no hallo una causa más sólida que la locura de un amor para entender mis primeros cincuenta años de vida. Y para explicar por qué, cuando empecé a darme cuenta de lo que la tiranía estaba haciendo con él y de él, el rayo antiguo me partió el alma en dos y, como a Pablo en su camino hacia Damasco, el fuerte impacto me tiró del caballo. Suce­dió entonces que una tenebrosa angustia me horadó la mente, y por el hueco penetró la perturbadora lucidez de la Verdad mirándome de frente. Sin embargo, en mi caso, el Cielo no brilló a mi alrededor, sino todo lo contrario. Me dejó en la más inquietante de las oscuridades, en el estado más tenebroso que jamás había conocido. Pasó el tiempo y ahora siento que ese desgarro herrumbroso no fue más que una mera fruslería si lo comparo con las amargas experiencias que aún me quedaban por vivir debido a mi obstinación -quizá absolutamente irracional- por ser una periodista de verdad.

Nací el 4 de mayo de 1974, en plena Guerra Fría, mientras el mundo asistía boquiabierto al escándalo del Watergate. Desde hacía dos años, las investigaciones de los periodistas Carl Bemstein y Bob Woodward, publicadas en el legendario The Washington Post, habían puesto contra las cuerdas al equipo del republicano Richard Nixon. Así que, mientras mi madre me amamantaba, mi pequeño cerebro en desarro­llo recibía los mensajes lanzados desde la televisión, ubicada en el salón de la casa, y, aún sin comprender qué pasaba, a mis oídos llegaban las incesantes denuncias de la sucia conspiración del presidente estadounidense, el hombre más poderoso de la Tie­rra o, al menos, de una de las dos mitades en las que entonces se hallaba dividida.

Fue así como mis primeros meses en este belicoso planeta se llenaron de los ecos de la inminente renuncia de Nixon, que copaban no solo los espacios de la prensa española, sino los de todo el mundo. Aunque yo solo era un bebé, uno de los primeros mensajes que recibió mi subconsciente fue que el periodismo era la profesión más ex­traordinaria del universo. Una profesión solo apta para personas intrépidas, honestas y dispuestas a asumir todo tipo de riesgos para defender la Verdad en el transcurso del gran combate contra la tiranía y la mentira. Una profesión a la que, como veremos en este libro, el poder intenta aplacar usando todos los medios a su alcance, sean legíti­mos o no.

El caso es que, durante la Guerra Fría, el periodismo era ia única profesión que transformaba a los mortales en héroes, pues solo los intrépidos y sagaces informadores estaban dotados para enfrentar la mentira amoral, causa de las abominables atro­ cidades que asolaban el mundo. Quizá este mensaje subliminal que recibía a diario hizo germinar en mi mente de bebé la idea de dedicar mi vida a esta noble profesión... Pero, realmente, ¿era el periodismo tan justo, libertador y valiente como parecía?

Cuando, tres meses después de mi nacimiento, el Post provocó la dimisión de Nixon, el mundo entero contuvo la respiración. En el pulso mantenido entre la institución presidencial y la prensa, había ganado la segunda. El periodismo estadou­ nidense, coronado con laurel, se presentaba como el bastión de la libertad, la verdad y la democracia, y no solo ante sus ciudadanos, sino ante su rival geopolítico: el ma­lévolo sistema comunista de la Unión Soviética, que censuraba, perseguía, ocultaba y desinformaba. Estados Unidos se había convertido en el dios del mundo libre gracias a su prensa independiente y alejada de cualquier poder, incluso del más hercúleo y prestigioso de todos, el político, encarnado en el presidente de una de las dos naciones más poderosas del planeta.

En efecto, la dimisión de Nixon sacudió la política y la sociedad estadounidenses. Fue un hecho que marcó un punto de inflexión en la confianza ciudadana hacia quienes ejercen el poder y quienes lo denuncian practicando la noble función de vi­gilantes. Los sagaces periodistas habían hecho caer al presidente, de manera que una idea poderosa marcó a fuego el imaginario colectivo: la prensa era la gran heroína, el periodismo era el «guardián de la Verdad», el «cuarto poder», sin el cual no hay ni de­mocracia ni libertad. Era de justicia loarlo, pues solo gracias a él había vencido el Bien. Y ella nos había liberado del tirano.

Sin embargo, esta épica historia ocultaba algunas tramas infames en los ángulos menos iluminados de las redacciones de los periódicos..., y del Despacho Oval. Por ejemplo, nunca se publicó por qué el entonces secretario de Estado de Nixon no solo no se vio afectado por el escándalo, sino que continuó en el cargo con el siguiente pre­sidente, Gerald Ford. Dicho secretario fue siempre un conspirador extremadamente hábil para manejar a los servicios de inteligencia y a la prensa. Conocía todos los secre­tos de Estado e intrigaba no solo en el seno del poder político estadounidense, sino en el del planeta entero. Se llamaba Henry Kissinger y, pese a sus tretas y juegos sucios, recibió el Premio Nobel de la Paz en 1973.

Pese a las falsedades vertidas contra mí durante los últimos veinte años, yo nunca he mentido y nunca he sido una «conspiranoica». Por el contrario, lo que he hecho durante todo este tiempo ha sido precisamente denunciar conspiraciones que cuestan la vida y la salud física y mental a millones de personas. Unas conspiraciones basadas en la guerra psicológica, cuyo fin es distorsionar la realidad y la compren­sión; bloquear la inteligencia y dirigirla hacia peligrosos dogmas anticientíficos. Unas conspiraciones que provocan «guerras justas» -como a las élites les gusta denominadas- y ataques climáticos. ¿Y en qué consiste el periodismo si no en investigar a los autores y las armas que los primeros emplean para librar sus «justos combates»?

Pero el poder odia a los periodistas libres. Odia todo lo que no puede controlar ni someter. Odia lo que no logra comprar con sus dólares manchados de sangre. Por eso me odia a mí. Esta ha sido la realidad que me ha tocado vivir durante las dos últimas décadas. He soportado el odio de un poder que me ha atacado ferozmente para impe­dir que realizara mi trabajo.

A menudo me preguntan qué podemos hacer para acabar con las injusticias y las mentiras, a lo que yo siempre respondo que el primer paso es conocer. Y no es una res­puesta simple, sino el resultado de un proceso de reflexión complejo. A los periodistas nos señalan quiénes son los buenos y quiénes son los malos, los héroes y los villanos, qué bandera hemos de izar en cada guerra, qué música escuchar, qué películas ver, qué libros leer... Pero, al seguir esas indicaciones, ¿verdaderamente estamos conociendo la Verdad, o, por el contrario, nuestra mente acaba atrapada en el caos? Yo investigo porque quiero que todos conozcamos, pues ese es el paso previo a la rebeldía moral. Lo que buscan los mensajes mentirosos del periodismo controlado por el sistema es lle­ varnos a la confusión para que no seamos capaces de distinguir el Bien del Mal. Pero se olvidan de que los seres humanos tenemos conciencia, y cuando esta se percata de que hemos sido engañados, nos lleva a rebelarnos. Ese es el valor del conocimiento: puede hacer que las cosas cambien.

Lo que mis lectores encontrarán en las dos primeras partes del libro es el origen de las alianzas de los medios tradicionales con el poder (parte l) y el vuelco que se pro­ dujo en el siglo XXI con la aparición de las redes sociales (parte 11). En la parte tercera expongo mi trabajo de investigación periodística acerca de lo ocurrido en Valencia en los meses de octubre y noviembre de 2024, así como las conclusiones obtenidas a partir de dicho trabajo; unas conclusiones que, como se verá, en absoluto coinciden con las trasladadas por el poder global, que insiste en ocultar a la ciudadanía verdades y sucesos tan obvios y dañinos -incluso homicidas- como la tiranía climática y los ataques que, en nombre de la lucha contra el calentamiento global, nos vemos obliga­dos a soportar. Por último, en la parte IV analizo eso que llaman «desinformación», un concepto con el que el poder pretende desprestigiar a quienes ni nos doblegamos ni aceptamos como válido el relato hegemónico que las élites pretenden imponer.
...
Las últimas revelaciones del propósito encubierto de la Agencia de Estados Uni­dos para el Desarrollo Internacional (USAID) me pilló acabando la redacción de este libro. Sus actividades no me causaron sorpresa alguna, sino una vibrante emoción. Al fin -me dije-, miles de personas van a conocer cómo funciona el poder en la zona autoproclamada «líder del mundo libre». Al fin, mi trabajo de más de veinte años reci­ bía su recompensa y adquiría todo su sentido.

Aunque hablaré de este asunto con más detalle en los capítulos 16 y 17, avanzaré aquí que las revelaciones producidas a raíz del cierre de la USAID a manos de la Ad­ministración Trump han marcado un antes y un después en la profesión periodística. Durante ochenta años, el periodismo ha desempeñado un papel de vigilante y cen­ sor del pensamiento universal, algo que comenzó en la década de los años cincuenta, cuando la Agencia Central de Inteligencia (CIA) invadió los medios de comunicación y estos comenzaron a trabajar a su servicio. Desde entonces,el periodismo pasó a ser un fiel lacayo del poder que lo compró y el encargado de extender falsedades sobre or­ ganizaciones, Gobiernos y personas supuestamente «enemigos» que amenazaban con cambiar el orden impuesto por Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial. Con el escándalo de las revelaciones de la USAID hemos sabido que esas prácticas siguieron desarrollándose después del final de la Guerra Fría hace ya más de tres décadas, lo que nos lleva a concluir que el periodismo y los medios de comunicación controlados están heridos de muerte al perder toda su credibilidad.

El hecho de que en el núcleo de los principales periódicos y programas informativos de Occidente haya agencias de inteligencia -que son las que, en última ins­tancia, construyen el «relato» que todos debemos comprar- ha provocado la crisis del periodismo como «cuarto poder», es decir, como el encargado de fiscalizar a los gobernantes y sus brazos armados. Ahora sabemos que tanto la CIA como la USAID crearon noticias falsas (desinformación) que eran publicadas por ciertos medios de comunicación, que de ese modo se convertían en «fuentes» para otros medios que las reproducían en sus páginas o en sus programas informativos como si fueran hechos veraces y contrastados.

En mi opinión, este ha sido el secreto mejor guardado del periodismo, la mayor estafa. Y al resultado de esa estafa yo lo llamo tiranía de la mentira, porque mantener a las personas alejadas del conocimiento y sometidas a la esclavitud de la ignorancia es uno de los mayores actos de despotismo que se pueden realizar.
Sin embargo, por mucho que se empeñen en cambiar el significado de las palabras y en crear una neolengua delirante y perversa, las palabras están inventadas y su significado no se puede ni borrar, ni censurar, ni cancelar. 
La verdad de la palabra siempre prevalecerá frente a la ignorancia que emana de la mentira de quienes viven prisioneros y gobernados por la codicia.

La tiranía de la mentira, la peor dictadura

Cristina Martín Jiménez cree firmemente que vivimos en la época de la desinformación, la mentira y el caos. Pero que son los que nos gobiernan, directamente o en las sombras, los mayores mentirosos, los mismos que nos están imponiendo la dictadura de la neocensura. Cristina es escritora, conferenciante y divulgadora. Además de doctora en Ciencias de la Comunicación-Periodismo. Está considerada como una de las mayores expertas mundiales en el Club Bilderberg. Lleva muchos años desentrañando los hilos del poder, sacando a la luz a los que verdaderamente manejan nuestras vidas a su capricho. 
Cristina lo tiene claro: quien controla la información controla el poder y moldea la sociedad. Hoy, por si fuera poco, los poderosos tratan de aniquilar el pensamiento crítico de las sociedades. Para estas élites, la libertad de expresión es percibida como una amenaza. Así, controlan con descaro los medios de comunicación, incluyendo las redes sociales. Se persigue a los que no piensan como los gobernantes, quienes intentan someter nuestro intelecto y nuestra voluntad por cualquier medio. Todo vale para robarnos en nombre de la Agenda 2030, la OTAN y la UE, con la complicidad de los "periodistas", según Cristina. 
Como luchadora por la verdad y la libertad, es objeto permanente de censura en las redes. En este programa nos habla de todos estos temas y de muchos más, como de los planes del Club Bilderberg para España, o quienes son realmente los amos del mundo. Es hora de despertar y recuperar nuestra libertad. Hagámoslo de la mano de Cristina.


Charles Wright Mills es un sociólogo que desarrolló la teoría de la "Élite del poder", la cual cuestiona la idea funcionalista de que la sociedad funciona de manera armónica y equilibrada. La teoría de Mills, a diferencia de la funcionalista, sugiere que la sociedad está organizada por una élite que ejerce un poder significativo sobre los demás.
La Élite del Poder:
La teoría de Mills sostiene que en la sociedad existe una élite poderosa que concentra el poder en los ámbitos político, militar y económico. Esta élite, según Mills, toma decisiones que afectan a la sociedad en su conjunto, y los individuos comunes son relativamente impotentes ante sus acciones.
Cuestionamiento de la Funcionalidad:
La perspectiva funcionalista, contrariamente, ve la sociedad como un sistema donde cada parte contribuye al funcionamiento general y al equilibrio. Mills critica esta visión al señalar que la concentración de poder en la élite genera desigualdades y conflictos.
El Rol de la Imaginación Sociológica:
Para Mills, la sociología debe tener una perspectiva crítica y reflexiva sobre el poder y las estructuras sociales. Él desarrolló el concepto de "imaginación sociológica", que permite comprender las relaciones entre la vida individual y las estructuras sociales, y las consecuencias de las acciones de la élite.
Ejemplos en la Sociedad Actual:
La teoría de la élite del poder de Mills sigue siendo relevante en la actualidad, ya que se observa cómo las decisiones de grandes corporaciones, gobiernos y líderes militares impactan en la vida de las personas en todo el mundo.
Importancia de la Crítica:
La teoría de Mills nos invita a cuestionar la autoridad y el poder, y a tomar conciencia de las estructuras sociales que nos afectan. En lugar de asumir una visión funcionalista, debemos ser críticos y reflexivos sobre las desigualdades y los conflictos que existen en la sociedad.

Es en el Evangelio de San Lucas, voy a leer la cita, digamos, capítulo 4, versículo 5 al 8, cuando el Señor Jesucristo está frente a las tres tentaciones que le propone el maligno y en la peor de todas, el maligno le propone que se arrodille frente a él porque le muestra todos los reinos del mundo, es decir, los Estados, el Estado, y le dice que si se arrodilla frente a él, le dará el poder sobre todos los Estados del mundo porque ese poder le fue dado, es decir, está la compasión propia del maligno que el Estado es la representación del demonio. Por eso cada vez que avanza el Estado, digamos, hay más pobreza, hay más calamidades, hay miseria, por eso es que les digo, despertemos a la fe, despertemos a la fe, porque eso es lo que nos traerá no solo el cielo, sino la prosperidad aquí también en la tierra”. @javiermilei

UN PUEBLO SIN PENSAMIENTO CRÍTICO  
ES EL SUEÑO DE TODO TIRANO

VER+:








viernes, 18 de abril de 2025

LA TECNOCRACIA ES EL SISTEMA DE LA BESTIA por STUART MURRAY 👥👿

La tecnocracia 
es el sistema de la bestia


[“Érase una vez la Torre de Babel, construida como monumento al ego del hombre mientras escupía a la cara de Dios. Nada ha cambiado mientras la Torre de Babel más reciente pretende apoderarse de la humanidad, poner patas arriba el mundo creado, escapar al espacio y, sí, escupir una vez más en la cara de Dios. «Tecnócrata» es la palabra clave para psicópata: falta de empatía y remordimiento, junto con rasgos megalómanos, enmascarados por un encanto superficial e inmunidad al estrés. 

Los rasgos clave asociados a la psicopatía incluyen: 

■ Características interpersonales: Encanto superficial, engaño, manipulación. ■Rasgos emocionales: Falta de empatía, de remordimiento y de profundidad emocional. 
■Tendencias conductuales: Impulsividad, irresponsabilidad, búsqueda de emociones fuertes y comportamiento antisocial. No todos los Tecnócratas son psicópatas, pero los que están en la cúspide de la pirámide sin duda lo son” Patrick Wood, TN Editor] 

¿Qué es el Sistema de la Bestia? Es el moderno leviatán satánico de los avances tecnológicos humanos que permite a un pequeño grupo de individuos y familias poderosas esclavizar a la humanidad a través de una red de vigilancia y conectividad que se extiende por todo el mundo y de la que no hay escapatoria (si lo permitimos). Creo que poca gente entiende realmente lo que es la tecnocracia. Se está introduciendo a la velocidad del rayo, así que todo el mundo haría bien en aprender sobre ésta. 

Cuando termines este artículo, quiero que entiendas estas tres cosas y cómo se relacionan entre sí: 

■ “Build Back Better” (Reconstruir mejor) fue el nuevo lema en 2020 utilizado por muchos líderes mundiales. 
■ Elon Musk ha dicho que es “Dark MAGA” 
■ Trump dijo que ya no tendrás que votar La gobernanza tecnocrática tuvo un ensayo durante la falsa pandemia. 

La tecnocracia fue un movimiento social activo en Estados Unidos y Canadá en la década de 1930. Se consideraba una tercera opción mejor que la política partidista y el comunismo. El movimiento proponía reemplazar a los políticos por científicos e ingenieros. 
El abuelo materno de Elon Musk fue Joshua N. Haldeman (1902–1974). Entre 1936 y 1941, Haldeman fue el líder de un grupo canadiense conocido como Technocracy Incorporated. Fue arrestado y encarcelado por un corto tiempo en Canadá por su participación en este grupo que se consideraba subversivo. Después de 1941, se unió al Partido del Crédito Social y estuvo abiertamente a favor de la Renta Básica Universal (RBU). Al igual que su abuelo, Elon Musk es un ferviente promotor de la tecnocracia, los sistemas de crédito social y la RBU.

Los “expertos”médicos, en particular Anthony Fauci, Deborah Birx y otros miembros del Grupo de Trabajo sobre el Coronavirus (*falso virus) de la Casa Blanca, fueron introducidos en tu conciencia para decirte lo que debías hacer. 
Una forma de describir la tecnocracia es el gobierno de los expertos, con un fuerte énfasis en los científicos. Un defecto de este sistema ,que aprendimos de la falsa pandemia, es que los expertos y científicos dirán cualquier cosa en cualquier momento, según lo requieran los poderes fácticos. No son inmunes a la mentira.

La tecnocracia se describe como la ciencia de la ingeniería social, el funcionamiento científico de todo el mecanismo social para producir y distribuir bienes y servicios a toda la población. En una tecnocracia, la sociedad tal como la conocemos dejará de existir. En su lugar, habrá un control centralizado de todas las interacciones y el comportamiento humano. Esta es la "red de control" de la que todos hablan: vigilancia y rastreo ineludibles las 24 horas, los 7 días de la semana, con almacenamiento y análisis de los datos recopilados en los centros de datos de IA de Stargate. Los planes para estos nuevos centros de datos de IA fueron detallados por Larry Ellison el primer día completo de la administración Trump.
En la Tecnocracia no existen gobiernos nacionales. En cambio, existen Tecnatos continentales. Los tecnócratas concibieron los Tecnatos como extensiones de tierra eficientes: extensas áreas fértiles que serían autosuficientes y requerirían poco comercio con otros Tecnatos.

Cabe señalar que el Tecnato de América incluye a Canadá y Groenlandia. Cuando Trump habla de anexar Canadá y Groenlandia, no se trata de una idea nueva. Forma parte de un plan de la década de 1930, de casi 100 años de antigüedad, que los nuevos tecnócratas han adoptado.

Esto es similar al Plan de los Diez Reinos del Club de Roma revelado en 1974:


Los nuevos tecnócratas se refieren al Tecnato como una corporación gubernamental, en referencia a la privatización de las funciones y agencias gubernamentales. Los tecnócratas describen a los ciudadanos, al pueblo, como "animales humanos" y se refieren a ellos como máquinas programables. El funcionamiento científico del mecanismo social permite que el trabajo del "animal humano" actúe como el "motor humano" para el funcionamiento eficiente del Tecnato (corporación gubernamental). Los tecnócratas rechazan rotundamente conceptos como el alma humana y el libre albedrío. ¿Recuerdan a Noah Yuval Harari hablando precisamente de esto?

Habla de la tecnocracia venidera. Los tecnócratas afirman que el alma y el libre albedrío pertenecen al pasado ignorante y bárbaro de la humanidad. Para ellos, el ser humano no es más que una máquina orgánica.
Los tecnócratas del pasado reemplazarían el dinero con Certificados de Energía. Esto se parece mucho a los Créditos de Carbono, que Elon Musk y otros miembros del gabinete de Trump promueven. Según Wikipedia,

La tecnocracia es literalmente antihumana. Prioriza el desarrollo tecnológico por encima de las personas. Elon Musk, Peter Thiel, Jeff Bezos y otros tecnócratas quieren instaurar una tecnocracia y obligarnos a vivir en ella. Serán los miembros elitistas del Control Continental, con libertad para apropiarse de todas las ganancias y manipular y controlar a los inútiles comedores a los que llaman "animales humanos". Tú y yo solo podremos comer raciones de subsistencia.

(…) Sabemos que nuestros representantes son seleccionados y no elegidos, pero siguen con la farsa de votar como si tu voto realmente contara. Si tu voto contara, no te dejarían hacerlo. Los mismos medios que mienten todo el tiempo, nos dicen quién “ganó las elecciones”. 
¿Por qué habríamos de creerlo? Este nuevo sistema que imaginan acaba con todas las pretensiones y elimina por completo el voto. Se han cansado de fingir. Personas influyentes de la administración actual, como Peter Thiel, Elon Musk y JD Vance, abrazan la filosofía tecnocrática de la Ilustración Oscura, según la cual los gobiernos deben dirigirse como los directores ejecutivos dirigen las empresas. 

En una corporación, el director general es el monarca, y nadie más tiene derechos ni voz. No sólo los gobiernos deberían funcionar como empresas, sino que las funciones del gobierno deberían ser asumidas por empresas privadas. Las empresas privadas que se hagan cargo de las operaciones del gobierno serán, por supuesto, propiedad de estos mismos tecnócratas ultra-ricos. 

Esto parece ser exactamente lo que está sucediendo con DOGE, ya que las agencias gubernamentales son destripadas y desmanteladas para dar paso a la toma de posesión corporativa/AI. Bajo el nuevo sistema tecnocrático de la Ilustración Oscura, no habrá votaciones ni Presidente ni Estados Unidos. No habrá Constitución, ni Tribunal Supremo, ni Declaración de Derechos, ni separación de poderes. (…)

VER+:


domingo, 22 de septiembre de 2024

EL ANTICRISTO UTILIZA ARTIMAÑAS CON LA MANIPULACIÓN DEL LENGUAJE CON PALABRAS Y SIGNIFICADOS DEFORMADOS Y AMBIGUOS 👿👥👅


El exorcista y psiquiatra Raffaele Talmelli 
analiza la perversión que el mal hace del lenguaje

«El Anticristo 
utiliza la manipulación del lenguaje 
con palabras y significados deformados

“El Anticristo, oponiéndose al Verbo, al Logos, utiliza un antilenguaje: la manipulación del lenguaje con fines ideológicos con palabras y significados deformados de tal manera que no haga que la gente entienda el contenido real que transmiten estas expresiones": así lo expresó el psiquiatra, sacerdote y exorcista Raffaele Talmelli, en un curso de Exorcismo y oración de liberación que se celebró en el Regina Apostolorum de Roma en octubre de 2021, donde diversos expertos mostraron diferentes formas de actuación de Satanás y las armas con las que luchar contra él y vencerle.
En su intervención este exorcista quiso centrarse, más que en las acciones más extraordinarias del demonio, tales como las posesiones, en sus actuaciones en lo ordinario, introduciéndose en el día a día de las personas.

El demonio, "en nuestra realidad diaria"

"Sería una tontería prestar tanta atención a la posible presencia del Maligno en algunos fenómenos insólitos y no preocuparse en absoluto por la realidad cotidiana de la tentación y del pecado, en la que Satanás, 'asesino desde el principio' y 'padre de la mentira', ciertamente actúa”, citó el padre Talmelli, tal y como recoge el semanario italiano Famiglia Cristiana.
De este modo, este sacerdote señaló que “está claro que la acción del Maligno no es rara en absoluto, es parte de nuestra realidad diaria. La acción del diablo tiene otras áreas: guerras, injusticias, egoísmo, inducción a la prostitución, pedofilia, pornografía, ruptura familiar, blasfemias manifiestas, la cultura de la indiferencia, el ateísmo práctico, la sensualidad desenfrenada…”.

La experiencia es que ese pecado es inicialmente presentado como un bien. “La enseñanza bíblica nos lleva a la conciencia de que los pactos con el mal, aunque al principio parezcan caminos liberadores, se convierten en una esclavitud trágica”, explicó en su conferencia.
Este experto recordó igualmente que “en pleno respeto por nuestra libertad, Dios siempre nos invita a aceptar la ayuda que nos ofrece para detener nuestra caída; pero si el rechazo es total, entonces permite que nuestra elección llegue hasta el final”.

Citando a San Agustín, dijo que “el diablo en realidad no tenía el poder de forzar al hombre, sino sólo la astucia para engañarlo”.
Por ello, el exorcista siguió con su explicación señalando que “el hombre puede responder a la tentación con una doble elección: ceder (pecado) o perseverar en el bien (virtud)” y que “no hay pecado sin consentimiento”.
En este sentido, el padre Talmelli consideró que el trato constante con la Palabra de Dios en comunión eclesial y una vida virtuosa en Cristo “son ciertamente los remedios eficaces a disposición de todos”.
“Para no caer en las ilusiones del falso bien, aunque sea compartido por una mayoría absoluta, siempre está el faro de la Iglesia que no es sólo Madre, sino también Maestra”, agregó.

La perversión del lenguaje

Volviendo a la perversión del lenguaje, este exorcista habló del
Lexicón. Términos ambiguos y discutidos sobre familia, vida y cuestiones éticas, documento que publicó en 2003 el Pontificio Consejo para la Familia. Ahora esos términos de los que hablaba son de uso totalmente común.
En el prefacio, el cardenal Alfonso López Trujillo, refiriéndose a la famosa novela de George Orwell 1984, destacaba el problema dramático de la manipulación lingüística: "Uno de los síntomas más preocupantes del enturbiamiento moral es la confusión de términos que conduce a niveles extremadamente degradantes cuando se utilizan, con frío cálculo, para obtener un cambio semántico, es decir, del significado de las palabras de forma artificialmente penetrante”.

Así, recordó neologismos que se utilizaron en el siglo XX relacionados con el régimen nazi o soviético o remontándose más tiempo, los neologismos que acuñaron los protagonistas de la Revolución Francesa.
“A lo largo de la historia, ¿cuántos hombres han comenzado a gritar y propagar la violación de la ley natural como un 'derecho' y, en poco tiempo, han transformado el mundo en un inmenso cementerio lleno de víctimas de la eugenesia, la eutanasia, de genocidios, de campos de exterminio?”, se preguntó.

La ideología de género lleva años inventando un nuevo lenguaje con el que ir imponiendo sus postulados.
Este sacerdote y psiquiatra consideró un “buen ejercicio personal” el “identificar qué neologismos están imponiendo su dictadura ideológica violando la ley natural”.
Siguiendo con su argumentación, el padre Talmelli afirmó que “sin entrar en análisis históricos del pasado, podemos ver incluso hoy que estamos constantemente tentados -en palabras del Papa Juan- por ‘formas de existencia que ignoran a Dios y sus leyes, poniendo demasiada fe en el progreso de la tecnología, fundando sólo bienestar en las comodidades de la vida’”.
Y puso el ejemplo de Islandia, donde se permite abortar, al igual que otros países, a bebés con anomalías más allá del primer trimestre del embarazo. Así se expresa la psicóloga islandesa que trata con las mujeres que reciben este diagnóstico prenatal: “Hablo con ellas [con las madres] antes de que tomen la decisión de interrumpir o continuar el embarazo” y les explica: "Esta es tu vida y tienes derecho a elegir cómo será tu vida".

La intención –asegura- es evitar cualquier sentimiento de culpa que pueda surgir: "Pensamos en el aborto como algo que pone fin a lo que podrían ser grandes dificultades, evitando el sufrimiento del niño y la familia".
Sin embargo, este religioso recordaba que “el diablo es un asesino desde el principio”. 
“Hay muchas culturas de la muerte, todas disfrazadas de progreso, emancipación y libertad. 
¿Y quién tiene el coraje de ir contra el progreso, la emancipación y la libertad? De esta manera, el problema se traslada de su contenido moral a terrenos que llevan consigo el consenso”, agregaba.
Pero pese a todo –concluía el exorcista- “no debemos desanimarnos pensando que debemos entenderlo todo y ser expertos en todos los asuntos: una vez más, la confianza en el Magisterio y en la infalibilidad del Papa nos protege de las sugerencias-sometimiento cultural”.

Publicado en ReL el 9 de noviembre de 2021.


Las artimañas son trucos o manipulaciones diseñadas para engañar a alguien. Las artimañas del diablo son aquellos esquemas astutos que utiliza Satanás para atraparnos mediante la tentación, la amenaza o la intimidación. Efesios 6:11 nos advierte: "Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo". La Escritura nos da una idea de las tácticas de nuestro enemigo: "no ignoramos sus maquinaciones" (2 Corintios 2:11), y es sabio que prestemos atención a sus advertencias.

He aquí algunas de las artimañas del diablo que vemos en las Escrituras:

1. Desafiar la Palabra de Dios. Génesis 3 nos da una visión detallada de esta táctica de nuestro enemigo. Nos llevó al primer pecado humano, y Satanás todavía la utiliza porque funciona muy bien. Las primeras palabras registradas del diablo, a través de la serpiente, fueron estas: "¿Conque Dios os ha dicho?" (Génesis 3:1). Con esas palabras, el diablo invitó a la mujer a reconsiderar lo que ella entendía que Dios había dicho. Agregando su interpretación humana, se convenció de que la Palabra de Dios era demasiado restrictiva.
Al sugerirnos que reexaminemos la clara enseñanza de la Palabra de Dios, Satanás nos invita a añadir nuestra propia interpretación y, por tanto, a anular la voluntad declarada de Dios. Denominaciones enteras de iglesias están cayendo presas de estas artimañas del diablo. 
"¿Dijo Dios realmente que la homosexualidad es mala?", susurra, y las iglesias se desmoronan. "¿Dijo realmente Dios que sólo hay dos géneros?", nos sugiere, invitándonos a que demos nuestro propio giro a la realidad, haciéndonos dioses para reemplazar al Señor. Efesios 6:11 dice que necesitamos estar vestidos con toda la armadura de Dios para resistir esas artimañas.

2. Desafiar nuestra identidad. Lucas 4:1-13 nos da una idea de varias de las artimañas del diablo. Satanás vino a tentar a Jesús en el desierto. En dos ocasiones diferentes, Satanás comenzó sus tentaciones con estas palabras: "Si eres el Hijo de Dios". Satanás sabía exactamente quién era Jesús (Marcos 1:34). Jesús estaba allí cuando Satanás cayó "como un rayo del cielo" (Lucas 10:18). De manera significativa, el diablo eligió un momento en que Jesús estaba físicamente débil y hambriento para atacar Su identidad.
Satanás hace lo mismo con nosotros. Para hacer más efectivas sus artimañas, nos golpea durante una crisis o una lucha espiritual y de esta forma nos sugiere: "Si fueras un hijo de Dios, esto no pasaría. Si fueras realmente un cristiano, Dios te ayudaría ahora mismo". De nuevo, necesitamos el "yelmo de la salvación" firmemente puesto para resistir tales ataques contra nuestra identidad y el carácter de Dios (Efesios 6:17).

3. Torcer las Escrituras. Otra de las artimañas que el diablo utilizó contra Jesús fue citar las Escrituras, pero tergiversándolas. En Lucas 4:10-11, Satanás cita el Salmo 91:11-12 para intentar persuadir a Jesús de que actuara en la carne y no en el Espíritu (ver Gálatas 5:16, 25). Sin embargo, Satanás no logró completar la idea del salmo. El siguiente versículo, el Salmo 91:13, dice: "Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón". Esas referencias a animales son metáforas de enemigos feroces y peligrosos, y el diablo es comparado tanto con un león como con una serpiente en las Escrituras (Génesis 3:15; Apocalipsis 20:2; 1 Pedro 5:8; cf. Romanos 16:20). El verdadero significado del pasaje del Salmo 91 es que Dios protegerá y dará poder a Sus siervos cuando venzan al enemigo, Satanás. Una de las artimañas del diablo es omitir partes clave de las Escrituras para tergiversar su significado y adaptarlo a su agenda.

Estas artimañas del diablo las vemos hoy en día, cuando los maestros de la prosperidad y los falsos profetas citan las Escrituras de manera egoísta y engañosa. Usan suficientemente la Palabra de Dios para que suene con autoridad, pero la tuercen para que se ajuste a sus agendas personales. 
Usar versículos fuera de contexto o sólo aquellos versículos que afirman lo que queremos creer o hacer es un problema generalizado, y la mayoría de las personas que participan no tienen idea de que han sido víctimas de una de las artimañas del diablo.

4. Ofrecer una tentadora alternativa a la obediencia. Otra estratagema o astucia del diablo que utilizó en la tentación de Jesús fue la de sugerir otro camino, evitando la estricta obediencia a la voluntad de Dios. De manera astuta, Satanás sabía que no podía sugerirle a Jesús que olvidara todo el plan de salvación y volviera al cielo. Por el contrario, le ofreció una alternativa. En Lucas 4:5-7, "Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy. Si tú postrado me adorares, todos serán tuyos'". 
Esta tentación iba dirigida a la humanidad del Hijo del Hombre. Jesús ahora sabía lo que se sentía al estar en la carne. Sabía lo que iba a sentir con las espinas en las manos y en los pies. Sabía cómo se sentiría el rechazo y la burla cuando lo desnudaran y lo hicieran caminar ante las multitudes. Satanás le ofrecía un acuerdo. 
¿Y si Jesús pudiera "salvar al mundo" sin tener que sufrir la crucifixión? ¿Y si pudiera tomar un atajo y poseer todos los reinos del mundo ahora?

Una de las artimañas más siniestras del diablo consiste en su habilidad para ofrecer un acuerdo religiosamente contaminado. Sabe que no puede llegar a los creyentes maduros con un ataque frontal a sus valores y convicciones. Así que se cuela por la puerta de atrás, haciéndose pasar por un amigo con una alternativa razonable: "Bueno, sí, técnicamente puede estar mal que alguien se vaya a vivir con un novio, pero puedes darle un mejor testimonio al ver cómo vives tu fe". O esto otro: "No necesitas ir a la iglesia para ser espiritual. Te conectas mejor con Dios a solas en el bosque. De todos modos, esas personas son todas hipócritas, y tú eres demasiado justo para asociarte con ellas". 
Debemos tener cuidado con las artimañas del diablo cuando nos ofrece algo distinto a la obediencia total a la voluntad de Dios.

Los escritores del Nuevo Testamento frecuentemente señalaron las artimañas del diablo para quienes en la iglesia estaban cayendo en ellas, y nosotros deberíamos prestar atención. 
La presencia de falsos profetas (1 Timoteo 6:3-5), entrometidos (1 Pedro 4:15), adúlteros (1 Timoteo 1:9-10) y seductores (Apocalipsis 2:20) forman parte del plan maestro de Satanás para socavar la iglesia desde el interior

Para combatir las artimañas del diablo, los seguidores de Cristo deben permanecer vestidos con la armadura de Dios. Debemos permanecer inmersos en Su Palabra para reconocer el engaño. Y cuando nos demos cuenta de que hemos sido atrapados por las artimañas del diablo, debemos arrepentirnos rápidamente y encontrar ayuda espiritual. El Salmo 37:23-24 alienta a aquellos que desean vivir vidas piadosas: "Por el Señor son ordenados los pasos del hombre, y él aprueba su camino. 
Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, porque el Señor sostiene su mano". Cuando el Señor sostiene nuestra mano, las artimañas del diablo no pueden dañarnos.

martes, 13 de agosto de 2024

LIBROS "EL REGRESO DE LOS DIOSES" y 👥👿💀 "EL MANIFIESTO DE JOSÍAS": EL ANTIGUO MISTERIO Y LA GUÍA PARA EL FIN DE LOS TIEMPOS por JONATHAN CAHN

EL REGRESO 
DE LOS dioses

¡EL LIBRO MÁS EXPLOSIVO DE JONATHAN CAHN!
 
¿Será posible que tras lo que está sucediendo en Estados Unidos de América y el mundo se esconda un misterio oculto en las antiguas inscripciones de Medio Oriente? ¿Acaso están regresando a nuestro mundo las antiguas entidades conocidas como “dioses”? ¿Qué son esos seres misteriosos llamados shedim? ¿Qué es la trinidad oscura?
¿Y cuándo llegaron a Estados Unidos y al mundo? ¿Qué es la casa de los espíritus? Y ¿qué tiene que ver todo eso contigo? En "El regreso de los dioses", Jonathan Cahn te llevará a lo más recóndito del mundo antiguo —Filistea, Sumeria, Asiria, Babilonia, etc.— para encontrar las piezas del rompecabezas que explican lo que está aconteciendo hoy ante la vista de todos. Más aun, Cahn revela el asombroso misterio que se extiende a lo largo de las edades —desde la antigua Akkad hasta la ciudad de Nueva York en nuestros días—, y que está cambiando al mundo.
¿Será posible que hallemos respuestas en la mitología de esos pueblos? Es más, ¿podría el misterio de los dioses haber determinado los días exactos en los que se han dictado algunas de las decisiones más trascendentales de la Corte Suprema de esta nación? Prepárate para un viaje fascinante, inolvidable y alucinante en el que la realidad es más extraña que la ficción y en el que verás al mundo como nunca antes lo viste.
El misterio

¿Será posible que detrás de lo que le está pasando a Estados Unidos de América y al mundo se esconda un misterio oculto en las antiguas inscripciones de Medio Oriente?
¿Es posible que las antiguas entidades conocidas como los “dioses” sean más que ficción y posean una realidad independiente?
¿Es probable que hayan regresado a nuestro mundo?
¿Podrían esas entidades estar detrás de lo que vemos en nuestras pantallas de televisión y en los monitores de las computadoras, lo que encontramos en nuestros centros comerciales, lo que se les enseña a nuestros niños en sus aulas, lo que anuncian e implementan nuestros líderes? 
¿Podrían estar detrás de los acontecimientos actuales, las noticias y los movimientos de nuestro tiempo y de lo que, incluso ahora, está influyendo en nuestras vidas sin que nos percatemos de ello?
¿Será posible que una de esas antiguas entidades visitara alguna vez la ciudad de Nueva York e iniciara una revolución cultural que está transformando nuestro mundo?
¿Quiénes son el Poseedor, la Hechicera, el Destructor y el Transformador? 
¿Y qué tienen que ver con lo que está ocurriendo en nuestra cultura?
¿Podría existir un misterio que se oculte detrás, que explique la señal del arcoíris y la razón por la que está saturando nuestra cultura en la actualidad? 
¿Es posible que ese misterio se remonte a los templos de la antigua Mesopotamia?
¿Podría el misterio de los dioses haber determinado los resultados y el momento en que la Corte Suprema de Justicia estableció sus dictámenes y hasta sus días exactos?
¿Será posible que la dinámica de la mitología antigua se haya desarrollado realmente en nuestras plazas públicas y en las calles de nuestra ciudad en tiempo real?
¿Podrían esos dioses, o entes, ser en realidad los impulsores y catalizadores invisibles de la cultura moderna?
¿Podrían incluso ahora, en este momento, estar trabajando y transformando al mundo moderno sin que se les reconozca?
¿A qué conduce todo esto?
*******
Ahora nos embarcaremos en una travesía que comenzará con los antiguos entes conocidos como shedim. Desprenderemos el velo para descubrir la primera y más importante revelación que subyace tras el misterio de los dioses. Veremos la antigua transformación de los dioses que cambiaron la historia del mundo. Develaremos una antigua advertencia de dos mil años que involucra una casa de espíritus y lo que predice sobre el mundo moderno.
Veremos entonces cómo los dioses del antiguo misterio han venido a nuestro mundo. Descubriremos la trinidad oscura y cómo ha modificado nuestra cultura.

Revelaremos la manera en que los dioses están trabajando y moviéndose en todo lo que sucede alrededor nuestro, cómo inician levantamientos sociales y revoluciones culturales, invadiendo nuestra política, transformando nuestro mundo e incluso nuestras vidas.
Por último, develaremos el significado y la importancia de todo eso, lo que presagia, a qué conducirá y qué debemos saber y hacer a la luz de ello.

*******
Una advertencia: El misterio revelado en este libro tocará las vacas sagradas de nuestra cultura y nuestra época. Abordará lo que se considera inexpugnable, hablará lo que se juzga inefable, cuestionará lo incuestionable y revelará lo que aún no ha sido revelado.
Abordará los temas más radicales y controvertidos de nuestro tiempo, los primeros frentes de la convulsión cultural, las fuerzas catalíticas que ahora están transformando la sociedad, la civilización, la historia y la vida tal como se han conocido hasta ahora.
A medida que avanza, el misterio se volverá más intenso y más explosivo. De modo que, la última parte de la revelación, lo será aún más que la primera.
Al mismo tiempo, tocará esas vacas y temas sagrados de una manera en que normalmente no se abordan, iluminados por la luz de un misterio que se remonta a las edades, a los tiempos antiguos.
Lo que uno haga con las revelaciones está bajo su propio control. El propósito de este libro es revelarlos.

Los dioses han regresado

Estuvieron fuera por mucho tiempo. Los antiguos los exiliaron. Vagaron por lugares áridos y desolados, por desiertos y soledades, entre callejones y ruinas, entre tumbas y sepulcros. Perseguían el subsuelo, los dominios oscuros de lo prohibido, el tabú y los muertos. Habitaban las sombras de las tinieblas.
En sus días de gloria, dominaron tribus y naciones, reinos e imperios.
Subyugaron culturas y oprimieron civilizaciones, infundiéndoles sus espíritus, saturándolas con sus imágenes, poseyéndolas.
Se sentaron entronizados en templos de mármol y santuarios de madera y piedra, junto a árboles y ríos sacrosantos, en arboledas sagradas y santuarios en las cimas de las montañas. Sus estatuas e imágenes talladas miraban a sus adoradores que se acercaban a sus altares con ofrendas y tributos, sacrificios y sangre, incluso víctimas humanas.

Los reyes se inclinaban ante ellos, los sacerdotes les cantaban alabanzas y celebraban sus rituales; los ejércitos partían a la guerra y arrasaban ciudades en su nombre; además, los niños, los ricos y los pobres, los libres y los esclavos por iSus bosques fueron descuidados, sus santuarios abandonados, sus altares desahuciados y sus templos arruinados. Ya no eran adorados ni temidos. Ya no se cantaban sus himnos, ni se participaba en sus festejos, ni se observaban sus días sacros. Ya nadie les creía.
Enviaron a los dioses al exilio. Con el tiempo se convirtieron en recuerdos, ecos y fantasmas. Y luego fueron olvidados.
En los días de su ausencia, surgieron y cayeron reinos, desaparecieron naciones, se derrumbaba un imperio y nacía una nueva civilización.

El mundo que dejaron había desaparecido. En su lugar, había surgido otro que les era completamente extraño. En su ausencia, el hombre cartografió la tierra, venció a la naturaleza, diseccionó el tejido de la vida y codificó el universo.
Los bosques ya no estaban encantados, los santuarios ya no eran sagrados y la naturaleza ya no era mágica. El científico ahora vestía el manto del profeta y las prendas de los sacerdotes fueron reemplazadas por batas de laboratorio. El mundo había sido desencantado.

Fue así que, después de haber desmitificado la tierra y sumergirla en sus nuevos poderes, el hombre decidió que no necesitaba a ningún dios. Y fue entonces y por eso que la antigua puerta se entreabrió. El portal largo tiempo cerrado de los dioses fue reabierto. Así fue su conjuro, su invocación y su regreso.
Y así empezó. Regresaron de los lugares desolados y de los reinos oscuros y prohibidos. Surgieron del subsuelo y de las moradas de los muertos. Salieron de las sombras.

Empezaron a llegar poco a poco, ya que la puerta —al principio— solo se había abierto ligeramente. Si su entrada hubiera sido demasiado rápida, habría sido repelida y la puerta se habría cerrado. Pero al entrar con pasos calculados, pudieron mantener la puerta entreabierta y luego abrirla aún más. Y a medida que se disipara la impresión que seguía a cada uno de sus pasos, la resistencia a su regreso sería superada.

El mundo en el que ahora entraban era diferente del que habían dejado. En el anterior, las ciudades brillaban con la luz de las lámparas de aceite y las paredes estaban adornadas con imágenes talladas. Pero en el mundo en el que entraron ahora, las ciudades estaban iluminadas con corriente eléctrica e imágenes luminosas que se movían a través de vallas publicitarias y pantallas de cine, televisores y monitores de computadoras.

Los dioses no podían gobernar al mundo moderno como lo habían hecho con el antiguo, no de la misma manera. Pero iban a gobernarlo. No regresarían a los lugares altos ni a los bosques ni a sus antiguos santuarios y templos.
Habitarían los nuevos centros de poder por los que el mundo moderno era regido y harían de ellos sus tronos. Se encontrarían con los impulsores e influyentes de la cultura moderna y los convertirían en sus instrumentos.
Para ganar dominio sobre el mundo moderno, no podían aparecer como lo hicieron en la antigüedad. Aunque todavía quedaba un resto de los que los adoraban y los llamaban por sus nombres, estos estaban en los suburbios. Para la mente moderna, los dioses no existen, y pocos les servirían si creyeran lo contrario. Así que los dioses volvieron disfrazados. Alteraron su apariencia.

Tomaron nuevas identidades y se dieron nuevos nombres. Vinieron como espíritus de iluminación, libertad y poder; llegaron como deidades seculares, dioses nuevos, alternos, ídolos que otorgaban la divinidad, deidades que negaban serlo y que declaraban que no había dioses; vinieron como dioses del mundo moderno.
Y así regresaron los dioses. Y una vez de vuelta, empezaron a operar con su magia oscura, aguijoneando e impulsando, tentando y seduciendo, arrastrando, arrancando lo plantado y plantando lo inicuo, volcando, transformando, moviendo los antiguos límites, derribando los antiguos setos y abriendo, a la fuerza, las puertas antiguas. Y a medida que las semillas de su plantación fructificaron y sus espíritus infundieron más y más del mundo moderno, se hicieron aún más poderosos.

Y así, los dioses habitan ahora entre nosotros. Ocupan nuestras instituciones, recorren los pasillos de nuestros gobiernos, emiten votos en nuestras legislaturas, guían nuestras corporaciones, miran desde nuestros rascacielos, actúan en nuestros escenarios y enseñan en nuestras universidades.

Saturan nuestros medios, dirigen nuestros ciclos de noticias, inspiran nuestros entretenimientos y dan voz a nuestras canciones. Actúan en nuestros escenarios, en nuestros teatros y estadios; iluminan nuestros televisores y pantallas de computadoras. Incitan a nuevos movimientos e ideologías y convierten a otros a sus fines. Ellos instruyen a nuestros hijos y los inician en sus caminos. Instigan a las multitudes. Conducen a la gente racional a la irracionalidad y a algunos al frenesí, tal como lo hicieron en la antigüedad. Exigen nuestra adoración, nuestra veneración, nuestra sumisión y nuestros sacrificios.
Los dioses están por doquier. Han permeado nuestra cultura. Han dominado nuestra civilización.
Los dioses están aquí.
*******
Para conocer el misterio de los dioses, debemos remontarnos a la antigüedad y a las entidades conocidas como los shedim.

Epílogo

Escribo ESTO DESPUÉS que terminé el libro. No iba a hacer un epílogo. Pero algo sucedió el día que concluí y tuve que cambiar de idea. Entonces me pidieron que escribiera algo más.
Terminé de escribir "El regreso de los dioses" el 24 de junio de 2022. De todos los
días en los que lo desarrollé, ese fue precisamente el día en el que se dictó el fallo -quizás- más dramático de la Corte Suprema que se recuerde. El tribunal anuló el caso Roe v. Wade, el veredicto que declaró ilegal la prohibición del aborto en cualquier parte del país.

Mi libro anterior, "El Presagio II", en inglés, salió en 2020 (y en español en 2021).
En el capítulo titulado "La plaga" escribí sobre el Jubileo del aborto. En la Biblia, el jubileo era el año de la restauración, la restitución, la redención, la liberación, la libertad, la revocación y la ruina. El jubileo llegaba una vez cada cincuenta años.
El aborto solicitado comenzó en Estados Unidos en el año 1970. Entre sus pioneros se destacó Nueva York. Rápidamente se convirtió en la capital nacional del aborto. El profeta Jeremías advirtió a su nación que el derramamiento de la sangre de sus hijos conduciría al juicio. A la muerte de los pequeños se respondería con el aniquilamiento de la generación que los había asesinado. Una de las formas en que vendría esa muerte, según la profecía de Jeremías, sería en forma de plaga.

El quincuagésimo año después de que Nueva York legalizara el aborto solicitado llegó a su fin en 2020. Fue el año jubilar de la entrada del aborto en Estados Unidos. Ese año la muerte llegó a Estados Unidos de América como en la antigüedad, en forma de peste, la plaga recibió el nombre de COVID-19.
Las conexiones entre lo que sucedió en 2020, cuando la peste azotó a Estados Unidos, y lo ocurrido en 1970, cuando Estados Unidos comenzó a abrazar el aborto, y lo que sucedió después, fueron sorprendentes y espeluznantes. Esas conexiones, que expresé en "El Presagio ll", implicaban correlaciones de lugares, tiempos y fechas exactas. En el año del Jubileo, si tomabas lo que no te pertenecía, lo que tomaste te sería quitado. Estados Unidos de América se había llevado la vida. Ahora, en el año del Jubileo, le sería quitada la vida a Estados Unidos de América.

Sin embargo, hubo otro año y otro misterio, lo que comenzó en 1970 culminó en 1973 cuando la Corte Suprema falló a favor del caso Roe v. Wade y, de hecho, hizo del aborto la ley del país. Eso significaba que se acercaba otro Jubileo.
¿Cuándo fue el añojubilar del fallo del Tribunal Supremo?
El quincuagésimo año comenzó el 22 de enero de 2022 y durará hasta el 22 de enero de 2023.

"En El Presagio II" escribí esto sobre el quincuagésimo año del aborto en Estados Unidos:
El Jubileo fue la inversión de lo que se había hecho desde el último Jubileo.
De forma que, en el año jubilar de 2022, se revirtió lo que había ocurrido en 1973: Roe v. Wade. Lo que se había hecho se deshizo. La Corte Suprema del año quincuagésimo había revocado y deshecho el fallo de la Corte Suprema cincuenta años antes.

El último de los tres dioses que componen la trinidad oscura es Moloc. Él era, como hemos visto, el dios especialmente conocido por el sacrificio de niños y, por lo tanto, el principado más especialmente ligado al aborto y lo que hay detrás de ello. Fue sorprendente que las últimas revisiones necesarias para el libro en los días previos al fallo de la Corte Suprema se centraran en los sacrificios al dios Moloc.

El fallo que anuló Roe v. Wade no puso fin al aborto. No puso fin al reinado de Moloc. Pero sí inauguró una vuelta atrás. En muchas partes de la nación, dejaría inoperables sus altares o los eliminaría por completo.
Hubo momentos en la historia del antiguo Israel en que la nación se salvó al borde deljuicio. Sucedió en los días del avivamiento espiritual, cuando la nación se volvió a Dios. La señal más destacada de ese renacimiento y ese retroceso fue el derribo o la remoción de los altares que salpicaban la tierra en honor a los dioses, específicamente los altares de Baal y Moloc.

A raíz de la decisión de la Corte Suprema en 2022, Estados Unidos sería testigo, en muchas de sus regiones, de la remoción y destrucción de los altares modernos de Moloc. 
¿Sería eso una señal de avivamiento, el comienzo del regreso de una nación a Dios y su restauración? ¿O sería una anomalía por la cual la nación se dividirá aún más mientras continúa su alejamiento de Dios y su caída? Si va a ser lo segundo, entonces el futuro es el juicio. Si va a ser lo primero, entonces debe venir a través de la oración, el arrepentimiento, un verdadero regreso, un auténtico cambio y un indiscutible avivamiento espiritual. El cambio de leyes, al final, fracasará si no hay también un cambio de corazones. Y la transformación de los corazones viene de Dios y a través del avivamiento.

Es significativo el hecho de que "El regreso de los dioses" se completó el día en el que la Corte Suprema, después de cincuenta años, anuló su sentencia sobre el aborto. El libro descubre a los dioses y sus obras en nuestros días. La sentencia de la Corte Suprema fue un retroceso para Moloc. Fue un acto de vida contra la muerte. Fue una resistencia contra los dioses, el derrumbamiento de sus altares.
Y fue una señal para todos aquellos que buscan caminar en las sendas de Dios y que son llamados por su nombre a cobrar ánimo, pasión, fuerza, esperanza y valentía, así como también a vivir sin dobleces ante los dioses. Es tiempo de ser fuertes y de tener buen ánimo. Es hora de ser audaces. Es hora de dejar de lado todo miedo y preocupación, y asumir una posición contra la oscuridad y por la luz.

La oscuridad terminará, pero la luz será para siempre. Y así como está escrito, "fortaleceos en el Señor y en el poder de su fuerza, porque mayor, mucho mayor es el que está en vosotros que el que está en el mundo".
JONATHAN CAHN 
25 de junio de 2022


EL MANIFIESTO DE JOSÍAS 
EL ANTIGUO MISTERIO 
Y LA GUÍA PARA EL FIN DE LOS TIEMPOS 
¿Es posible que exista una respuesta, una guía o un plan que revele lo que debes saber para sobrevivir, mantenerte firme y prevalecer en vista de lo que se avecina?
¿Acaso se nos ha revelado eso en la aparición de una señal de un antiguo misterio que se desarrolla, ante nuestros ojos, en estos tiempos modernos?
El manifiesto de Josías revela los asombrosos misterios ocultos tras los acontecimientos que se desarrollan frente a nosotros. Estas claves despejan la respuesta que guía al manifiesto, para que puedas mantenerte firme y prevalecer en estos tiempos y en vista de lo que está por acontecer. ¡Eso ya está afectando tu vida en este preciso momento! Tan alucinante y explosivo como todos los otros bestsellers del New York Times escritos por Jonathan Cahn, El manifiesto de Josías contiene algo diferente: ¡la respuesta!

¿Podría un calendario de eventos señalados desde hace tres mil años brindarnos el secreto del año más dramático de nuestras vidas, incluso ordenando una plaga, un confinamiento nacional y el cambio en la Corte Suprema de Justicia?
¿Podría un ancestral templo pagano, una oración ominosa y un patrón enigmático estar detrás de los hechos sucedidos en el Capitolio y que estremecieron a la nación?
¿Podría uno de los cambios más cruciales de nuestro tiempo referirnos a un río antiguo, una princesa y un bebé?
¿Podría un rey antiguo revelar el secreto de un presidente estadounidense moderno?
¿Podría una ordenanza dada hace tres mil años haber determinado el ascenso y la caída de un dictador latinoamericano?
¿Podría una serie de misterios del Medio Oriente haber convergido en Washington DC, en una sola hora, para cambiar la historia de Estados Unidos?
¿Hay esperanza? ¿Se nos ha dado una última oportunidad? ¿Y es posible cambiar la historia?
¿Acaso podrían estos misterios contener una clave antigua, un bosquejo, una respuesta y una guía que nos revele lo que necesitamos saber y hacer a fin de que permanezcamos firmes y prevalezcamos en los días venideros, incluso una guía para los últimos tiempos?
¿Es posible que exista una respuesta, una guía o un plan que revele lo que debes saber para sobrevivir, mantenerte firme y prevalecer en vista de lo que se avecina?
¿Acaso se nos ha revelado eso en la aparición de una señal de un antiguo misterio que se desarrolla, ante nuestros ojos, en estos tiempos modernos?

La oscuridad actual
La oscuridad ha sobrevenido al mundo.

Es la misma de antes, pero nueva en su manifestación. En cuanto escribo esto, esa oscuridad permea nuestros medios de comunicación, nuestro entreteni­miento, nuestros mercados, nuestras escuelas, nuestras empresas, nuestras plazas públicas, nuestros gobiernos, nuestra cultura, nuestras vidas. Ella está obrando la transformación de nuestra sociedad, el derrumbe de los antiguos ci­mientos y la destrucción de las ancestrales normas morales, los valores, la per­cepción y la fe.
Estamos ante una oscuridad inclemente, que no solo busca establecerse y crecer, sino ejercer un dominio absoluto, someter todo lo que toque, subyugar el len­guaje, alterar la percepción y rediseñar la realidad a su imagen. Es una oscuridad que requiere que cada lengua confiese su nombre y cada rodilla se doble a hon­rarla. En cuanto a aquellos que desafíen o resistan su conquista, trata de asimi­larlos y transformarlos o destruirlos, incluso derrumbar su disposición a resis­tirla. Es una oscuridad tiránica. No puede descansar hasta que extinga toda luz.

En otros libros he escrito acerca de esta oscuridad, sobre su avance, sus efectos, su juicio y los misterios que se ocultan detrás de ella y que predicen su futuro. A menudo me han preguntado: "¿Hay alguna esperanza?". "¿Qué podemos hacer al respecto?" y "¿Cómo, entonces, deberíamos vivir?".
Hay esperanza. Y hay un modelo que tiene las claves y proporciona una guía so­bre cómo vivir y prevalecer bajo esta oscuridad actual y la venidera. Más que cualquier libro que haya escrito hasta ahora,
EL MANIFIESTO DE ]OSÍAS revelará en detalle y claridad esa respuesta, ese modelo y esa guía.
También ha de responder otras preguntas ...

¿Es posible que los acontecimientos de estos tiempos modernos, incluso los más recientes, sean la manifestación de misterios que se remontan a dos mil quinientos años atrás?
¿Podrían estos misterios haber determinado el momento exacto de una cala­ midad reciente que alterara dramáticamente nuestras vidas?
¿Podrían revelar el modelo de un evento que superó el Capitolio de los Esta­ dos Unidos?
¿Podrían estar esos misterios detrás del ascenso y caída de un dictador sudamericano?
¿Podrían haber alterado la composición y las sentencias de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos?
¿Podría un calendario, con tres mil años de días señalados, revelar el miste­ rio del año más impactante en la memoria reciente?
¿Podrían un niño, un río y una princesa proporcionar la clave para un cam­ bio crucial en el rumbo de Estados Unidos?

¿Podría un antiguo instrumento -que se usaba en tiempos bíblicos para in­dicar el ascenso de reyes, la caída de ciudades, el cambio de épocas y de eras-, y el poder de Dios haber iniciado un cambio histórico en lo que respecta a la civilización estadounidense?
¿Podría un conjunto de misterios del Medio Oriente -que se remontan a los tiempos de los faraones- haber convergido en Washington, D.C., para im­pactar a Estados Unidos en una sola hora, en un solo momento?
¿Se encamina Estados Unidos hacia el juicio y la calamidad? ¿O será el mundo?
¿Hay alguna esperanza?
¿Tendremos una oportunidad de redención en plenojuicio?
¿Es posible que exista una clave, un modelo, una revelación, una respuesta en cuanto a dónde estamos, a lo que nos depara el futuro y a cómo podremos mantenernos firmes, a la luz de todo lo que está por venir, y -además­ prevalecer?

Para encontrar las respuestas, debemos emprender una marcha a través de los misterios proféticos. Esa marcha nos llevará a dos islas -una en el Caribe y otra en el Pacífico- y a dos reyes antiguos, uno que sigue siendo un misterio y, el otro, una revelación. Eso involucrará un enigma, una plaga, dos puertas, dos jueces de la Corte Suprema de Estados Unidos, una deidad de las tinieblas, un calendario de días sagrados, una noche de señales, un mal antiguo, un presagio profético, más de un profeta, una multitud de líderes, una palabra señalada, un niño y un río, una asamblea sacra, una visión, un altar, una redención y un instrumento anti­guo a través del cual se manifestaba el poder de Dios.

En mis libros, por lo general, evito hacer mención de mí mismo. En ese sentido, EL MANIFIESTO DE JOSÍAS es diferente. Apareceré en algunos de los misterios por abrir, porque no podía revelarlos sin dar testimonio de lo que vi y oí directamente.
EL MANIFIESTO DE JOSÍAS llegará a ámbitos en los que nunca antes he entrado. Algunos de los misterios comenzarán donde otros terminaron, como en los de EL PRESAGIO II, EL PARADIGMA, EL ORÁCULO y EL REGRESO DE LOS DIOSES. De esta ma­nera sus revelaciones serán ampliadas o llevadas a sus conclusiones. Tendré que preparar el terreno para aquellos que nunca los han leído ni oído hablar de ellos y refrescar la mente a los que sí lo han hecho. 
EL MANIFIESTO DE JOSÍAS los llevará a su siguiente etapa y revelará lo que durante mucho tiempo me he abstenido de revelar, así como lo que vino después. Y entonces habrá misterios que en el pa­ sado se lanzaron y que ahora aterrizarán.

Nos embarcaremos en un viaje. Uno que abrirá un abanico de misterios, entretejidos unos con otros. A primera vista, es posible que no parezcan estar directamente vinculados entre sí. Y puede que no sea obvio hacia dónde se dirigen. Cada uno será una pieza del rompecabezas de un misterio aun mayor en el que todos encajarán.
En la mayoría de mis libros, el contexto general en el que aparecen los misterios se pudo discernir antes. Pero en este, un misterio y un contexto llevarán a otro y a otro. Pero, a medida que avance la revelación, cada pieza comenzará a encajar con las demás y, en última instancia, en un tiempo y lugar específicos. Esto, a su vez, abrirá la puerta a la revelación final. Revelación que, a su propia vez, proporcio­ nará la respuesta, la clave, el modelo y el manifiesto.

Iniciemos ahora el viaje por un antiguo valle del que surgió la destrucción de una nación.

El Retorno de los Antiguos Dioses con Jonathan Cahn

Profecías del Fin De Los Tiempos Sucediendo Ahora Mismo en América